María de Padilla se convirtió en reina cuando ya llevaba un año muerta

La amante del rey Pedro I de Castilla llegó a ser reina gracias a la incansable insistencia del rey. Pero si ya es difícil que la amante de un rey llegue a convertirse oficialmente en reina, lo que resulta inaudito es que lo haga después de muerta. Y así fue. Así ocurrió en el caso de María de Padilla. La única mujer que fue coronada reina cuando había transcurrido un año desde su fallecimiento. Y no es lo único excepcional en la vida de María. La castellana fue amante del rey Pedro I durante toda su vida. Otro hecho extraordinario sin lugar a dudas. A lo largo de la historia, son varios los casos de reyes y reinas que han accedido al trono muy tempranamente en su vida. Son numerosos los herederos que se han visto coronados reyes cuando eran unos críos. Pero en el extraordinario caso de María de Padilla pasa lo contrario. La coyuntura de María de Padilla es insólita y su vida es una historia de novela.

ITALY - FEBRUARY 06: Costume sketch for Maria Padilla, opera by Gaetano Donizetti (1797-1848), performed in Naples, 1848. Napoli, Conservatorio Di Musica San Pietro A Majella Museo Storico Musicale (Photo by DeAgostini/Getty Images)
ITALY - FEBRUARY 06: Costume sketch for Maria Padilla, opera by Gaetano Donizetti (1797-1848), performed in Naples, 1848. Napoli, Conservatorio Di Musica San Pietro A Majella Museo Storico Musicale (Photo by DeAgostini/Getty Images)

María de Padilla nació en 1334 en algún lugar de Castilla porque no se sabe con certeza la villa de su nacimiento. María era hija de nobles. Tenía 18 años cuando conoció conoció al rey Pedro I de Castilla. Pedro I el Cruel, según le apodaban sus enemigos, o Pedro I el Justo, según le conocían sus seguidores. Dicen que les presentó el tío de María que era miembro de la Corte y que quería que su sobrina se convirtiera en amante de Pedro I para conseguir así el favor del rey. Fueran las intenciones que fueran las del tío de María, lo cierto es que el rey de Castilla se enamoró de la joven al instante, o eso cuentan los cronistas de la época. También cuentan en esas crónicas del siglo XIV que María era una mujer muy bella y bondadosa y que influyó muy a menudo en el rey Pedro de Castilla para que perdonara la vida a numerosos condenados. El asunto es que el rey Pedro I y María se conocieron en 1352 y un año después el rey se casó con Blanca de Borbón, hija del duque Pedro I de Borbón e Isabel de Valois. Era un matrimonio de conveniencia para la monarquía. El rey tenía que casarse y se casó, pero mantuvo su amor por María de Padilla. Tres días después de la boda, el rey puso la excusa de una presunta infidelidad de Blanca y dejó a su reciente esposa instalada en Medina del Campo. El rey Pedro I se fue a la Corte con su amante, y amada, María de Padilla.

Portrait of Peter I (1334-1369), the king of Castile and León. Found in the Collection of Ayuntamiento de Sevilla. (Photo by Fine Art Images/Heritage Images/Getty Images)
Portrait of Peter I (1334-1369), the king of Castile and León. Found in the Collection of Ayuntamiento de Sevilla. (Photo by Fine Art Images/Heritage Images/Getty Images)

El Papa Inocencio VI insistió mucho advirtiendo a Pedro I que su comportamiento no era en absoluto aceptable. Pero al rey le dio igual. Pedro I y María siguieron viéndose y amándose. El rey llegó incluso a casarse de nuevo en segundas nupcias con Juana de Castro, pero eran asuntos de la Corte, su amor siempre fue para María. Sin embargo, la opción del matrimonio del rey Pedro con María no era viable en la Corte. Pero el monarca no desfalleció en su lucha por legitimar la posición de María. Pedro I logró otorgar a su amante el título de señora de Huelva pero no consiguió que fuera reina, al menos mientras María vivió.

Peter I of Castile (1334-1369) or Peter the Cruel. King of Castile and Leon. Portrait. Engraving in Spain Illustrated History, 19th century. Colored. (Photo by: PHAS/Universal Images Group via Getty Images)
Peter I of Castile (1334-1369) or Peter the Cruel. King of Castile and Leon. Portrait. Engraving in Spain Illustrated History, 19th century. Colored. (Photo by: PHAS/Universal Images Group via Getty Images)

En 1361 María de Padilla falleció, probablemente por la peste. Tras la muerte de su verdadero amor, el rey Pedro I luchó incansablemente para que se le reconociera el rango de su amor y el derecho de María de Padilla a ser considerada su verdadera esposa y, por lo tanto considerarla como reina consorte. Dicen que Pedro I lloró tanto por la muerte de María, que un año después del fallecimiento de su amante consiguió que el Arzobispo de Toledo declarara nulos sus dos matrimonios y aceptaran en las Cortes a María como su legítima esposa. Y de esta forma María de Padilla logró ser reina, aunque ya estaba muerta. María llevaba un año muerta cuando obtuvo el rango de reina. Algo ciertamente insólito, una verdadera historia de novela.