El millonario imperio Posh... Victoria Beckham más allá de las Spice Girls

LONDON, ENGLAND - DECEMBER 10:  Victoria Beckham arrives at The Fashion Awards 2018 In Partnership With Swarovski at Royal Albert Hall on December 10, 2018 in London, England.  (Photo by Jeff Spicer/BFC/Getty Images for BFC)
Foto: Jeff Spicer/BFC/Getty Images for BFC

“Hacia atrás, ni para tomar impulso”, dicen. Y eso está más que claro para Victoria Beckham, quien hizo de su pasado una plataforma para construir un imperio… un imperio Posh.

El regreso de la banda de pop británico Spice Girls fue anunciado por todo lo alto y se dijo, desde el comienzo, que Victoria Beckham no participaría en esta ocasión (la última vez que las vimos juntas en un escenario fue durante la clausura de los Juegos Olímpicos de Londres, en 2012). La ex cantante no se ha dormido en sus laureles y se ha dedicado a trabajar. Y regresar a la agrupación le representaría, ciertamente, un paso hacia atrás.

Lejos de vivir de viejas glorias como sus ex compañeras, la llamada ‘Posh’ Spice se ha dedicado a construir una boyante y sólida carrera en la competida industria de la moda. Y vaya que le ha dado frutos: actualmente, su imperio está valuado en 240 millones de libras (unos 300 millones de dólares).

Pero, ¿cómo fue que una cantante que pertenecía a una banda de pop terminó como una visionaria empresaria y diseñadora de moda? Tras la desintegración del grupo, Victoria calculó con precisión cada uno de sus siguientes pasos en el mundo del entretenimiento.

La mujer sabe que un imperio no se construye solo. Y para eso, necesita rodearse de las personas correctas, un equipo líder de asesores y publirrelacionistas capaz de ayudarle a vender lo que ella siempre ha querido: su imagen.

Desde sus inicios con las Spice Girls, Victoria siempre explotó la imagen de chica fashionista y estilizada. Y luego de fracasar en su carrera en solitario, terminó por abandonar los escenarios y los cambió por las pasarelas. Así, comenzó una carrera como modelo.

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Allá por 1997, compartió con el mundo que estaba iniciando una relación amorosa con el futbolista inglés David Beckham. El combo sonaba perfecto: dos figuras hiper mediáticas, líderes en lo que hacían y súper atractivas se juntaban para compartir no solo su amor, sino su pasión por la moda. Dos años después, se casaron y actualmente tienen cuatro hijos.

Poco a poco la mujer, ya conocida como Victoria Beckham, fue familiarizándose con una industria que conocía más desde afuera, como aficionada de la moda. Pero después, ya metida en las entrañas del negocio, decidió abandonar sus intentos musicales como solista y lanzó su propia línea de ropa. Un imperio estaba por nacer.

La firma fue lanzada en 2008 y lleva su nombre. Con una primera producción de 400 vestidos, Beckham convenció y logró no solo vender el total de esas prendas, sino colocarlas en nueve puntos de venta internacionales. Su carrera como modelo continuó y, de hecho, fue la imagen de firmas como Giorgio Armani y Marc Jacobs.

“Aunque intento dar pequeños pasos, el negocio está creciendo muy rápido. Nuestro volumen de ventas ha aumentado un 120% cada año. Creo que eso es muy impresionante para cualquier estándar”, contó a Telegraph.

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Actualmente, la firma Victoria Beckham produce al año 5 mil piezas, que se venden en 300 tiendas en todo el mundo. En 2011, su trabajo llegó a un siguiente nivel cuando ganó el reconocimiento a Firma del Año en los British Fashion Awards, poniendo su nombre por encima de casas de moda de toda la vida, como Tom Ford, Stella McCartney y Burberry.

Para 2015, fue nombrada por la revista Glamour como una de las mujeres del año por su trabajo como diseñadora de moda, su perspicacia comercial y su trabajo filantrópico en materia del VIH, por lo cual fue nombrada Embajadora Internacional de Buena Voluntad de ONUSIDA.​

Con todo ese prestigio, llegó el siguiente paso: vestir a otras celebridades. Así, Victoria logró que sus diseños fueran llevados por figuras tan grandes como Jennifer Lopez, Eva Longoria y hasta la mismísima Madonna. Y de esta manera, el imperio de la ex Spice Girl factura 123 millones de dólares al año.

Consciente del posicionamiento mediático que ofrecen las redes sociales, la empresaria también se ha encargado de compartir cuando momento personal ha podido: reuniones familiares, fotos junto a su esposo, acompañando a sus hijos, visitando a sus ex compañeras (para demostrar que no reniega de su pasado) en alguna alfombra roja, evento de la realeza o presentando una nueva colección. Victoria lo sabe: es una marca y requiere seguir en el foco de atención para mantenerla vigente.

De esta manera, ante un regreso musical que solo la haría dar pasos hacia atrás, Victoria Beckham ha preferido capitalizar su presente y futuro, a diferencia de sus ex compañeras. Las cinco chicas tenían la misma plataforma para hacer con su vida artística lo que hubieran querido (algo que demostraban todo el tiempo al promover su famoso ‘girl power’). Pero lejos de eso, prefirieron un regreso más movido por las ganancias monetarias que por una aportación musical.

Sin embargo, Victoria Beckham no ha querido voltear hacia atrás. Todo lo contrario: tiene la mirada bien puesta en el futuro, en seguir expandiendo su imperio Posh… una verdadera muestra del ‘girl power’.

@braham_MV