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Descubre si el vino puede sabotear tus esfuerzos para bajar de peso

Texto: Cintia Saporito

Que es beneficioso para el corazón, que ayuda a preservar la memoria, que protege contra el cáncer de ovarios o que refuerza el sistema inmune, mucho hemos oído decir acerca del vino. Aunque con probables propiedades benéficas para la salud, cuando se trata de bajar de peso, esta bebida, incluso en pequeñas cantidades, podría no ser la mejor aliada. Sigue leyendo para conocer la razón.

Aunque parezca inofensiva, tan solo una copa de vino puede sabotear tu dieta. – Foto: Rafa Elias/Getty Images
Aunque parezca inofensiva, tan solo una copa de vino puede sabotear tu dieta. – Foto: Rafa Elias/Getty Images

Uvas no tan buenas

Si disfrutas de una buena copa de vino de tanto en tanto (¿o tal vez a diario?), puede que hayas oído que una medida antes de dormir podría ayudarte a bajar de peso. ¡Pero no te apresures a abrir la botella! Contrario a esta creencia, más que beneficiar tu silueta, esta bebida podría sabotear tus intentos de bajar de peso, de más de una manera:

. Agregaría muchas calorías “vacías”

Aunque sabroso, tomar vino podría contribuir significativamente a la cantidad de calorías diarias que consumimos. Es que, por ejemplo, tan solo una medida de 5 onzas (148 ml) de cabernet sauvignon podría aportarte 122 calorías, detalla el sitio de la Clínica Cleveland. Y las que no se gastan mediante el ejercicio, se acumularían como grasa, alerta el sitio gubernamental Nutrition.

. Haría que comamos de más

Al activar el “modo inanición” en el cerebro, el alcohol nos conduciría a comer de más, halló un estudio británico publicado en enero de este año en la revista Nature. ¡Imagina lo que puede hacer ese aperitivo antes de la cena!

. Estimularía el apetito, al hacernos descansar mal

Mientras que una copa de vino ayudaría a dormir más rápido, con el tiempo se reduciría el sueño REM, que es la etapa restaurativa, explica el sitio WebMD. A su vez, imposibilidad de descansar bien, podría afectar los intentos para bajar de peso. ¿Cómo?

Según un estudio de 2016, publicado en la revista Sleep, la falta de descanso estimularía el apetito. Así, podríamos terminar haciendo peores elecciones alimentarias.

. Se alteraría el mecanismo por el cual se queman las grasas

Según explica el sitio Livestrong, el alcohol es la fuente de energía “preferida” del cuerpo. Esto significa que, antes de empezar a quemar las calorías que provienen de los alimentos, tomará las de la bebida, inhibiendo el proceso por el que se queman las grasas.

Beneficios que no llegan a la botella

Aunque gracias a unos antioxidantes (polifenoles) presentes en las uvas, el vino tinto tendría el potencial de convertir las grasas malas en buenas (como halló un estudio publicado en 2015 en la revista International Journal of Obesity), esto no significa que podría ayudarte a perder peso.

“Muchos de los polifenoles son insolubles y se pierden durante el proceso de filtrado en la producción del vino”, explicó en un comunicado el profesor Min Du, co-autor del estudio mencionado, y agregó que, como estos antioxidantes están presentes en las frutas, sería mucho más beneficioso para bajar de peso elegir alguna de éstas, en lugar de beber una copa.

Así que, si tu objetivo es bajar de peso, podría convenirte no beber vino. De todas formas, consulta con un médico antes de introducir cambios en tu alimentación, o si tienes dudas.

¿Tú cómo te cuidas para bajar de peso?

@cintiasaporito

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