“Dólar soja”: Para Melconian, las expectativas de devaluación no se terminaron, pese a la acumulación de reservas del Banco Central

El economista Carlos Melconian en el IAEF
El economista Carlos Melconian en el IAEF

SALTA.– El esquema de “dólar soja”, que le permitió al Banco Central (BCRA) acumular más de US$5000 millones de reservas en un mes gracias a que ofreció un tipo de cambio diferencial de $200 a los productores de soja, no logró, sin embargo, aplacar las expectativas de devaluación del mercado, que era el principal objetivo de la medida, según advirtió el economista Carlos Melconian.

El presidente del think tank Ieral, de la Fundación Mediterránea, participó de la 43º Convención Anual del Instituto Argentino de Finanzas (IAEF) y luego dialogó con los periodistas. Para el economista, pese a que el Banco Central mejoró su nivel de reservas, las dudas sin contestar todavía es cuánto de las toneladas de soja que se liquidaron en septiembre fueron un adelanto de los tres meses que quedan por delante.

“Está claro que todavía el programa implementado por el ministro [de Economía, Sergio Massa] no abatió la expectativa de salto devaluatorio. No lo había hecho el 1º de septiembre. El dólar soja fue la apuesta para acumular reservas, complementado el anuncio de baja de subsidios en la parte fiscal”, indicó.

“Se armó un mercado de cambios a $200 que fue superavitario en más de US$7000 millones. Y el otro mercado a $140 quedó deficitario en US$2500 millones. ¿Cuánto de los US$7000 millones que se liquidaron son la anticipación de lo que hubiera ocurrido a otro precio en octubre, noviembre y diciembre? ¿Y si esos tres meses vuelven a ser deficitarios para el Banco Central? Entonces, no se habrá quebrado la opinión inicial del 1º de septiembre de que hay un problema del sector externo”, agregó el fundador de la consultora Macroviews.

En este sentido, enfatizó que “sigue abierta la expectativa de salto devaluatorio”, aun con los más de US$7000 millones liquidados, porque todavía está la prueba de ver cómo queda el flujo del mercado cambiario en octubre, noviembre y diciembre. “No es lo mismo que en octubre, el BCRA pierda cero, US$15 millones o US$200 millones por día. El vértigo de qué van a hacer es distinto y quién sabe qué harán con la soja volviendo a un tipo de cambio de $147 y con un posible ‘dólar Qatar’, que no es la solución“, dijo.

El economista no cree que flexibilicen las restricciones cambiarias. “Van a ir mirando la situación. ¿Ustedes creen que van a sacar ese tapón en la rejilla para que se inunde? Si creen en la curva de oferta y demanda, en una de esas, lo que da mal a $140, se empareja a $180″, indicó.

Melconian explicó que, desde que el presidente Alberto Fernández asumió hasta marzo de 2021, la devaluación contra la inflación (neta de la internacional) “era palo y palo” y no estaban los conflictos del mercado cambiario actual. “Desde marzo de 2021 hasta hoy, la tasa de devaluación estuvo por debajo. Cuando se compara el peso contra el real, el euro, el dólar o el comercio ponderado, da que se necesitaría un salto cambiario de entre 25% y 35%, ayudado por 10% de inflación mundial. No sé si ese es el ‘número mágico’, pero es el ‘atraso’ que tiene el tipo de cambio”, indicó.

A futuro, Melconian indicó que en “términos estructurales se necesita un cambio de régimen”, pero señaló que lo que finalmente va a ocurrir es que se seguirá “corriendo por el andarivel parchístico.

“A punto tal hay dudas, que el propio equipo económico, para mí, y lo corroboró un poco el viceministro de Economía, ha tirado hace una semana el chivo de que se puede venir un plan heterodoxo australito [en referencia al plan Austral del gobierno de Raúl Alfonsín], con sentido político electoral, pero con la idea de que se pueden venir seis meses de 7% de inflación y un sector externo con mercado cambiario neutral, anualmente hablando, para ser generoso”, comentó.

Luego señaló que el equipo económico “le tiene que encontrar la vuelta”, ya que tener un súper cepo y récord exportador “no alcanzó”, ni tampoco el anuncio fiscal de agosto o la reducción de la dependencia del financiamiento del Banco Central.

“Ahí es donde se abrió la pregunta política económica de cómo sigue esto, que no da para ser Pep Guardiola, pero aún para ser Caruso Lombardi, algo hay que hacer; no se puede mirar el techo y tomar mate”, indicó.

Además advirtió que habrá que ver cómo sigue la “tregua” en la coalición oficialista, tras el pedido de mayor intervención en el mercado de la vicepresidenta Cristina Kirchner a Massa. “No sé si es una advertencia. Está claro que [la vicepresidenta] juega un rol protagónico. Se ha movido a través de silencios, a través de carta y a través de Twitter. El receptor ha sido el ministro”, dijo.

Programa económico 2023

Melconian aterrizó en esta ciudad con un objetivo: presentar el plan económico 2023, que está diseñado en el Ieral de la Fundación Mediterránea, junto con Enrique Szewach, Rodolfo Santangelo y Daniel Artana, entre otros economistas. “Queremos mirar juntos el futuro y salir de la grieta. Este es un trabajo apartidario, que estará a disposición del próximo presidente de la República. Es un programa integral, amplio, que es capitalista, occidental y progresista. Buscamos separar a la política de la economía”, dijo Melconian.

El programa “integral tiene como fin un cambio de régimen para revertir el deterioro”, a través de tener una consistencia macro y una reorganización de la economía. “Nuestro país necesita un programa económico consistente y reordenador. Tiene que ser consistente en lo macroeconómico, porque no hay con qué sustituir un programa macro fiscal, monetario, cambiario, tarifario y salarial bien hecho”, dijo el economista.

Para reordenar la economía, a su vez, indicó que primero se deberá “reconvertir al sector público para que provea eficientemente los bienes públicos e interactúe positivamente con el sector privado”, y tener un “shock desregulatorio para liberar la iniciativa privada”.