¿Meghan se negará a inclinarse ante Kate Middleton?
La relación entre Meghan Markle y Kate Middleton puede cambiar de forma significativa desde ya. A partir de ahora, Meghan tendrá que reaccionar al ver a su cuñada de manera muy diferente a como está acostumbrada, al menos en las formas. La esposa de Harry tendrá que esforzarse en realizar un gesto muy relevante ante la duquesa de Cambridge, un gesto que a Meghan no le gusta nada. Meghan Markle tendrá que hacer una reverencia a Kate Middleton, cuando se encuentren. Eso dice el protocolo. Pero, ¿Meghan puede negarse? O quizás las pregunta sea: ¿Meghan se negará a realizar una reverencia a Kate Middleton, aunque resulte obligatoria?
En el preciso instante en el que Harry y Meghan comunicaron a la Reina Isabel II su decisión de alejarse de la Familia Real británica empezaron a perder privilegios y a adquirir nuevas obligaciones. Y una de sus nuevas obligaciones será respetar la fórmula protocolaria de la reverencia a los familiares que estén por encima de ellos en la línea de sucesión al trono. Así, Harry tendrá que inclinar su cabeza y Meghan realizar una pequeña genuflexión ante el príncipe Guillermo y Kate. En rigor, los duques de Sussex siempre han estado por debajo de los duques de Cambridge en la línea sucesoria, y sin embargo nunca hicieron la reverencia ante ellos. Pero, resulta que ahora la cosa ha cambiado porque ahora la distancia en protocolo entre ambos matrimonios es mucho mayor, muchísimo mayor. Por ello la reverencia sería necesaria, según el más estricto protocolo. Aunque, en realidad, los expertos no terminan de ponerse de acuerdo sobre si realmente se tendrá que cumplir esta regla o se quedará en un formulismo aparcado.
En lo que sí parece que todos los estudiosos del protocolo británico coinciden es en afirmar que es algo que estará en manos de la Reina. Si Isabel II no indica expresamente a Harry y Meghan que deben cumplir con este protocolo ante Guillermo y Kate, Harry y Meghan se libran de esa obligación. De momento, Isabel II está demostrando que ha escogido la contundencia y la poca flexibilidad ante las consecuencias de la decisión de los duques de Sussex de dejar la Familia Real británica. Veremos qué decide la Reina sobre este asunto.
Y veremos también qué decide Meghan Markle. Porque, más allá de que finalmente resulte obligado para Meghan y Harry hacer la reverencia ante Guillermo y Kate, no extrañaría mucho que la norteamericana se niegue. Ya hemos visto en varias ocasiones que las reverencias no son “plato de gusto” para Meghan. Ni para realizarlas, ni para recibirlas. Fue muy sonada la ocasión en la que Meghan Markle acudió a un acto benéfico y la presidenta de la ONG quiso hacer una reverencia ante la duquesa de Sussex, Meghan cogió de los brazos a la presidenta y rápidamente la levantó para evitar que terminara la genuflexión, después ambas se abrazaron. Una vez más, Meghan resultó más experta en saltarse el protocolo que en cumplirlo. Ahora que las normas pueden llevar a la ex actriz de Suits a tener que inclinarse ante su cuñada, no parece nada descabellado pensar que Meghan no querrá hacer la reverencia ante su cuñada Kate. Veremos. La polémica está servida.