Anuncios

¿Incluirías este ingrediente procesado (pero poco calórico) en tus ensaladas?

Los aditivos y la sal (más reducidos que hace años) son los peores enemigos de estos palitos de pescado que, sin embargo, aportan una gran cantidad de proteínas de alto valor biológico. Si vas tomarlo, hazlo así

Kamaboko, también conocido como surimi, krab o carne de cangrejo. Se puede consumir de manera ocasional y mejor si es acompañando a productos frescos y caseros. (Foto: The Daily Mail)
Kamaboko, también conocido como surimi, krab o carne de cangrejo. Se puede consumir de manera ocasional y mejor si es acompañando a productos frescos y caseros. (Foto: The Daily Mail)

Las constantes lluvias y el frío que hasta el momento no han permitido desprenderse de las prendas de abrigo y las medias tupidas, han hecho que el comienzo de la operación bikini se vea retrasado. Esto implica que ahora, la llegada de las altas temperaturas, traiga consigo las prisas por cuidar la alimentación y poner en marcha rutinas deportivas.

Para facilitar la operación bikini, te proponemos cuatro originales recetas, todas ellas están protagonizadas por las barritas de surimi ‘Krissia’, con las que podrás cuidarte y disfrutar comiendo. Este “músculo de pescado picado” (anteriormente conocido como Kamaboko) es un invento japonés fabricado a partir de pescados de carne blanca o aves de corral.

Estas bolas de pescado se elaboran con<strong> Kamaboko casero (dos tipos de pescado blanco, y sin cobertura rosa)</strong> y son muy populares en China. (Foto: FWx)
Estas bolas de pescado se elaboran con Kamaboko casero (dos tipos de pescado blanco, y sin cobertura rosa) y son muy populares en China. (Foto: FWx)

La elaboración de surimi se remonta a hace miles de años en Japón. Los pescadores comenzaron a producir artesanalmente -a partir del músculo desmenuzado de algunos pescados frescos- un producto tratado por calor para dar salida comercial a pescados que no se consumían y aumentar su período de conservación. En los años 70 Japón vio crecer la producción de surimi, que se expandió a Europa una década después, cuando se comenzó a utilizar como materia prima para elaborar sucedáneos de marisco y se empezó a incluir en ensaladas y ensaladillas rusas, sopas, pastas o arroces, como relleno de croquetas y como ingrediente de sandwiches y aperitivos.

Inclúyelos en ensaladas como esta y así irás adaptando tu dieta a las nuevas temperaturas y aligerando tu peso sin apenas notarlo. (Foto: Krissia)
Inclúyelos en ensaladas como esta y así irás adaptando tu dieta a las nuevas temperaturas y aligerando tu peso sin apenas notarlo. (Foto: Krissia)

Aunque nosotros solemos elaborarlas con ingredientes típicos de la dieta mediterránea como atún, bonito o caballa en aceite; no viene mal conocer otras variantes y tener a mano estas barritas de proteínas de alto valor biológico y muy poca calorías (menos de 20 por barrita) para cuando la despensa esté algo desabastecida.

1.- Con salsa de yogur: Tomando como base mézclum de hojas tiernas, añade unos rabanitos en lonchas finas, remolacha cocida en dados y barritas de surimi. Para la salsa, mezclaremos yogur natural, aceite de oliva, vinagre de Módena, mostaza de Dijon y cebollino picado.

Ensalada tropical (Foto: Krissia)
Ensalada tropical (Foto: Krissia)

2.- Tropical: en este caso, la base de nuestra la compondrán hojas de berro y kale. Sobre ellas, colocaremos mango, aguacate, pimiento verde, cebolla morada y barritas de pescado, todo ello troceado y aderezado con un aliño compuesto por aceite, zumo de lima, limón, cilantro, tabasco, curry, comino, chile y anacardos picados.

Con espinacas y garbanzos (Foto: Krissia)
Con espinacas y garbanzos (Foto: Krissia)

3.- De garbanzos, espinacas y queso feta: garbanzos cocidos, espinacas, acelgas rojas, rabanitos, queso feta, manzana Golden o Granny Smith y los palitos de pescado, serán los ingredientes de esta ensalada. La regaremos con una mezcla formada por aceite, miel, tahine, cebollino, sal, pimienta y sésamo tostado.

Ensalada mixta (Foto: Krissia)
Ensalada mixta (Foto: Krissia)

4.- Mixta: es la más clásica de las ensaladas, pero con una vuelta de tuerca. Necesitas dos cogollos baby, cebolleta, una tortilla francesa troceada, tomate, espárragos blancos, aceitunas verdes y el ‘pastel de pescado’. Mézclalo todo, añade un chorrito de aceite de oliva, vinagre y una pizca de mostaza de Dijon para darle el toque final.

¿Qué te parece este sucedáneo del pescado? ¿Lo sueles utilizar para elaborar platos rápidos?

También te puede interesar:

Este puñado de frutos secos puede salvarte la vida

Llega la moda del plato único (y no es lo mismo que el ‘combinado’)

Siete razones por las que la dieta japonesa te ayudará a perder peso

El quinto sabor o lo que tienen en común las dietas japonesa y mediterránea