Yahoo Estilo "Dos veces tú", la película tenebrosa y fascinante que tendrás que ver más de una vez
Estamos en la recepción de una boda muy elegante en un suntuoso salón en Ciudad de México: la cámara nos presenta a dos parejas: Daniela y Rodrigo (Melissa Barrera y Mariano Palacios), quienes son sumamente atractivos, tanto así que es imposible dejar de mirarlos: obviamente son amantes y la química entre ellos es perfecta; en la misma mesa, está la prima de Daniela, Tania (Anahí Dávila), con su marido Benny (Daniel Adissi). Su matrimonio es convencional y Tania, pese a ser tan joven, se siente asfixiada por el tedio marital y su vida como ama de casa. No es que ella envidie la obvia armonía sexual aparente en la otra pareja, es solo que no puede evitar pensar ¿qué pasaría si yo estuviera en su lugar o ella en el mío?
Las copas de champaña se suceden con rapidez, al igual que se desvelan las conversaciones. Así surge una idea que, con la repentina y violenta intervención de un accidente, acabará por cambiar de manera irreversible la vida de ambas parejas, y es el comienzo de esta historia lo mismo tenebrosa que fascinante.
'Dos veces tú', filme de Salomón Askenazi que llega a la plataforma digital Netflix, es una película que no tiene una estructura lineal, ni es de lectura simple. De hecho, es una película que reta y le exige al espectador lo mismo atención que paciencia... e inteligencia.
Esto seguramente hará que un grueso del público la rechace por default, ya que se trata de un filme que obliga a pensar (¡qué audacia! ¡Cómo se atreve a no ser distracción pura y dura!), pero aquél que entre a esta historia extraña y visualmente irresistible, tendrá su recompensa al descubrir la magia que se va dejando ver cuando ya no puedan despegar los ojos de la pantalla.
La historia que se nos presenta (también escrita por Askenazi) se cuenta fuera de orden; esto permite a los espectadores reconstruir pieza por pieza lo que sucedió (la escena descrita anteriormente es la primera y es la única de la que voy a hablar en específico); sin hacer spoilers, digamos que esta película no se limita a seguir las reglas que obedece la realidad cinematográfica en películas convencionales. De hecho, es casi imposible clasificarla en un solo género; podría decirse que es melodrama, fantasía, misterio, romance, suspenso, terror psicológico o ciencia ficción y encajaría perfectamente en todas esas categorías.
Aunque hay elementos narrativos claramente alusivos a filmes como 'Sliding Doors' (¿la recuerdan? Aquella excelente cinta de los 90 con Gwyneth Paltrow, sobre realidades alternas), 'Abre Los Ojos' (de Alejandro Amenábar) y muy especialmente 'Mulholland Drive' (la resonancia de esta es amplia), 'Dos veces tú' tiene un estilo particular que la distingue de otros filmes mexicanos que buscan este corte temático —nunca cae, por ejemplo, en la arrogancia de 'El incidente' y 'Los parecidos', ambas de Isaac Ezbán, un director que suele menospreciar al público con su obra.
Como creador, Askenazi ha logrado hacer un trabajo sólido en lo que claramente es un passion project y cuando hablaba de un estilo particular me refería a todos los aspectos de lo que es hacer una película: la cinematografía (del notable Beto Casillas), la ambientación y la música (a cargo del propio Adissi y Sebastián Zunino), mientras que la edición de Jorge García tiene un ritmo impecable para hacer que las piezas del rompecabezas encajen de muchas maneras: cada escena es un momento completo, pero cuando comienza una nueva, como un caleidoscopio, y a menudo no estamos seguros de dónde pertenece en el esquema de tiempo.
El resultado de esta estructura, que tiene su riesgo, es que como espectador, nunca se está seguro de lo que viene a continuación, como suele suceder en los filmes de David Lynch y como consecuencia de esta manera de narrar, hay un aire de misterio que se cierne sobre todo.
Hay dos formas de construir una narrativa de este tipo en cine: una es introducir lo inexplicable por el simple hecho de hacerlo, sin una idea de cómo resolverlo (por ejemplo, y volviendo a Lynch, la indulgencia de 'Inland Empire', que solo aguantan los fans más hardcore, aún si contiene la actuación más formidable de Laura Dern en toda su carrera). La otra es telegrafiar toda la trama de un modo demasiado predecible, y entonces no hay misterio en absoluto y todo se vuelve tedio (como sucede con 'El Conjuro' y sucedáneos).
Si bien los actores — especialmente Palacios, que tiene una amplia experiencia en teatro —cumplen bien con su función en la trama, quienes llevan el peso principal del filme son las protagonistas, que sirven como el vínculo para llevar al espectador a los puntos álgidos de la historia; Melissa Barrera tiene una presencia decisiva —algo que se advierte en su aparición en 'In The Heights' y en la serie 'Vida' — y demuestra tener la aptitud para generar reacciones con sutileza, mientras que Anahí Dávila, un rostro relativamente nuevo, se desenvuelve de manera natural como Tania, tocando todas las bases en el recorrido de su personaje, desde la ingenuidad, al duelo estremecedor, hasta la angustia sobrehumana.
'Dos veces tú' no es una película fácil de reseñar, porque la más mínima revelación de los detalles de su trama puede arruinar la experiencia; ahora bien, puedo decir que, en su propio beneficio, esta es una película lograda y ejecutada con gusto: hay un punto temático para cada acontecimiento inexplicable, incluso si no todo lo que se plantea es completamente lógico, y la mayoría de las veces esto funciona a favor de la película.
El resultado es inquietante: esta es una cinta que invita a más de un visionado, y que al terminar, no importa cuántas veces se vea, se queda en el pensamiento durante horas, reconfigurando sus ideas una y otra vez.
'Dos veces tú' está disponible en Netflix para México y toda Latinoamérica a partir de este fin de semana.
