Yahoo Estilo Isabel II reaparece en público muy sonriente tras su ausencia en la apertura del Parlamento británico
Isabel II ha aparecido en público este viernes por sorpresa en el Windsor Horse Show tras su ausencia el pasado martes en la apertura del Parlamento. La Reina es una gran amante de los caballos y se ha desplazado desde el Castillo de Windsor, donde reside, muy próximo al lugar donde ha tenido lugar el evento, para disfrutar de los desfiles protagonizados por los equinos. Una exhibición ecuestre, que comenzó este jueves y se alargará hasta el domingo, que la monarca no ha querido perderse puesto que se encuentra entre sus espectáculos favoritos. La soberana, de 96 años, ha llegado muy sonriente en el asiento delantero de su Range Rover, vestida de manera informal, con una blusa blanca, un cárdigan azul y unas gafas de sol. Cuando el vehículo se ha detenido cerca de la pista donde tiene lugar el desfile, la Reina se ha mostrado muy animada y ha charlado con un pequeño grupo de trabajadores a través de la ventana de su coche.
La Reina ha disfrutado de parte del espectáculo desde la comodidad de su vehículo, se la ha visto relajada, sonriendo y riendo cuando charlaba con algunos de los asistentes, mientras a pocos metros de distancia una nube de fotógrafos trataba de inmortalizar el momento. "Estaba de muy buen humor", ha contado un asistente a la revista People. "La gente que conoce en el mundo de los caballos han sido llevados para hablar con ella desde la ventana de su coche. Se puede ver que está en muy buena forma", ha asegurado la misma fuente.
Poco después, Isabel II ha descendido del coche y se ha dirigido hacia las gradas caminando lentamente con la ayuda de su bastón, mientras una multitud se deshacía en vítores y aplausos para la monarca. Después, la reina de Inglaterra ha tomado asiento al lado del de su hijo, el príncipe Eduardo, quien tampoco ha querido perderse este espectacular desfile. Junto al conde de Wessex la hemos visto aplaudir entusiasmada a los caballos. La madre del príncipe Carlos ha asistido a la exhibición ecuestre para presenciar el evento Highland Class 64, donde ha competido uno de sus adorados caballos, Balmoral Leia, una yegua parda gris de cinco años que ha sido nombrada como ganadora y, más tarde, como campeona absoluta, con la consecuente alegría y orgullo para la soberana que ha recogido la copa con una inmensa sonrisa.
Además, la reina Isabel se ha llevado otra bonita sorpresa en el día de hoy. La monarca es una apasionada de los caballos y de la equitación en todas sus facetas y algunos de sus descendientes han heredado su amor por una disciplina que conquista a una de sus nietas más jóvenes, Lady Louise Windsor. La hija del príncipe Eduardo ha participado en el espectáculo donde ha rendido homenaje a su abuela con un conmovedor gesto hacia el fallecido duque de Edimburgo. Ha participado en el show A Gallop trhough history montada en el carruaje que perteneció a su abuelo y que este le dejó en herencia.
La aparición de Isabel II se produce después de que la Reina se perdiera la inauguración del Parlamento británico este martes. La monarca solo había faltado a esta cita en dos ocasiones, coincidiendo con los embarazos de su tercer y cuarto hijo con el duque de Edimburgo, Andres de York y Eduardo de Wessex. Los Príncipes nacieron el 19 de febrero de 1960 y el 10 de marzo de 1964 respectivamente, por lo que han pasado 58 años desde que se ausentó por última vez de esta histórica ceremonia. En su lugar, fue el príncipe Carlos, su primogénito y heredero al trono, el que leyó por primera vez el discurso en nombre de la Reina. El príncipe de Gales estuvo acompañado por su esposa, la duquesa de Carnualles, y por el duque de Cambridge, segundo en la línea sucesoria.
La noticia de que la Reina no estaría a este acto fue confirmada este lunes a través de un portavoz del Palacio de Buckingham. "La Reina continúa experimentando problemas de movilidad episódicos y, en consulta con sus médicos, ha decidido a regañadientes que no asistirá a la Apertura Estatal del Parlamento", comunicó. Y añadió que "a petición de Su Majestad, y con el acuerdo de las autoridades pertinentes, el Príncipe de Gales leerá el discurso de la Reina en nombre de Su Majestad, con la asistencia del Duque de Cambridge".
