El Congreso español aprueba una ley pionera de salud sexual y reproductiva

Clínica privada Dator en Madrid

MADRID, 15 dic (Reuters) - El Congreso de los Diputados español aprobó el jueves una ley de salud sexual y reproductiva que permite a las jóvenes de 16 y 17 años abortar sin consentimiento paterno, así como, por primera vez en un país europeo, ofrece permisos remunerados financiados por el Estado a las mujeres que sufran menstruaciones dolorosas.

"Estos avances son los que permiten que ejerzamos la libertad sobre nuestros cuerpos, que el Estado reconozca la ciudadanía plena de más de la mitad de la población", dijo ante los diputados la ministra española de Igualdad, Irene Montero, antes de una votación que se aprobó con una mayoría de 190 votos a favor, 154 en contra y cinco abstenciones.

El Gobierno de coalición español de izquierdas había presentado en mayo el proyecto de ley, que contó con la oposición de activistas antiabortistas y de la Iglesia católica, con el objetivo de garantizar el acceso al aborto y desestigmatizar la salud menstrual.

La nueva ley suprime el periodo obligatorio de "reflexión" de tres días para las mujeres que deseen interrumpir su embarazo, eliminando además la necesidad de que las menores de edad de 16 y 17 años obtengan el consentimiento de sus padres o tutores para abortar. Este requisito había sido instaurado por el anterior Gobierno del conservador Partido Popular en 2015.

También incluye permisos retribuidos para las embarazadas a partir de la semana número 39, garantiza la distribución gratuita de productos menstruales en instituciones públicas como colegios, cárceles o centros de salud, y designa los embarazos subrogados -ilegales en España- como una forma de violencia contra la mujer.

Lourdes Méndez, del partido de extrema derecha Vox, dijo que al declarar el aborto un derecho humano, la ley "violenta" la Constitución española y pone patas arriba el sistema de valores de España.

Méndez afirmó que la ley sólo persigue un "único fin" para la mujer, que según ella consiste en "que ante un embarazo imprevisto o ante un bebé que pueda nacer con alguna discapacidad, solo se tenga una salida: la eliminación de la vida de su hijo", dijo.

Sonia Lamas, portavoz de la clínica de salud de la mujer Dator, dijo a Reuters en una entrevista en mayo que la clínica acogía con satisfacción estas medidas.

Lamas afirmó que el llamado periodo de reflexión es innecesario, porque "las mujeres tomamos decisiones muy informadas y no nos hace falta reflexionar sobre algo que ya tenemos decidido".

La clínica se ha enfrentado a protestas de opositores al aborto, que celebran regularmente oraciones en grupo y organizan manifestaciones frente al edificio.

Lamas dijo que los grupos llevan a cabo campañas "para abordar a las mujeres en el espacio de seguridad que tendría que ser el acceso a las clínicas acreditadas".

La ley se dirige ahora al Senado español para su aprobación definitiva.

(Reporte de David Latona, Susana Vera y Elena Rodríguez; edición de William Maclean; editado en español por Darío Fernández)