'Final Girls': las heroínas que revolucionan el cine de terror dejando de ser dulces víctimas

Uno de los elementos clásicos del cine de terror de los 70, 80 y 90 que ha sido revalorizado en los últimos tiempos es la 'Final Girl' o bien, la 'chica final', que ha pasado de ser solamente una víctima a convertirse en un importante símbolo de empoderamiento femenino con el paso de los años.

Algunas de las más icónicas son Sally Hardesty (Marilyn Burns) de 'The Texas Chainsaw Massacre' (1974, Tobe Hooper), Nancy Thompson (Heather Langenkamp) de 'A Nightmare on Elm Street' (1984, Wes Craven), Sidney Prescott (Neve Campbell) de 'Scream' (1996, de Wes Craven también) y por supuesto, la icónica Laurie Strode (Jamie Lee Curtis, en el rol que la convirtió en leyenda) de 'Halloween', el clásico de 1978 dirigido por John Carpenter, que estableció por primera vez lo que eventualmente se convertiría en el arquetipo de la mujer que desafía al asesino en masa que la ha sometido a indescriptibles actos de violencia.

Jamie Lee Curtis en 'Halloween', 1978. (Photo by Compass International Pictures/Getty Images)
Jamie Lee Curtis en 'Halloween', 1978. (Photo by Compass International Pictures/Getty Images)

De hecho, algo que enorgullece a la Curtis — hija de una de las más icónicas actrices del género: Janet Leigh, la protagonista de 'Psicosis', de Hitchcock — es haber hecho su debut en cine en este filme y que el personaje, al que ahora regresa en 'Halloween Kills', la segunda parte de una nueva trilogía dirigida por David Gordon Green y que se estrena este fin de semana alrededor del mundo, se ha convertido en un símbolo de fuerza y que ha revolucionado por completo un género cinematográfico que no le tenía mucha empatía a las mujeres en un principio, al surgir en los primeros años de la década de los 70.

A diferencia de la bonita e histérica Sally, la protagonista de 'Matanza en Texas', Laurie no se asume como una víctima, algo que como 'Final Girl' es una característica clave en este tipo de personaje. Virtuosa, inteligente y de espíritu generoso, Laurie es una adolescente bastante común sometida a la fuerza a una situación completamente extraordinaria. Ella comienza la noche de brujas cuidando a unos niños en su vecindario residencial de clase media y para cuando amanece en Todos los Santos, la chica no volverá a ser la misma, ya que se enfrentó, literalmente cara a cara con un monstruo: el indestructible Michael Myers.

Según la catedrática estadounidense Carol J. Clover, quien en 1992 acuñó el término 'Chica final' por primera vez, esta es la última mujer superviviente en una película de terror que logra evadir la muerte a manos de un asesino —principalmente masculino, con la excepción notable de la primera película de la serie 'Viernes 13' (1980), en la que los asesinatos son cometidos por la desquiciada Mrs. Voorhees, que en las demás cintas será sucedida por su hijo, Jason—, adquiriendo más y mejores aptitudes para su supervivencia.

En su investigación acerca de los roles de género en la película de terror moderna, Clover analizó las películas de este tipo y coincide en señalar una serie de aspectos que convierten a este tipo de heroína cinematográfica en una figura emblemática, que hoy, a casi 30 años de que publicara su estudio, se ha convertido en una auténtica tendencia que ha venido a desbancar a los vampiros, brujas y zombis como las figuras de moda en el género del terror, con películas, libros, series de TV y mucho más, girando en torno a su figura heroica, algo que es una verdadera sorpresa, al dominar el género que por años las críticas feministas denostaban como pretexto para glorificar la violencia contra las mujeres, algo que definitivamente ha cambiado.

La supervivencia de la 'Chica Final' generalmente sigue a una serie de asesinatos en los que sus compañeros son eliminados uno por uno, antes de que tenga una confrontación prolongada con el asesino al final de la película, de la que emergerá victoriosa, con o sin la ayuda de un hombre (usualmente en esos casos se trata de una figura paterna o un mentor, como el personaje del Dr. Loomis en 'Halloween') habiendo pasado de ser una virgen dulce y sensible, a ser una cazadora de monstruos experimentada (y que, de alguna manera no física, ha dejado de ser 'virgen').

El cómo ha cambiado el concepto de la chica final en la actualidad tiene definitivamente que ver con el rol en el subtexto de las películas. Durante la confrontación con el asesino — Michael Myers, Jason, Freddie Krueger, Leatherface, Candyman, Cara de Fantasma, etcétera—, la 'Final Girl' tiende a pasar por una transformación, usualmente traumática, que lleva a la audiencia a identificarse con ella y celebrar su triunfo, algo que Jamie Lee Curtis considera crucial para este tipo de películas, que originalmente estaban dirigidas a una audiencia predominantemente masculina, algo que ha cambiado drásticamente en años más recientes.

"Cuando rodamos la película original, yo tenía 18 años y no estaba muy consciente de estas cosas, pero el subtexto ya estaba ahí, en el guion que escribieron John (Carpenter) y Debra (Hill, la productora ejecutiva de esta y otras películas de la saga, que falleció en 2005); Laurie es una chica sensata, centrada, la voz de la razón para sus amigas, que son las que acaban pasando por el cuchillo. Ella sobrevive, en parte por su instinto de supervivencia y en parte por su instinto de protección... tiene dos niños a su cuidado y antepone la seguridad de los niños a la suya propia. Laurie está mucho mejor dimensionada que otros personajes pertenecientes al género y que yo misma llegué a interpretar en esa época... lo que quiero decir es que ella es con quien el público se identifica. En los westerns (y en cierta forma lo que John hizo en esta película es una especie de western solo que en vez de tener a John Wayne con dos pistolas, tenía a una chica flaquita y desarmada) siempre hay a un personaje que sabemos que va a sobrevivir y que es en quien depositamos nuestras emociones. Al convertirlo en una mujer que no se asume como una víctima, que pelea y devuelve los golpes, hay algo diferente, que ha ido encontrando resonancia con los años y que ha devuelto a las mujeres una parte de lo que pensábamos que habíamos perdido. La fuerza para luchar por nuestras vidas."

Con esta idea en mente, Laurie Strode es el epítome de la 'Chica Final'. Desde su aventura en la noche de brujas tan violenta a la que sobrevive, surgió el subgénero del slasher (el asesino en masa o en serie -no son lo mismo, por cierto-, que utiliza habitualmente un cuchillo para despachar a sus víctimas) y se desarrolló a lo largo de la década de los 80 para presentar a 'Final Girls' que podrían apartarse de alguna manera del estereotipo de víctima, por ejemplo, la astuta Ginny Fields (Amy Steele) de 'Friday the 13th Part 2' (1981), que usa la propia locura de Jason para engañarlo y sobrevivir a su ataque.

Esto, de un modo u otro, se debe a la interpretación de Curtis, que por muchos años tuvo una relación ambivalente con el género, mas no así con su personaje, razón por la cual accedió a retomarlo dos veces en décadas distintas, primero en 'Halloween: H20', de 1998 (que resultaba más interesante como concepto que como película, pese al impecable trabajo de Curtis y de una joven y prometedora Michelle Williams, que fue casi una 'Chica Final', pero no del todo) y posteriormente en el reboot-secuela 'Halloween', de 2018, cinta que ignora por completo todas las secuelas que se hicieron desde 1981 (con 'Halloween II', que básicamente Curtis interpretó y Carpenter escribió y produjo para los fans) y el estilizado y violento relanzamiento que hizo en 2008 el rockero y cineasta Rob Zombie, y muestra a una Laurie de más de 50 años, atormentada por la culpa de sobreviviente, que se ha convertido en una experta en manejo de armas, sacrificando su carácter cordial y temperamento dulce, y también, sus relaciones familiares con su hija Karen (Judy Greer) y su nieta adolescente, Allyson (Andi Matichak), todo consumido por su certeza de que se enfrentará de nuevo con Michael Myers, cosa que finalmente, sucede.

“Ha habido tantos clichés o tropos, o como quiera que se mire”, señala Curtis, con algo de humor, al respecto de su retorno al personaje en 'Halloween Kills' “Tratamos de rendirles homenaje y luego darles la vuelta. Si alguien espera que en esta película la llamada 'Final Girl', a la que yo la llamaría 'Final Granny', en todo caso, sea una especie de damisela en apuros, no va a ser así ."

En esta secuela directa al filme de 2018 (cuyo estreno se postergó por un años debido a la pandemia de COVID-19), todo ocurre en la misma noche de la cinta anterior, 40 años después de la primera, terrible masacre de Myers en el tranquilo suburbio residencial de Haddonfield, Illinois, ostensiblemente a unos kilómetros de Chicago (aunque el rodaje tuvo lugar en Wilmington, Carolina del Norte); Laurie y las mujeres de su familia se unen con los habitantes del pueblo para confrontar a esta encarnación del mal completamente nihilista y carente de rasgos humanos, aunque el objetivo de su furia sin fin, sigue siendo aquella chica que en el pasado lo desafió y ella tiene el valor para levantarse y seguir peleando (y no revelaré más al respecto de la trama de 'Halloween Kills', así que pueden seguir leyendo, porque no hay spoilers).

En el universo de 'Halloween' que, siguiendo la pauta de John Carpenter, ha creado David Gordon Green, Laurie se presenta como la cazadora y otro papel que adopta, desde la cinta de 2018, es el de salvadora. Donde el Dr. Loomis que interpretaba Donald Pleasence de un cierto modo la salva al final de la original, Laurie es quien protege a su hija y nieta, quienes han jugado un papel en la derrota de Myers en el clímax de esa cinta.

Esto da a Laurie un poder y una prominencia que no tuvo en la primera película, un poder que no se le otorga a ninguna otra 'Final Girl' que hayamos visto en la pantalla, ni siquiera a Sidney Prescott, que ha sobrevivido, hasta ahora, cuatro películas de su propia serie (que serán 5 al estrenarse una nueva entrega el 14 de enero de 2022, con Matt Bettinelli-Olpin y Tyler Gillett, directores de la sorprendente y divertida comedia de horror 'Ready or not', donde Samara Weaving también es una 'Chica Final', tomando la estafeta de Wes Craven).

Para Jamie Lee Curtis, era importante que la historia en 'Halloween Kills' sonara verdadera: “Quería que Laurie tuviera integridad, quería que tuviera las mismas cualidades que hacían que como personaje le importara al público en 1978. Quería que sucediera lo mismo ahora y que se viera que está preparada para encarar su destino. Ella no lo eligió así, pero no es una víctima. Esto es lo que la hace diferente del modelo estándar de 'Final Girl'. En esta película vemos a las tres generaciones de mujeres que han sobrevivido a un trauma y están dispuestas a dar la cara y no doblarse ante el miedo. Y creo que el que hayamos roto con el estereotipo de la mujer víctima y veamos a Laurie confrontando a su opresor, es algo positivo. Algo que nos ha devuelto, en mayor o menor medida, un género cinematográfico."

'Halloween Kills' estrena en México el 14 de octubre y en EEUU el 15 de octubre.