Cómo hay que tomar el colágeno para que realmente funcione

Los suplementos de colágeno están disponibles en tres formas principales: hidrolizados, crudos o como gelatina. (Foto: Getty)
Los suplementos de colágeno están disponibles en tres formas principales: hidrolizados, crudos o como gelatina. (Foto: Getty)

Una de nuestras principales preocupaciones hoy en día es mejorar nuestra salud física y mental para sentirnos mejor. Entre los posibles 'remedios' y soluciones que tenemos a mano, hay uno que se han puesto de moda y del que se está hablando mucho: el colágeno. Desde que el mundo se enteró de que Jennifer Aniston, Cara Delevingne, Cameron Díaz o Madonna lo toman, entre otras celibrities patrias como Eva González, su fama ha subido como la espuma.

El colágeno es un componente natural de la piel y el cabello que actúa como una proteína anti-edad, cuya presencia determina la firmeza y la elasticidad de la piel según han sugerido algunas investigaciones. Para entenderlo, la proteína actúa como una especie de andamiaje que sustenta la estructura. Es un tejido de soporte que con la edad se desestructura y la piel pierde firmeza y se arruga o se descuelga. Funciona como una especie de red protectora.

Pero además de ayudarnos a luchar contra el estrés oxidativo y las arrugas, el colágeno también es importante para las uñas, las articulaciones, cartílagos, huesos... y proporciona un empujón de energía para el sistema inmunitario.

GUÍA | Los pasos que tienes que seguir para poder ver un post de Instagram no disponible por tus preferencias de privacidad

Sin embargo, existe cierta controversia y opiniones encontradas sobre la forma más adecuada de tomar el colágeno y sobre ciertas afirmaciones como que podría ayudar a protegerse contra la osteoporosis, una afección en la que los huesos se debilitan, se vuelven quebradizos y es más probable que se fracturen.

Aunque los beneficios potenciales son prometedores, no hay mucha investigación sobre los efectos de los suplementos de colágeno en los huesos, los músculos y otras áreas. En todo caso, las investigaciones apuntan a que el colágeno es más eficaz cuando se combinan con entrenamiento de resistencia, y con ácido hialurónico o magnesio. También puede ir acompañado de otros elementos como el silicio, vitaminas o sustancias como el condroitín sulfato o el sulfato de glucosamina. Lo importante es la 'concentración' de colágeno.

Cuando el cuerpo es joven, tienen a fabricar importantes cantidades de colágeno. Sin embargo, a medida que envejecemos, la producción natural de colágeno en nuestro cuerpo disminuye y factores externos, como el sol o el estrés, contribuyen a una rápida descomposición de esta proteína.

"A partir de los 25 años se pierde un 1,5 por ciento de colágeno al año. Y a partir de los 30-35 se deteriora", cuenta en La Vanguardia la doctora Sara Segovia, licenciada en Medicina y Cirugía por la UB y máster en Medicina Estética y fundadora de Código 372, empresa distribuidora de Gold Collagen.

En este caso no podemos decirte que podrás combatir la pérdida del colágeno con la alimentación, porque es una sustancia que apenas se encuentra en los alimentos. Está presente en cartílagos de la carne, gelatinas o piel y espinas de pescado. Por ejemplo, la piel de pollo y los cortes de carne gelatinosos son excelentes fuentes.

Gelatina, huevos, pescado, verduras, frutas cítricas que contienen colágeno y son necesarios para tener una piel joven y unas articulaciones fuertes. (Foto: Getty)
Gelatina, huevos, pescado, verduras, frutas cítricas que contienen colágeno y son necesarios para tener una piel joven y unas articulaciones fuertes. (Foto: Getty)

Se calcula que a los 40 años el organismo produce la mitad de colágeno que en la adolescencia. Esta reducción en los niveles de producción provoca, entre otras cosas, la pérdida de elasticidad y flexibilidad de la piel, dolores en las articulaciones y músculos, osteoporosis, deterioro en la vista, deficiencias circulatorias, molestias en dientes y encías. Un deterioro que va a más con la vejez.

Por eso, algunos expertos recomiendan tomar colágeno adicional a partir de los 40, en dosis que oscilan entre 40 mg y 10-15 gramos, que parecen ser potencialmente efectivas y tener efectos secundarios mínimos.

"Para no perder elasticidad, mantener una buena hidratación y prevenir arrugas, es conveniente tomar complementos de colágeno y seguir una alimentación rica en vitamina C, que ayuda a crearlo, aunque no en la cantidad que necesitamos”, apunta Segovia.

Aunque incorporar este elemento a través de la alimentación resulta prácticamente imposible, hay muchas formas sencillas de incorporarlo en forma de suplementos a tu dieta. Por ejemplo, se puede beber disolviéndolo en ciertas bebidas y líquidos; la actriz de Friends lo añade cada mañana a su taza de café después de su entrenamiento.

GUÍA | Los pasos que tienes que seguir para poder ver un tuit no disponible por tus preferencias de privacidad

Estos suplementos de colágeno hidrolizado por vía oral también se pueden tomar en forma de comprimidos o cápsulas, pero la tendencia que no para de crecer es tomarla en polvos solubles o bebidas como Hairlift Elite (de Gold Collagen), especialmente indicado para el cuidado del cabello, el bienestar y el estado de ánimo, que además de Colágeno Marino, lleva triptófano, L-Teanina, vitamina D y ácido fólico.

En los últimos años las empresas han ideado formas más apetitosas de tomarlo -incluidos masticables afrutados, cremas de café con sabor a vainilla, bolsitas individuales y cápsulas fáciles de tragar-, lo que ha provocado que el colágeno comestible se haya puesto de moda. Un ejemplo es Beauty&Go, bebida enriquecida con macro-antioxidantes que alimenta la piel

No estamos diciendo que tengas que lanzarte cual posesa a consumir alimentos como patas de cerdo, aletas de tiburón o piel de pollo con la esperanza de recuperar la piel 'marchita' y preservar las articulaciones envejecidas. Para nada, pero los suplementos pueden "aportar colágeno en una forma que al cuerpo le resulta más fácil de absorber". Se trata de una opción más que puede funcionar a largo plazo, y gracias a una pequeña pero creciente evidencia que sugiere que puede mejorar la piel, aliviar los síntomas de la artritis, promover la cicatrización de heridas y evitar el desgaste muscular, algunos escépticos están empezando a cambiar de parecer.

“Existen estudios científicos que demuestran que la ingesta de colágeno hidrolizado estimula la regeneración del colágeno tisular y de la matriz extracelular”, sostiene Montse Folch, experta en Nutrición y Dietética y doctora del Centro Médico Teknon (Barcelona). Folch es partidaria de recomendar este suplemento ya que los resultados, según su experiencia profesional, “son positivos” si se toma de forma regular en dolores articulares, fatiga, buen estado de la piel… “La absorción del colágeno es mayor si es hidrolizado, el cual logra atravesar las paredes del intestino y llegar a los tejidos”, añade.

Pero, ¡ojo! No es una píldora milagrosa ni una fuente de juventud eterna. Este tipo de productos deben ser siempre un complemento a nuestra dieta, a las cremas y a un estilo de vida saludable con una cantidad limitada de azúcar, que ha sido vinculada al envejecimiento prematuro de la piel. No obstante, los científicos insisten en que se necesitan más estudios para llegar a una respuesta definitiva sobre sus efectos.

La forma más popular de tomar el colágeno es añadiéndolo al café o diluido en zumos y batidos. Algunos nutricionistas recomiendan que el colágeno y la vitamina C vayan de la mano para un mejor absorción en el organismo. Asimismo, si eres una persona muy deportista y practicas deportes con mucho impacto en las articulaciones y rodillas podrías empezar a tomar el colágeno antes de los 40 años. Y si vas someterte a una operación, te lo pueden recomendar porque ayuda a mejorar la cicatrización.

"No frena la artrosis pero sí puede ayudar a retrasar su aparición y ante el dolor mejora los síntomas, refuerza los cartílagos, los tendones, la zona de las articulaciones", explica Mar Menéndez-Castañedo, farmacéutica y vocal de Alimentación del Colegio de Farmacéuticos de Asturias.

En qué casos se recomienda y en cuáles no

No es un preparado peligroso, pero antes de decidir ingerir suplementos de colágeno por tu cuenta, tienes que buscar un diagnóstico de tu problema.

  • Si eres una persona joven y sana no es el momento de tomarlo porque, al menos de momento, no te harán falta este tipo de productos.

  • Si eres una persona de cierta edad (ya que vamos perdiendo gradualmente la capacidad de generarlo) o tienes algún problema nutricional, puedes consultar al tu médico si te conviene tomar algún tipo de suplemento de este tipo.

  • Para intentar mejorar la calidad del cartílago de tus articulaciones (por ejemplo si tienes condromalacia rotuliana). En cualquier caso el traumátologo es quien debe indicarlo.

  • Si tienes una enfermedad crónica que te provoque algún déficit en la dieta o en la absorción de nutrientes.

  • Si padeces artrosis, artritis reumatoide u osteoporosis, consúltalo con tu médico.

  • O si sufres dolores articulares crónicos.

No solo resulta beneficioso para personas que ya sufren alguna dolencia articular o a partir de una determinada edad, también lo aconsejan a gente joven que ha superado la treintena y practica deporte. "Hay muchos amantes del running y las rodillas lo agradecen", apunta r Menéndez-Castañedo.

Te interesará saber que los suplementos de colágeno generalmente son seguros para la mayoría de las personas. Sin embargo, se han informado efectos secundarios leves que incluyen náuseas , malestar estomacal y diarrea.

Por otro lado, aunque los suplementos de colágeno contienen elementos presentes en tu cuerpo de forma natural, fíjate antes de comprarlo en la composición que indica el fabricante para evitarte posibles problemas. Hay que tener en cuenta que algunos preparados de colágeno pueden contener alérgenos, como pescado. Si tienes alguna alergia (sobre todo a la proteína animal o a la sucralosa, un edulcorante alimentario), asegúrate de revisar bien la etiqueta para evitar cualquier colágeno derivado de esa fuente. También debes tener precauciones si tienes intolerancia a la fenilalanina o a la lactosa.

Además, como los suplementos de colágeno generalmente provienen de animales, la mayoría de los tipos no son adecuados para veganos o vegetarianos, aunque hay excepciones. Hay colágeno de distinto origen (marino, vegano…) y puede ir acompañado de ácido hialurónico, magnesio, silicio, antioxidantes como el resveratrol o la vitamina C, elastina y hasta de cacao (para mejorar el sabor). Todo depende de lo que busques y el objetivo que te marques.

Más historias que pueden interesarte:

Llega a España una crema de bebé que sirve para cortes, rozaduras, quemaduras, acné y eccemas

Brumas faciales: ¿un timo o un potente aliado para la salud de la piel?

Cremas cosméticas con cannabis: ¿colocan o son realmente seguras?

Cremas de la colmena: el truco para reparar la piel tras una quemadura solar