Jennifer Garner se disculpó por su 'apagada' actuación al día siguiente de aceptar su divorcio de Ben Affleck
Jennifer Garner pidió perdón por su actuación "un poco apagada" al día siguiente de aceptar su divorcio de su ex marido Ben Affleck.
La actriz, de 52 años, quedó devastada cuando ella y la estrella de 'Batman v Superman', también de 52 años, terminaron su matrimonio de 10 años en 2018 después de tener a sus hijos Violet, de 18 años, Fin, de 15 años, y Samuel, de 12 años.
La estrella protagonizaba la comedia de fantasía de 2016, 'Nueve vidas', en el momento en que se separaba de Ben, y su director Barry Sonnenfeld, de 71 años, reveló ahora que ella se disculpó por su "pobre" actuación en el set durante su dolorosa ruptura.
En su nueva autobiografía, 'Best Possible Place, Worst Possible Time' (El mejor lugar posible, el peor momento posible) asegura: "Jennifer Garner es una bellísima persona por dentro y por fuera. Cada vez que podía, volaba de vuelta a Los Ángeles, donde estaba lidiando con su marido, Ben, que tenía problemas. En su último día de rodaje, Jennifer estaba un poco apagada. Estábamos en un gran salón de baile con cientos de extras. La llevé a un lado de la sala y le pregunté si todo iba bien. Detrás de ella, a lo lejos, había cientos de extras. Se disculpó por no estar en su mejor momento. Ben y Jennifer habían decidido divorciarse la noche anterior. No pudo parar de llorar. Ella dijo: 'Está bien, Barry. Todo va a estar bien'. '¿Cómo puede ser?'. Me lamenté. 'Shhhhh. No pasa nada', dijo Jennifer. 'Todo va a salir bien. Es lo mejor'. 'No lo creo', le dije".
En 'Nueve vidas', Jennifer interpretó a Nina Brand, la esposa de un hombre de negocios que tiene su mente atrapada dentro del gato de su hija.
El cineasta de 'Men in Black' también dijo en su libro que tuvo un enfrentamiento con Donald Trump en el set de un comercial de Navidad de Macy's que dirigió en 2009, que también protagonizaron Martha Stewart, Queen Latifah, Usher, Mariah Carey y Jessica Simpson.
Dijo que Trump, de 78 años, no estaba de acuerdo con la forma en que le filmaban y exigió que le grabaran desde su "lado bueno".
Barry añadió que el ex presidente de Estados Unidos salió furioso del set después de que él le dijera: "Encuentra un ángulo de cámara que muestre mi lado bueno, o hemos terminado aquí, porque créeme, no me vas a filmar desde mi lado malo y si no puedes hacer eso, me voy".