La historia detrás del documental que nunca has visto sobre la Familia Real

La relación entre la familia real y los medios de comunicación es complicada. En el mejor de los casos, podría decirse que es cautelosa, en el peor, francamente desconfiada. Sin embargo, ¿siempre fue así? Sí, pero probablemente todo empeoró a partir de un documental que se emitió hace más de 40 años.

Curiosamente, todo se debió a Tupperware.

El docudrama se titulaba “Familia Real” y fue dirigido por el entonces jefe del departamento de documentales de la BBC, Richard Cawston. Salió al aire el 21 de junio de 1969 y luego se retransmitió una semana más tarde en la ITV y en otras ocasiones a lo largo de ese año, antes de que lo archivaran en las profundas bóvedas de la BBC para nunca más ver la luz.

Esa fue la primera vez que concedieron permiso a las cámaras de televisión para que grabaran a la familia real inmersa en sus actividades cotidianas, tanto la Reina como el Duque de Edimburgo, el príncipe Carlos, la princesa Ana, el príncipe Andrés y el príncipe Eduardo. La voz en off fue escrita por la mano maestra de la comedia “Sí ministro”, Antony Jay. Todo indica que Lord Mountbatten, el tío del príncipe Felipe, fue quien persuadió a la Reina para que autorizara el documental, una decisión que, según confesó más tarde la propia Reina, lamentó profundamente.

El documental pretendía ser innovador, incluyó muchísimos metrajes inéditos sobre la familia real y fue encargado por la Reina para celebrar la investidura del príncipe Carlos. Cuando se estrenó en la pantalla, unos días antes de la investidura de Carlos en el Castillo de Caernarfon, fue visto por unas tres cuartas partes de los habitantes del Reino Unido. El documental pretendía demostrar que la familia real era, ante todo, una familia como otra cualquiera.

Sin embargo, ese fue precisamente el problema: despojar a la familia real de la distancia que habían mantenido hasta ese momento y del halo de misterio que los revestía. Sir David Attenborough, uno de los controladores de la BBC en aquella época, afirmó que el documental “asesinaba a la monarquía”.

Este documental causó un gran revuelo ya que eliminó el telón que protegía a la familia real y fue considerado demasiado intrusivo, aunque sin duda mucho menos que los formatos que abundan en la actualidad, como Gran Hermano.

Una escena en especial causó un gran impacto: en el palacio guardaban los alimentos, sobre todo los cereales, dentro de recipientes Tupperware. El público se horrorizó al ver que los monarcas usaban ese tipo de cosas. Quizá pensaban que guardarían sus Sugar Puffs en vajilla de plata.

El equipo, profesionales de la BBC y la ITV, permaneció junto a la familia real durante más de un año, filmaron escenas en el Palacio de Buckingham, el Castillo de Balmoral, la casa Sandringham y el Castillo de Windsor. También grabaron una breve conversación entre la Reina y el presidente Richard Nixon (‘ahora los problemas mundiales son más complejos, ¿no es así?’), así como una barbacoa familiar en el Castillo de Balmoral. Tuvieron que editar una escena debido a las palabrotas que le dijo Felipe a sus corgis.

En otra escena durante el desayuno, aparece la Reina contándoles a Felipe, Carlos y Ana una historia sobre cómo un dignatario asiático cayó rendido a los pies de la reina Victoria durante una reunión con otros mandatarios del Lejano Oriente.

También hubo momentos muy sinceros, como cuando el príncipe Felipe dijo refiriéndose a su suegro, Jorge VI: “Tenía hábitos muy extraños. A veces pensaba que estaba loco”. Curiosamente, la reina apareció usando dinero, aunque se dice que nunca llevaba encima, para comprarle un polo de hielo en una tienda al príncipe Eduardo, de 4 años.

Por su parte, la princesa Ana lo odiaba.

Una vez comentó: “Nunca me ha gustado la idea de la “familia real”, creo que es algo anticuado. No quería seguir recibiendo la atención que me brindaron cuando era niña. Lo último que necesitaba era permitir un mayor acceso a mi vida”.

La Reina estuvo de acuerdo y lo calificó como “una idea pésima”.

En 2011 y como parte del Jubileo de Diamante de la Reina, el palacio permitió exhibir 90 segundos del documental en la National Portrait Gallery.

Sin embargo, además de un vídeo en YouTube que dura tan solo unos minutos, es bastante improbable que el documental vuelva a ver la luz del día.

Créditos de imagen: Rex Features / YouTube

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