Yahoo Estilo La actriz de ‘Titanic’ casada con James Cameron se alejó del cine con una meta radical
Hollywood no es precisamente el sueño de todo actor. Porque los sueños cambian. Las metas y los desafíos también. Hay quienes después de llegar a lo más alto encuentran de repente otro camino que les motiva incluso más que seguir trabajando ante las cámaras. Es el caso de Suzy Amis Cameron, la actriz recordada por interpretar a la nieta que acompañaba a la Rose-abuela a lo largo de su relato de amor transatlántico en Titanic. También conocida por ser la esposa de su director, James Cameron.
Cuando Suzy llegó al set de Titanic en 1996 era una actriz con experiencia. Comenzó su carrera como modelo de la agencia Ford en los años 80s para luego debutar en cine con la comedia Fandango (1985) junto a Kevin Costner. Apareció en varias películas a lo largo de la siguiente década, como Blown Away con Jeff Bridges o Sospechosos habituales, hasta que llegó a sus manos el papel de Lizzy, la nieta de Rose interpretada por Gloria Stuart. Titanic fue el mayor éxito de su carrera -y prácticamente el de todos sus implicados- siendo la película mas taquillera de la historia hasta que James Cameron se superó a sí mismo con el estreno de Avatar 12 años más tarde. Sin embargo, a pesar de contar con un título tan destacado en su currículo, Suzy decidió abandonar su carrera un año después del estreno de Titanic.
Se había divorciado de su primer marido y padre de su primer hijo , el tambien actor Sam Robards, en 1994. Es decir, años antes de conocer a James Cameron. No obstante, nunca se supo a ciencia cierta cuándo comenzó el romance con el director. Si hubo affaire en el set o no es un misterio que solo conocen sus protagonistas. Porque durante y después, Cameron mantenía una relación con Linda Hamilton (a quien también dirigió en Terminator y su secuela) y al terminar la película, contrajo matrimonio con ella. La relación no duró mucho y se divorciaron dos años más tarde con un acuerdo que sirvió $50 millones a favor de la eterna Sarah Connor. Y un año después de aquel divorcio, James y Suzy se comprometían de por vida ante el altar.
Suzy Cameron había rodado tres películas después de Titanic,todas ellas pequeñas y sin relevancia comercial, y entonces decidió dejar su carrera para enfocarse en su familia (tuvo tres hijos con Cameron). Sin embargo, sus prioridades no tardaron en cambiar, encontrando un propósito vital que comparte con su marido y que intentan promover por Hollywood y el mundo todo lo posible.
Para empezar, Suzy siempre había estado interesada en una alimentación sana a base de alimentos orgánicos y en 2005 fundó una escuela privada en California. La llamó Muse y en ella promueven una educación sostenible y “holística” desde los primeros años escolares hasta el último año del secundario.
Sin embargo, aquello era solo el comienzo. Porque una película en particular cambió su meta para siempre.
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Un buen día se dispuso a ver con su marido Forks over knives, un documental activista del año 2011 que promueve una dieta basada en plantas, vegana y baja en grasas, exponiendo los peligros de consumir productos procesados para la salud pero también destruyendo mitos como la supuesta necesidad de consumir leche de vaca para tener huesos y dientes fuertes. Después de ver aquel documental no hubo vuelta atrás. A 24 horas del visionado habían vaciado todos los alimentos que tenían en la casa y que no estaban basados en plantas.
De todos modos, para la pareja no se trata solamente de consumir una dieta vegana por una cuestión saludable, sino ecológica tambien. “La agricultura animal es el contribuyente número dos del cambio climático – un poco más alto que toda la polución del transporte combinada” explicaba a Oprah en 2019. “Lo que pones en tu plato importa enormemente, no solo por tu salud, sino por el estado del medio ambiente”.
Después de pasarse al veganismo comenzaron a predicarlo a todos sus amigos y seres queridos, viendo que empezaban a generar rechazo imponiendo su mensaje. De esta manera, optaron por encontrar otra vía para llevar al mundo lo que estaban promoviendo y crearon ‘The OMD Plan’, un modelo activista que promueve el consumo de un alimento basado en plantas al día. No el veganismo radical, sino un plato al día.
“Si comes un solo plato basado en plantas cada día como una de tus tres comidas, estarás salvando miles de litros de agua cada año y reduciendo drásticamente tu emisión de carbono. Sin mencionar los beneficios para la salud” explicó a Oprah. Este desafío lo implementaron en las escuelas de Muse donde los niños compiten para ver quién ahorra más agua a base de una alimentación vegana.
Además, en 2017 fundaron Verdient Foods, una compañía canadiense establecida para introducir cambios en los procesos agrícolas e industriales en el mercado de las proteínas vegetables para que sea más sostenible y rentable. En 2020 la vendieron pero solo después de haber difundido el mensaje a través de The Game Changers. Se trataba de un documental producido por James Cameron y presentado por Arnold Schwarzenegger que sacudió al mundo del culturismo al exponer en 2018 que los atletas no necesitan carne para el rendimiento. Fue todo un éxito en cuanto al debate y conversación que generó entre aficionados al deporte.
Pero eso no es todo. Cuando Suzy se preparaba para acompañar a su marido a la ceremonia de los Oscar en 2010 por Avatar, se dio cuenta que no existían opciones sostenibles en la moda hollywoodense. Y en ese momento adoptó una nueva misión: cambiarlo para siempre. De esta manera decidió fundar Red Carpet Green Dress, una iniciativa ecológica que promueve la moda sostenible en la industria del cine creando vestidos hechos de telas sostenibles, ya sean recicladas o reutilizadas. Desde entonces varias estrellas han llevado diseños promovidos por su movimiento, como Kaitlyn Dever, Laura Harrier, Marlee Matlin, Zoe Saldana y Henry Cavill.
Además, en 2018 Suzy publicó El plan OMD: Cambia una comida al día para mejorar tu salud y salvar el planeta, un libro que explica la campaña diseñada junto a James Cameron de consumir una comida vegana al día, con recetas e ideas incluidas. Incluso sus redes sociales están repletas de opciones para probar en la cocina.
Suzy Amis Cameron no se quedó de brazos cruzados cuando decidió dejar el cine. Encontró la manera de poner en práctica la pasión más personal que comparte con su marido. Una que es ecológica y saludable, sin imponer su mensaje ni predicarlo. Ellos dan la información, la comparten y promueven. Ya está en cada uno quien quiera seguir sus pasos.
