Aciertos y desaciertos del primer look de Meghan Markle como Duquesa de Sussex..

Meghan Markle, Duquesa de Sussex, en su primer acto oficial tras su boda con el Príncipe Harry. Foto: The Telegraf.
Meghan Markle, Duquesa de Sussex, en su primer acto oficial tras su boda con el Príncipe Harry. Foto: The Telegraf.

Aunque Meghan Markle está acostumbrada a ser el centro de atención, estas últimas semanas han sido un auténtico exámen público. La boda con el Príncipe Harry se convirtió en el acontecimiento social del año. Todos querían ver cómo resultaba la ex-actriz como novia en la boda Real. El resultado fue sobresaliente. Ahora el exámen ha sido su primer acto oficial ya como esposa del Príncipe Harry. Y Meghan ha tenido aciertos y desaciertos con su primer look como Duquesa de Sussex.

Había una enorme espectación por ver al reciente matrimonio formado por Meghan y Harry. Y no hemos tenido que esperar mucho. Los recién casados han aparecido en los actos de celebración por el 70 cumpleaños del Príncipe Carlos de Inglaterra. La cita ha tenido lugar en los jardines de Buckingham Palace. Allí, cogidos de la mano, se presentaron el príncipe Harry y su esposa Meghan Markle.

Así pudimos descubrir el primer atuendo de Meghan como Duquesa ya. Meghan eligió un sencillo vestido en color nude y con trasparencia en el escote y mangas. La Duquesa no quiso arriesgar y por ello apostó por un diseño de la firma Goat, que es una de las firmas de cabecera de su cuñada Kate Middleton. En el mismo tono del vestido, la Duquesa lució una elegante pamela, bajo la cual recogió su melena en un moño bajo.

El atuendo resultó muy favorecedor y adecuado para la ocasión. Sin embargo, no todo funcionó bien en el atuendo. Resulta que hemos observado que Meghan tiene una “manía”. la esposa de Harry se toca permanentemente el pelo. Es una manía bastante habitual en algunas mujeres cuando están nerviosas. A Meghan la hemos visto realizar el gesto de tocarse, y retocarse, la melena en muchas ocasiones. Tocarse el pelo debe tranquilizar a Meghan. Pero, en esta ocasión, la pamela se lo impedía. De ahí que pudimos apreciar como la Duquesa de Sussex permanentemente se llevaba la mano al pendiente, a la pamela o a la boca. Sin duda un moviento reflejo al no poder tranquilizar sus nervios mesándose el cabello. Salvo, ese detalle, la Duquesa de Sussex estaba perfecta.