¿Cuál es tu tipo de cuerpo según el sistema Kibbe?
A David Kibbe no le sorprende que su método para realzar la belleza individual haya perdurado tanto tiempo. “No hay nada como esto, y nunca ha habido algo parecido”, afirmó.
Como consultor de imagen que se formó en la era de las clasificaciones de belleza de los ochenta, cuando todas las mujeres tenían una “estación del año” y conocían la forma de su rostro, Kibbe creó su sistema de clasificación de cuerpos como un correctivo para lo que él llamó un asesoramiento de estilo “basado en el miedo” que les decía a las mujeres que debían minimizar sus rasgos.
En vez de decirles a las mujeres de baja estatura cómo verse más altas y enseñarles a las mujeres delgadas trucos para verse con más curvas, buscó ayudarlas a comprender y aceptar sus siluetas, que categorizó en 13 tipos. En lugar de usar el léxico literal de “recto” y “curvilíneo”, utilizó un lenguaje aspiracional para enfatizar la belleza de cada tipo de cuerpo.
En los años ochenta y noventa, el sistema Kibbe fue una guía bienvenida, por no decir revolucionaria, para vestirse. Kibbe apareció en los programas de televisión de “Oprah” y “Today”, la revista People publicó un perfil sobre él, y se convirtió en un experto de referencia en la cobertura de temas de estilo de vida, incluso para The New York Times.
Sin embargo, hoy en día, el libro en el que codificó su sistema, “David Kibbe’s Metamorphosis: Discover Your Image Identity and Dazzle as Only You Can”, está fuera de circulación y es casi imposible de encontrar. (La copia más barata en Amazon se vende por 464,95 dólares). Los consejos que se comparten en los fragmentos en línea se sienten anticuados: a los tipos de cuerpo “dramático” se les aconseja que “las hombreras son esenciales en todas tus prendas, sin excepción”, y a los cuerpos “románticos” se les motiva a comprar “maletines delgados y elegantes”.
Pese a todo esto, el método Kibbe se está afianzando en una nueva audiencia digital. En TikTok, los videos con la etiqueta #kibbebodytypes (tipos de cuerpo Kibbe) atraen cientos de miles de vistas. El foro Kibbe en Reddit ha crecido de menos de 5000 miembros a principios de 2020 a más de 30.000.
En los rincones del internet enfocados en la belleza, es posible que encuentres a alguien que se identifica como “natural extravagante” en busca de consejos sobre cómo vestir su estructura ósea “desafilada”, o un video que analiza el equilibrio de “yin” y “yang” de la estrella de “Euphoria” Alexa Demie. También hay una variedad de “tests” en línea que prometen dilucidar cuál es tu tipo.
Ver estas interpretaciones de su trabajo ha sido “maravilloso, y alarmante”, según comentó Kibbe durante un almuerzo en el Cafe Luxembourg el Día de San Valentín, donde portó un abrigo color naranja, una corbata azul estampada con un pañuelo de bolsillo a juego, y una chaqueta de terciopelo amarillo mostaza (dijo que su tipo es romántico teatral, y otoñal).
Le preocupa que algunos de los principios contenidos en su libro se hayan sacado de contexto. Le molesta cuando los influentes de TikTok afirman conocer los tipos de otras personas.
“Para poder hacer esto para alguien más, debes estar capacitado”, aclaró.
‘Todos quieren ser atractivos’
Durante su infancia, en un pequeño pueblo de Misuri, a Kibbe, de 66 años (aunque se “desconectó” de las edades numéricas “hace años”), le fascinaban las divas del cine como Vivien Leigh y Katharine Hepburn, que le ayudaron a formar la base de su esquema de complexiones.
El sistema Kibbe se basa en los arquetipos de la época clásica de Hollywood y en un equilibrio entre lo que él llama el “yin” (la suavidad, las curvas) y el “yang” (los ángulos y bordes pronunciados). Si tienes más yang —eres alta y esbelta con hombros puntiagudos, como Katharine Hepburn— tal vez eres de tipo dramático. Si tienes más yin, con curvas suaves como Marilyn Monroe, quizá eres un tipo romántico.
En el medio se encuentran los tipos naturales (con yang dominante, pero “desafilado” en lugar de pronunciado, a menudo con hombros anchos, como una supermodelo de los noventa), clásicos (tipo Grace Kelly) y gallardos (menuda, con contrastes marcados). Los tipos se modifican con adjetivos como “suave” (por ejemplo, Sophia Loren es dramática suave) o “extravagante” (Audrey Hepburn es gallarda extravagante). Cada uno cuenta con un conjunto de lineamientos sobre los atuendos que más le favorecen.
“El glamur es importante”, afirmó Kibbe. “Es atractivo. Y todos quieren ser atractivos”.
Los distintos tipos ilustran una noción un poco más integral de la belleza que la que suele presentarse en las revistas femeninas, que, hasta la fecha, siguen mostrando a las mujeres altas y delgadas como el estándar.
“Cuando descubrí el método Kibbe, me di cuenta de que no tienes que verte así para ser mujer, y ser hermosa”, relató Ellie-Jean Royden, de 20 años, de Norfolk, Inglaterra, una consultora de estilo que se describió a sí misma como clásica suave y publica videos frecuentes sobre los tipos Kibbe en TikTok. Comentó que no le fue difícil adaptar su estilo a algo más compatible con el sistema Kibbe: cambió los pantalones de mezclilla y las blusas holgadas por vestidos a la medida. “Me dio permiso de dejarme llevar por lo que me gusta, que son los estilos clásicos”, señaló Royden.
Eso no quiere decir que el sistema no tiene fallas. La especificidad y complejidad de la clasificación de Kibbe puede llevar a las mujeres a analizar su apariencia a un grado obsesivo. Y como el sistema original se basó en actrices blancas y esbeltas, muchas ilustraciones populares en línea de los 13 tipos Kibbe carecen de diversidad.
De la página impresa a la sección ‘Para ti’
A Kibbe le alegra ver que su trabajo esté llegando a una audiencia en línea. Él mismo a menudo participa en el grupo de Facebook llamado Strictly Kibbe, al que se debe presentar una solicitud de admisión para entrar. (Todos los solicitantes deben afirmar que “el método de David es el único que vale en el universo de Strictly Kibbe” y que “la palabra de David es la ley porque esta es su creación”).
Sin embargo, tiene sentimientos encontrados sobre el énfasis y la urgencia con que la mayoría de las comunidades en internet quieren encontrar su tipo de cuerpo. Él ve su sistema como una travesía que es más conveniente vivir en las sesiones de consulta privada que siguen constituyendo la mayor parte de su negocio. Kibbe habla con entusiasmo sincero sobre los clientes que ha tenido, incluidas una mujer transgénero de bajos ingresos con quien trabajó gratis y una pareja adinerada de Silicon Valley que buscaba pulir su imagen profesional: todos eran tan bellos, tan apasionados, tan especiales, tan únicos.
“Las identidades de imagen son como el país que habitas, pero tú eres un individuo, una ciudad o un vecindario en ese país”, explicó. La belleza, agregó, “nace de la individualidad”.
c.2022 The New York Times Company