El trastorno (no solo femenino) que puede arruinar tu vida sexual
Casi todo lo que nos pasa (bueno o malo) repercute en las relaciones íntimas y sexuales. Por eso conviene ser claro y no ocultar a la pareja ningún factor que pueda influir, por mucha vergüenza que de. Este es uno de lo más comunes
No solemos hablar de ello en voz alta porque quien padece esta condición lo pasa mal, y más allá de que sea incómodo puede hacerte sentir inseguro y avergonzado. Su presencia genera una disfunción social ya que en muchas ocasiones impide (a las mujeres) llevar a cabo su vida habitual provocando así un complejo y importante estrés psicológico.
Aunque se trata de una patología más frecuente en el sexo femenino, en mujeres jóvenes y de mediana edad, debido a los embarazos y partos, puede afectar a hombres y niños, y presentar diferentes características dependiendo de su origen.
Hablamos de la incontinencia urinaria o la pérdida del control de la vejiga, que puede ocurrir en cualquier momento. Según los expertos, sus síntomas pueden ir desde una fuga leve de orina -como las que ocurren cuando se estornuda, tose, coge peso, se salta o ríe a carcajadas-, hasta la pérdida abundante de ésta. Pero, cualquiera sea el escenario, la realidad es que puede llegar a afectar seriamente la calidad de vida, y también a la satisfacción sexual.
Son muchos los factores que puede provocar estos escapes involuntarios como las lesiones y enfermedades neurológicas, la diabetes o las infecciones urinarias, además de la pérdida de fuerza y función del suelo pélvico por los partos.
El caso es que un estudio publicado en la revista ‘BJU International’ ha apuntado los posibles efectos negativos que puede tener la incontinencia urinaria para la salud sexual.
El estudio ha incluido información de 3.805 hombres y mujeres registrados en el English Longitudinal Study of Ageing (ELSA), y concluye que el veinte por ciento de las mujeres y el siete por ciento de los hombres tuvieron incontinencia urinaria en los últimos 12 meses.
Esto provocó que las mujeres afectadas de IU vieran disminuida su actividad sexual y su excitación durante el último año. Mientras que los hombres con el mismo problema sufrieron disminuciones en su deseo sexual y mayores dificultades para la erección y el orgasmo.
“Nuestros hallazgos apuntan a fuertes vínculos entre la incontinencia urinaria y una serie de resultados negativos con respecto a la salud sexual”, explica el autor principal del estudio, el doctor David Lee de la Universidad Metropolitana de Manchester (Reino Unido).
¿Has pasado por situaciones parecidas a lo largo de tu vida sexual? ¿Lo asociabas a problemas fisiolóficos? ¿Cómo lo solucionaste)
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