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Amores imposibles que acaban mal (la erotomanía)

Las personas que se ‘enamoran’ de un famoso o de alguien con una posición social, que resulta inalcanzable, ¿son inofensivas o pueden convertirse en peligrosos acosadores?

Al principio la intención es poder conocer a su ídolo y estar más cerca de ella. Pero en casos como el del acosador de Taylor Swift, las cosas se salieron de madre y <a href="http://www.elmundo.es/loc/celebrities/2018/04/18/5ad771e6e2704e364c8b460b.html" rel="nofollow noopener" target="_blank" data-ylk="slk:acabaron arrestándole;elm:context_link;itc:0;sec:content-canvas" class="link ">acabaron arrestándole</a>. (Foto: Getty)

Hay muchos tipo de relaciones tóxicas, pero esta resulta inquietante porque una de las partes desconoce por completo que el protagonista de una historia de amor irreal. Y es que idealizar a alguien y fantasear con ser su pareja no es nada malo. Todos hemos construido historias imaginarias y nos hemos sentido atraídos por el hermano mayor de una amiga, un vecino o por un profesor. Pero una cosa es construir castillos en el aire y ser conscientes de que son sueños o ilusiones irrealizables, y otra sufrir un trastorno delirante.

Esa obsesión amorosa de la que quiero hablarte recibe el nombre de ‘Erotomanía’, y es una forma de delirio paranoico en el cual la persona tiene la convicción absoluta de que posee una relación de amor con una persona generalmente de una posición social superior o que de alguna forma le resulta inalcanzable. Puede ser una figura pública muy conocida en la televisión, la política, un médico o incluso un cura, entre muchos otros.

En El Guardaespaldas, Whitney Houston sufre las consecuencias del delirio pasional de un fan enloquecido. (Foto: Estudio 54)

También llamada delirio de ser amado, síndrome de Clérambault o delirio de pasión amorosa, consiste en la convicción delirante de ser amado por una persona, y comienza como una ilusión amorosa pero con el tiempo puede ir adquiriendo tintes sexuales, y el afectado está completamente seguro de que la otra persona (también) se ha enamorado.

Incluso se autoconvence de que tiene una relación con dicha persona. Es más, en la mayoría de los casos suele atribuirle el comienzo de la relación y ven pruebas irrefutables de su amor en las acciones más insólitas.

Cuando les ven actuar o les escuchan, por ejemplo, hablar en la televisión creen que se están refiriendo a ellos y que todo son señales o claves de su amor

Sin embargo, esa esperanza de mantener una relación se va diluyendo para dejar paso de manera paulatina a la decepción, la ira y el rencor. Es decir, la persona va modificando su actitud, sentimientos y comportamiento al caer en la cuenta de que no es correspondido.

Los que sufren de ‘erotomanía’ viven en la certeza de que la persona popular está completamente enamorado de ellos y son incapaces de ver la realidad. (Foto: Getty/thinkstockphotos)
Los que sufren de ‘erotomanía’ viven en la certeza de que la persona popular está completamente enamorado de ellos y son incapaces de ver la realidad. (Foto: Getty/thinkstockphotos)

Este tipo de personas padece un trastorno afectivo-emocional descrito por primera vez a primeros del S.XX por el psiquiatra Gaetan Gatian de Clérambault (1872-1934). Por suerte, es un trastorno delirante poco común y se suele presenta en personas solteras, más en mujeres que en hombres, en una relación de 3 a 1. La edad aproximada en la que aparece es igual o mayor a 30 años.

En cuanto al perfil, los expertos afirman que la psicosis pasional suelen padecerlas personas algo aisladas, sin empleo y con pocos contactos y habilidades sociales.

En algunas personas el amor no correspondido desemboca en trastornos mentales y del comportamiento que necesitan ser tratado para no acabar en tragedias. (Foto: Getty)
En algunas personas el amor no correspondido desemboca en trastornos mentales y del comportamiento que necesitan ser tratado para no acabar en tragedias. (Foto: Getty)

Entre las características típicas destacan estas:

  • No es sólo un amor romántico y espiritual, también hay atracción sexual.

  • Está convencido de que su amado le corresponde pero algo les impide estar juntos.

  • Cree que la persona amada se comunica por medio de clavese interpretan cualquier cosa como una señal, imaginando que hay mensajes ocultos, por ejemplo, en el movimiento de unas cortinas o en las canciones que suenan en la radio. Hubo un caso muy famoso de una mujer que aseguraba que su amado le hacía llegar mensajes a través de placas de matrícula en coches con los que se cruzaba, de la presencia del color morado en algunos objetos y de otras señales camufladas que él le enviaba.

  • Normalmente la ‘victima’ no tiene ni idea del amor desmedido que sienten hacia ella pero poco a poco empieza a darse cuenta de que algo pasa porque empiezan a sucederse situaciones absurdas o extrañas, llamadas telefónicas, cartas, regalos, visitas e incluso puede sentir que alguién le vigila o acecha.

Ante estos casos es fundamental acudir a la policía y denunciar un acoso que puede terminar de forma trágica.

¿Conocías este síndrome? ¿Alguna vez te ha gustado alguien y has interpretado mal alguna de sus señales?

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