Juzgaríamos a los demás basándonos en su figura, halló un estudio

¿Alguna vez asociaste un tipo de físico a una clase de personalidad específica? Al parecer, las personas haríamos esto de forma inconsciente al ver a desconocidos, atribuyéndoles rasgos de carácter según la forma y tamaño de su cuerpo. Conoce este y más datos interesantes que arrojó un estudio sobre el tema.

El físico ajeno y los prejuicios

Al ver un desconocido por la calle, y quizás sin enterarte, puede que le atribuyas ciertos rasgos de personalidad utilizando como única evidencia… ¡su figura! Por más alocado que suene, esa sería una de las formas de “catalogar” a los demás que tendrían las personas, según un nuevo estudio publicado en la revista científica Psychological Science.

En concreto, los resultados fueron:

• Los participantes asociaban los cuerpos más pesados o grandes con rasgos de personalidad negativos, como pereza y desmotivación.

• Las figuras más livianas o esbeltas, en cambio, tenían las mejores evaluaciones, como buena autoestima y entusiasmo.

• Las formas rectangulares tanto de hombres como de mujeres, se asociaban con seres confiables, tímidos y cálidos, todos rasgos de personalidad más pasivos.

Con esta información, informa Medical News Today, los autores del estudio podrían predecir con bastante acierto cómo una persona será juzgada utilizando esas variables, aunque la investigación no tomó en cuenta el atractivo o el género en el análisis. También hicieron la salvedad de que la cultura de cada región podría modificar estos resultados.

“Nuestra investigación muestra que las personas infieren un amplio rango de rasgos de personalidad con solo ver las particularidades físicas de un cuerpo específico”, explicó la psicóloga científica Ying Hu en esa publicación.

Cómo dejar de juzgar

Prejuzgar podría haber servido en algún momento al género humano (por ejemplo, para estar alertas al ver un animal o persona potencialmente peligrosas), y se daría de forma casi instintiva, señala la psicóloga Barbara Markway en la revista Psychology Today. Sin embargo, en el mundo de hoy hacerlo puede resultar dañino para las personas que te rodean. ¿Quieres algunas razones para dejar de prejuzgar? La experta sugiere:

• Sé consciente del prejuicio. Esto es, obsérvalo, date cuenta de que está allí, y piensa antes de hablar y causar daño. Recuerda: muchas veces no puedes deshacer un comentario hiriente.

• Despersonaliza. Alguien se comporta o se ve de una forma distinta a la tuya puede generar algún prejuicio en tu mente. Darles el beneficio de la duda y no asociarlo con lo que cada uno de nosotros haría, puede ayudar.

• Busca la esencia. Si buscas, es muy probable que encuentres algo bueno en esa persona a la que prejuzgas.

Y tú, ¿tienes ese tipo de pensamientos? ¿En qué casos sueles prejuzgar?

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