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Es fácil entender los cabreos de Joaquín Prat con su equipo de ‘Ya es mediodía’

Mucho se ha utilizado a lo largo de los años la etiqueta de “reina de las mañanas”. Una corona que tuvo en el pasado María Teresa Campos, y que luego heredó Ana Rosa Quintana. En estos momentos, sin embargo, podríamos afirmar que las mañanas tienen un rey, y que ese es Joaquín Prat, quien cada día hace doblete con El programa de Ana Rosa primero y Ya es mediodía justo después, ambos espacios en Telecinco. En El programa de Ana Rosa Joaquín se mueve como pez en el agua, pues lleva ahí ya 13 años. Pero en Ya es mediodía se le ve más incómodo, y ya le hemos visto pillarse algún que otro cabreo con su equipo. Y no es que peque de soberbio ni nada por el estilo; es más, es fácil entender sus razones.

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Este mismo miércoles, Joaquín tiró de la oreja a su equipo, y hasta pidió perdón a los espectadores de Ya es mediodía. Todo sucedió durante la emisión del sumario, y vio una imagen con la que no contaba. “Es la abogada de Gerard Piqué llegando al despacho”, decía tras una pequeña pausa. Pero era un error: quien estaba en el vídeo era Pilar Mañé, abogada matrimonialista contratada por Shakira. La letrada contaba que todavía no había hablado con la artista colombiana, y pedía que la dejasen pasar.

Al ver que había metido la pata, Prat se disculpó por la audiencia. “A veces nos puede el ímpetu de llegar los primeros a contar algo y así no deben hacerse las cosas”, se disculpaba, dando a entender que alguien estaba haciendo mal las cosas detrás de las cámaras. Es un error sin importancia, pero si todo se hiciese con un poco más de tacto se podría haber informado bien al público que está en su casa, sin necesidad de rectificar ni pedir disculpas.

Una cosa maravillosa de Joaquín es esa, que no se le caen los anillos al pedir disculpas cuando algo sale mal. De hecho, hace escasamente dos semanas, sucedió algo similar. Durante la sección Fresh de Ya es mediodía, dedicada al corazón, aseguró que se emitirían unas imágenes en las que Victoria Federica salía del hospital y contestaría a los reporteros. Sin embargo, lo que se vio era solo un coche entrando en el edificio donde vive la infanta Elena, sin más, sin declaraciones. “Yo no puedo engañar a los espectadores diciéndoles que vamos a ver sus primeras imágenes saliendo del hospital y lo que responde a las preguntas. Pues ni una cosa, ni la otra”, lamentó, dirigiéndose en concreto a la directora del programa. Una vez más, se dijo que todo era por las prisas, que las imágenes acababan de llegar, y él, con cierta ironía, finiquitó el tema diciendo: “Me tengo que creer que en ese coche va Victoria Federica. Vale”.

MADRID, ESPAÑA - 19 DE ABRIL: Joaquín Prat durante la entrega de los Premios Talento 2022 que otorga la Academia de Televisión en reconocimiento a la excelencia profesional detrás de las cámaras, el 19 de abril de 2022, en Madrid, España. (Foto de José Oliva/Europa Press vía Getty Images)
MADRID, ESPAÑA - 19 DE ABRIL: Joaquín Prat durante la entrega de los Premios Talento 2022 que otorga la Academia de Televisión en reconocimiento a la excelencia profesional detrás de las cámaras, el 19 de abril de 2022, en Madrid, España. (Foto de José Oliva/Europa Press vía Getty Images)

El presentador no está pidiendo nada del otro mundo. Solo hacer las cosas con un poco de calma para que salga bien. No quiere vender bombas de humo que luego se queden en nada, como el caso de Victoria Federica, ni tampoco con el vídeo de la abogada. Total, si hay temas que los tocan hasta 24 horas después de que sucedan, no pasa nada si se pisa un poco el pedal de freno para no tener un accidente.

A esto hay que sumarle que Ya es mediodía es un encargo que Mediaset ha hecho a Joaquín Prat, que se gestódespués del abandono sorpresa de Sonsoles Ónega del grupo para poner rumbo a Atresmedia. Para aceptar el desafío, el comunicador tuvo que abandonar Cuatro al día, el programa que presentaba en las tardes de Cuatro, y que él había catalogado comoel mejor regalo profesional que le había dado la vida. Así se lo expresó a Jesús Calleja en Planeta Calleja, y también reconoció que, al principio, no quería ponerse al frente del mismo, porque le parecía “una putada” por sus bajas audiencias.

Joaquí negoció su incorporación a Ya es mediodía, precisamente, durante un descanso de Cuatro al día, mientras se cerraba el fichaje de Sonsoles por la competencia. Él remó a favor de obra, se puso a disposición del grupo audiovisual en el que trabaja, y solo espera que el programa que presente tenga unos mínimos de calidad. Por eso, es fácil entender sus cabreos en pleno directo. A muchos nos sucedería lo mismo.

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