Yahoo Estilo La curiosidad que esconde el instituto de 'El desorden que dejas', la nueva serie de moda
Este viernes se estrenó en Netflix El desorden que dejas, la nueva ficción española de la plataforma, protagonizada por Bárbara Lennie, Inma Cuesta, Tamar Novas y Aron Piper, entre otros. Rápidamente, la serie se situó en el ranking de lo más visto que ofrece el catálogo, y los espectadores empezaron a señalar algunos de los aspectos más reseñables de la producción, que se ha rodado enteramente en Galicia, convirtiéndose así en la primera del gigante estadounidense en hacerlo. La sinopsis explica, a grandes rasgos, cómo se entrelaza la historia de dos mujeres, profesoras de un instituto en el ambiente rural gallego de Novariz, después de que la muerte de una de ellas haga que la otra la sustituya al frente de una clase de literatura.
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Poco a poco, a lo largo de los ocho episodios que rondan los cuarenta minutos, vamos descubriendo qué le pasó a la primera y por qué se suicidó -si es que ese fue su verdadero final- y qué tiene en común esta con la segunda, cuando ni siquiera se conocían. Al mismo tiempo, la ficción nos muestra espectaculares paisajes de Galicia, sobre todo de la zona de Ourense, y entre ellos destaca el imponente instituto donde tiene lugar la historia. El centro existe en la vida real y, no solo eso, sino que estaba ya en la mente del creador desde antes de la que ficción tomara forma, puesto que no es otro que al que acudió el creador de la serie.
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El director de El desorden que dejas es Carlos Montero, que estuvo detrás de otros éxitos con tramas adolescentes como Élite, Física o química o Al salir de clase. Este es, en cambio, su proyecto más personal hasta la fecha, puesto que enseña algunos de los lugares en los que creció. La serie está basada en la novela del mismo nombre, publicada en 2016, y centra su acción en el pueblo ficticio de Novariz, que en la realidad se desarrolla, entre otros, en Celanova, donde nació el cineasta y donde se encuentra el enorme instituto prerrománico (previamente fue monasterio) que sirve como centro a la trama. El gallego ha estado al cargo de la dirección en la adaptación de su propio libro para Netflix: "Es mucho más bonito que en esas fotos. Vamos, que es casi casi como se ve en la serie", respondía en un hilo de Twitter donde se señalaba lo espectacular del centro educativo.
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Otras localizaciones por las que pasa la ficción son las termas romanas de Bande o el río Avia de Ribadavia de Ourense; las zonas de Chelo y Monte Xalo, en Coruña; y Cañón de Sil en Lugo. Se rodó el pasado invierno, justo para terminar antes del confinamiento, permitiendo el estreno cuando estaba planeado -a diferencia de tantos otros proyectos que se han visto retrasados por este año tan difícil-. Las críticas están siendo favorables y, según la información que ofrece Netflix, está siendo todo un éxito entre sus suscriptores, lo que supone un nuevo triunfo para Carlos Montero, que tras Élite y El desorden que dejas se lanzará a un tercer proyecto para la plataforma, Feria.
