El homenaje estampado de James Ivory a Timothèe Chalamet y 'Call Me by Your Name'

La gala de los Oscar siempre deja varias estampas divertidas, emotivas, significativas y/o curiosas para recordar en años venideros. La de James Ivory, el ganador de un Oscar más longevo en la historia de los premios, lo fue por partida doble. Primero por eso, por convertirse en el cineasta de más edad en alzar la estatuilla. La segunda, por subir a recoger el premio con una camisa en la que llevaba impreso el rostro de Timothèe Chalament, nominado más joven de esta edición y protagonista de Call Me by Your Name, película que le ha dado por fin su primer Oscar a Ivory.

Ya se vio y comenzó a comentarse nada más verle pisar la alfombra roja. Bajo la chaqueta de corte clásico y la pajarita a juego, James Ivory lucía un singular estampado sobre su camisa blanca. El rostro de un joven parcialmente cubierto. En realidad no hacía falta haber visto Call Me by Your Name, película por la que el veterano guionista estaba nominado por cuarta vez anoche, para identificar al propietario de esa cara que ha recorrido las redes sociales y medios de comunicación en los últimos meses.

Era el actor Timothèe Chalamet, con la mirada perdida y rostro ensimismado y pensativo. Un fotograma de la película fenómeno de masas de esta temporada que si bien se fue de los Oscar sin el reconocimiento de la industria convertido en estatuillas, sí disfrutó de ver a su guionista en el escenario.

Un momento histórico el de Ivory recogiendo el premio por su adaptación de la novela homónima de André Acimán publicada en el 2007. Tras tres nominaciones anteriores sin éxito por Una habitación con vistas (1985), Regreso a Howard’s End (1992) y Lo que queda del día (1993), por fin tenía su merecido premio.

A sus 89 años, se convirtió en el ganador más longevo de un Oscar por delante del compositor Ennio Morricone, que con 88, ganó por la banda sonora de Los odiosos ocho hace dos años. Así que ahí estaba Ivory, en lo más alto, con Hollywood a sus pies y acompañado por el actor revelación del año, Chalamet, el nominado más joven que en realidad nunca tuvo opciones. Competía con Gary Oldman, por El instante más oscuro.

¿Y qué hacía el actor mientras el guionista recogía el premio con su rostro estampado en su camisa? Aplaudir como si no hubiese mañana y dejar que la emoción lo desbordase. No era para menos.

El detalle del vestuario de Ivory no pasó, como era de esperar, desapercibido en redes sociales. Sin duda, la elección de camisa más comentada de la gala en cuanto a los asistentes masculinos se refiere.