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Los controvertidos 'tweets' de Roseanne le pasan factura

Roseanne Barr. AFP
Roseanne Barr. AFP

Roseanne Barr se levantó el martes disipando veneno disfrazado de “bromas” en su cuenta de Twitter. Pero sus opiniones y declaraciones con profundos tonos racistas no causaron nada de gracia y la controversia fue tal que obligó a la telecadena ABC a cancelar su show “Roseanne”.

Sucede que la comediante no parece tener la misma inmunidad de su ídolo, Donald J. Trump, a la hora de enviar ‘tuits’ racistas y de odio y las consecuencias fueron rápidas y radicales. Entre otros mensajes mañaneros, ella atacó a la asesora de Barack Obama, Valerie Jarrett, por su raza y apariencia física.

“Si la Hermandad Musulmana y el Planeta de los Simios tuvieran un bebé = VJ”, escribió sobre la estratega que nació en Irán a padres norteamericanos.

El tuit ofensivo.
El tuit ofensivo.
Valerie Jarrett. AFP
Valerie Jarrett. AFP

Una de sus escritoras y consultoras del show, Wanda Sykes, quien es afroamericana y se identifica como lesbiana, anunció su renuncia de inmediato. Igualmente la emuló Sarah Gilbert, productora responsable por el regreso de la comedia, quien pidió disculpas y reiteró que nadie más en el show compartía las opiniones de Barr.

A pocas horas de los ‘tuits’, de los que la mujer de 65 años se disculpó y luego borró de su cuenta. Ella trató de adjudicar a la comedia de mal gusto sus expresiones racistas. ABC anunció su súbita decisión.

“Lo dicho en Twitter por Roseanne es aborrecible, repugnante e inconsistente con nuestros valores. Hemos decidido cancelar inmediatamente su show”, anunció la telecadena.

“Roseanne”. ABC
“Roseanne”. ABC

Esta movida no pudo haber sido fácil. La renovación del hit de los 90 fue un éxito instantáneo al punto que la compañía renovó por una segunda temporada tras la emisión del primer capítulo que fue un éxito de ratings.

Pero esta no es la primera vez que Roseanne actúa de manera racista o controvertible. Durante las elecciones presidenciales ella se expresó como ferviente fan de Trump, cosa que emula su personaje de la clase media baja en la comedia. Incluso, Jarrett es un blanco favorito de los conservadores fans del presidente. La actriz también se disfrutó muchísimo y promulgó el asunto aquel del círculo de tráfico de niños vinculado a Hillary Clinton.

La mujer se ha expresado vigorosamente contra las vacunas y ha hecho burla de las personas transgénero. Ella es prácticamente la definición de un gran segmento de los fans de Trump: blanca, gritona, con complejo de víctima y cruel. A través de sus redes no tiene temor de propagar rumores y falsedades.

En su historial de posiciones racistas, en 2013 ella comparó con un simio a otra asesora de la raza negra de Obama, Susan Rice, “un hombre con pelotas de simio colgantes”. En 2009 ella participó de una sesión fotográfica vestida de Hitler y se burló de las víctimas del Holocausto. Roseanne suele referirse a sus críticos como ‘nazis’. Y, la hoy portavoz de los votantes de Trump, se burló del venerado himno nacional en 1990 previo a un partido de beisbol.

Hay que resaltar que la mayoría de estos incidentes estaban bien documentados antes que ABC hubiera accedido a darle un show en horario estelera. Pero parece que la integridad ganó – por una vez – a los signos de dólares.

Aunque el comentario sobre Jarrett fue la gota que colmó la copa, Roseanne había incluido a Chelsea Clinton en sus ataques racistas. Ella acusó a la hija de Bill y Hilary de estar casada con un sobrino de George Soros, importante donante democrático judío. Cuando Chelsea la corrigió, ella ripostó diciendo que su marido es hijo de un senador corrupto y añadió que Soros traicionó a otros judíos durante el Holocausto para robarles sus fortunas.

Al ver este desenlace, cabe preguntarse si Roseanne sufre de algún problema en la cabeza o vive para causar controversia. Aunque no hay que tenerle pena a la millonaria, es lamentable por todos los trabajos que se perdieron.

¿Qué opinas de la decisión de ABC? ¿Eres/ eras fan de Roseanne?