Diana Rigg le dejó seis mil dólares a la encargada de hacerle la manicura y ella los ha rechazado

Antes de su muerte el pasado mes de septiembre a la edad de 82 años, la antigua chica Bond Diana Rigg -conocida por su trabajo en la serie 'Los vengadores' o por su papel de Lady Olenna Tyrell en 'Juego de tronos'- solía acudir al centro especializado en uñas Nail Gallery del oeste de Londres cada pocas semanas para hacerse la manicura y la pedicura siempre con la misma esteticista, llamada Jessica Zhu.

En su testamento, la actriz británica decidió dejarle 5.000 libras, el equivalente a más de seis mil dólares, pero la mujer ha decidido rechazar ese dinero para que en su lugar vaya a parar al nieto de 4 años de su antigua clienta, según le ha hecho saber a su única hija. En realidad, cuando la intérprete comenzó a acudir al establecimiento en el que Jessica trabaja como gerente esta última no era consciente de que estaba tratando con una verdadera celebridad hasta que otro de los habituales se lo comentó.

"Era tan generosa y con los pies en la tierra que no lo podías imaginar... Era feliz con las cosas sencillas de la vida, como una taza de café. Diana trataba a todas las chicas del salón como si fueran de la familia y era una señora muy preparada que nos daba consejos sobre la vida. Somos muy afortunados de haberla tenido como cliente", ha afirmado en declaraciones al Daily Mail.

Jessica tuvo la oportunidad de reunirse con Diana después de que le diagnosticaran cáncer en marzo de 2020 y siguió visitándola cada dos días hasta su fallecimiento para continuar con las mismas charlas que solían mantener entre esmaltes de uñas.

"Me puse muy triste cuando falleció; ella siempre me decía que no me alterara cuando se estuviera muriendo. No sabía que Diana había apartado 5.000 libras para mí porque estaba con ella por cariño y amabilidad y le dije que no quería nada de ella".

Según desvelan los documentos legales, Diana dejó alrededor de 3 millones de libras a su hija y 280.5000 libras a otros familiares y distintas obras de caridad, incluyendo 50.000 libras a los hospitales Great Ormond Street y St. Christopher's Hospice en el sureste de Londres y 20.000 libras a un centro para jóvenes con discapacidades llamado Earls Court Youth Club.