Anuncios

George Lucas defiende sus diálogos cursis: Star Wars es un melodrama

George Lucas defiende sus diálogos cursis: Star Wars es un melodrama
George Lucas defiende sus diálogos cursis: Star Wars es un melodrama

Es imposible que cualquier realizador que se adentre en la saga de Star Wars no reciba, de antemano, presión por parte de los fans de cuidar del legado de la trilogía original. Esa seriedad con la que algunos se toman la saga es algo que no comparte el propio George Lucas, y es una que parece haber aparecido con los años, pues ahora el director defiende los diálogos, que por años han sido tachados de cursis, de precuelas como Star Wars: Episodio II - El ataque de los clones (66%), al asegurar que su saga siempre ha sido melodramática.

Continúa leyendo: Francis Ford Coppola dice que George Lucas desperdició su talento en Star Wars

En un nuevo libro titulado The Star Wars Archives 1999-2005, George Lucas (Locura de Verano (96%), THX 1138 (88%), Star Wars: Episodio IV - Una Nueva Esperanza (93%) ) se defendió de una de las críticas más reiteradas que se le hacen a la trilogía de precuelas: los pobres diálogos de personajes como Padme (Natalie Portman), Anakin (Hayden Christensen) y Obi-Wan (Ewan McGregor). El director explicó que la gente simplemente no entiende que la franquicia siempre ha sido pensada como una serie de finales de la década de los años 30, en términos de tono. Y que ese melodrama es una parte esencial de su visión:

Es consistente, no sólo con el resto de la película, sino con el estilo en general de Star Wars. La mayoría de la gente no entiende el estilo de Star Wars. No entienden que hay un motivo debajo que es muy parecido al de un western de los 30 o una serie matutina del sábado. Está más en el periodo romántico de hacer películas y filmes de aventuras. Y, en esta cinta, es más un melodrama que cualquiera de las otras.

El diálogo en específico que trajo todo esto a colación fue uno de Star Wars: Episodio II - El ataque de los clones (66%) en el que Anakin le dice a Padme: “me persigue el beso que jamás debiste darme”. Aunque si bien es cierto que, en realidad, desde la trilogía original esa clase de tono permea sobre la franquicia, y que el melodrama tiene una mala reputación por su asociación con la televisión, también es importante puntualizar que el tono no siempre ha sido el problema con la segunda trilogía tanto como el desarrollo de personajes o diálogos.

Por ejemplo, lo molesto de Jar Jar (Ahmed Best), la extraña revelación de que a Anakin no le gusta la arena o el ya icónico “hello there” de Obi-Wan. Particularmente el Episodio II es uno de los más vapuleados de la franquicia entera, pese a que tendría que haber sido uno de los más cuidados ya que ese filme tendría que convencernos del romance entre el protagonista y el personaje de Natalie Portman, para hacer todavía más trágico el ascenso de Darth Vader al final de Star Wars: Episodio III - La Venganza de los Sith (79%).

Te recomendamos: George Lucas revela por qué vendió Star Wars y dice que fue “muy doloroso”

Los diálogos de Lucas siempre han sido un tema. El propio Mark Hamill ha admitido que tuvo que negociar en ocasiones con él para reemplazar el extenso y expositivo material que originalmente estaba en el libreto en la trilogía original. Aunque para ser justos, así era justamente la forma en la que hablaban los personajes de las series de televisión que inspiraron al director y a los que refiere en esta entrevista, tales como Flash Gordon, por ejemplo.

Así que no se sientan mal si la admitida cursilería y obviedad de los diálogos de Lucas no les molesta. Después de todo, otras grandes escenas de la franquicia, como la revelación de Darth Vader, están en sintonía tal como explica el propio director. Y ahora con el regreso de Hayden Christensen como el personaje en la serie de Obi-Wan, mismo que también fue objeto de severas críticas en esa películas, puede que al final a los seguidores no les molesten tanto las precuelas como se piensa.

No te pierdas: Star Wars: George Lucas revela por qué no quiso involucrarse en la trilogía secuela