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Cómo elegir y usar repelentes de insectos

Texto: Raúl Rodríguez Cota

Un buen repelente de insectos se podría convertir en tu mejor amigo si lo eliges y usas bien. Sin embargo, no deberías escoger cualquiera, ya que hay algunos que serían más seguros para tu salud que otros. Entérate más.

Si escoges los adecuados y los usas correctamente, podrías beneficiarte enormemente de los repelentes. – Foto: skynesher/Getty Images
Si escoges los adecuados y los usas correctamente, podrías beneficiarte enormemente de los repelentes. – Foto: skynesher/Getty Images

Escoge lo mejor

Si estás buscando algún producto que te libere de los molestos insectos, lo más recomendable es usar los que tengan ingredientes activos que hayan sido registrados en la Agencia de Protección Ambiental de los Estados Unidos (EPA, por sus siglas en inglés), de acuerdo con los Centros de Prevención y Control de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés).

Es preferible comprar estos productos; ya que, si los usas siguiendo las instrucciones, habría una menor probabilidad de que perjudiquen tu salud o el ambiente donde los apliques, según informó el CDC.

De los repelentes aprobados por la EPA, los que contienen DEET, icaridina (picaridina), IR3535 y algunos aceites de eucalipto de limón y p-menthane-diol, serían los que te proporcionarían una protección mucho más duradera, según los CDC. Por eso, revisa bien en las etiquetas para ver si llevan estas sustancias.

El DEET -también conocido como N,N-dietil-meta-toluamida- es un ingrediente activo que se encuentra en muchos repelentes de insectos. Las marcas que tienen DEET suelen ser muy seguras y habrían provocado muy pocos incidentes de reacciones alérgicas al usarse correctamente, según señaló el portal médico WebMD.

Úsalos, pero con cuidado

Además de usar repelentes que tengan las sustancias anteriormente mencionadas, también podrías tomar las siguientes precauciones compartidas en WebMD:

– No apliques insecticida sobre cortaduras, heridas o piel irritada, ni en el rostro directamente. Mejor, pon un poco en tus manos y luego en el rostro.

– Usa el suficiente repelente de insectos como para cubrir la piel expuesta y la ropa.

– Cuando llegues a tu hogar, lávate muy bien con agua y jabón para que remuevas los químicos de tu piel.

– Lava la ropa en la que echaste repelente antes de volver a usarla.

Protege a los más pequeños

Debido a que los niños, frecuentemente, ponen las manos en sus ojos y bocas, se recomienda que uses productos que tengan las siguientes indicaciones en la etiqueta, según la Agencia de Protección Ambiental de EEUU (EPA, por sus siglas en inglés):

– No permitas que los niños manejen el producto ni tampoco le eches repelente en las manos.

– Cuando estén en el hogar, lávale la piel y la ropa con agua y jabón.

– Ya mencionamos que el aceite de eucalipto de limón sería inofensivo para los adultos. Sin embargo, no debería utilizarse en niños menores de tres años.

Aunque estos productos te podrían defender de los incómodos insectos, valdría la pena que no los usaras tan a la ligera y que tomaras en cuenta todos los consejos aquí señalados.

Ante cualquier duda, consulta con un médico.

Cuéntanos, ¿qué insectos son los que te molestan más?

@RaulRodCota

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