La 'antipopular' terapia para evitar la ruptura, ¿podrás aguantarlo?

¿Quieres salvar tu relación? Pues tendrás que tragar y pasar por el aro, o mejor dicho, acostumbrarte a la cornamenta

Según las estadísticas a partir del tercer año de relación, el número de encuentros sexuales disminuye hasta el 1,1 por semana. Y es que la frecuencia sexual es un problema habitual en las parejas, especialmente en las de larga duración, ya que la falta de sexo puede acabar provocando la ruptura de la pareja.

Para evitarlo, la psicóloga Deborah Taj Anapol (EE.UU.), defensora e impulsora del poliamor, nos anima a tener un amante, asegurando que la infidelidad sexual podría salvar tu matrimonio. Y a tenor de los resultados de esta encuesta, realizada por la web de citas Ashley Madison, parece que lleva razón: el 64 por ciento de los hombres y el 78 por ciento de las mujeres reconoce que la infidelidad ha tenido un efecto positivo en sus matrimonios. ¡Ojo! Que este portal supera el millón de registrados en España.

En Gleeden, otra web especializada en encuentros adúlteros, el 27 por ciento de las usuarias confiesa que “son momentos de libertad que ayudan a mantener en pie el matrimonio”. De manera que para muchos, una infidelidad bien manejada puede ser una medida de choque para salvar una relación en decadencia, siempre que no se confiese.

Y es que la infidelidad puede ser vista solamente como un acto de traición, o como una expresión de anhelo, de novedad, de libertad y autonomía que cualquier persona puede llegar a sentir en un determinado punto de su vida. De hecho, cada vez son más los estudios que aseguran que las aventuras amorosas pueden servir para salvar matrimonios.

En esta línea, la antropóloga biológica Helen Fisher, del Instituto Kinsey de Sexología, reveló en su investigación ‘Anatomía del amor: historia natural del apareamiento, el matrimonio y de por qué engañamos’, que 56 por ciento de los hombres y 34 por ciento de las mujeres que han tirado una canita al aire durante su vida matrimonial describen su relación como “feliz o muy feliz”.

“No todos reaccionamos de la misma manera ante ciertas situaciones y contextos que la vida nos presenta. Para algunos, tener hijos y criarlos, así como cumplir 40 o 50 años, puede ser complicado y la estabilidad del matrimonio puede quedar expuesta”, explica Arabella Russell, experta en relaciones de pareja.

Por otro lado, algunas personas son más propensas a ser infieles por motivos genéticos. Una investigación realizada por un grupo de científicos suecos en 2008 demostró que los hombres que poseen una o dos copias del alelo 334, gen que gestiona la vasopresina, una hormona que aumenta durante el orgasmo, tienden a ser promiscuos.

La realidad es que existen muchos factores que puede provocar una infidelidad. La falta de atención de la pareja, la insatisfacción con la vida sexual, redescubrir el deseo y la pasión o volver a sentirse atractivos y deseados son algunos de los motivos que alegan los infieles para justificar sus aventuras extraconyugales.

¿Tendrías un ‘affaire’ extramatrimonial? ¿Mantienes una relación abierta? ¿Crees que la infidelidad es un mal necesario en la pareja para que las cosas mejoren?

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