Mundial Qatar 2022: Bono, el arquero de Marruecos, hizo la entrada en calor, cantó el himno, pero no jugó y debió ser reemplazado

El arquero de Marruecos, Yassine Bounou, cantó el himno pero no salió a jugar el partido.
El arquero de Marruecos, Yassine Bounou, cantó el himno pero no salió a jugar el partido.

Una situación tan curiosa como muy infrecuente se dio en la previa del partido que Marruecos le ganó 2 a 0 a Bélgica por el grupo F, en otra de las grandes sorpresas del Mundial Qatar 2022.

Como si de un misterio se tratara, el arquero del equipo africano Yassine Bounou, más conocido como Bono, debió ser reemplazado por su compañero Munir Mohamedi antes de que la pelota comience a rodar. Lo llamativo fue que el guardavalla de Sevilla no solo fue anunciado entre los 11 titulares de Marruecos, sino que ingresó al campo de juego con sus compañeros, realizó el precalentamiento y también cantó el himno de su país.

Lo extraño fue no verlo cuando el equipo posó para la tradicional fotografía, algo que inicialmente nadie entendió, y otros tardaron en darse cuenta. Lo concreto es que luego del sorteo con los capitanes, y cuando comenzó el partido, Munir Mohamedi ya estaba debajo de los tres palos.

Durante el partido todo se fue develando y quedó registrado en imágenes. Cuando finalizaron los himnos, Bono se acercó a su entrenador, Walid Regragui, y le dijo algo al oído que el seleccionador comprendió de inmediato: no podía jugar. Como un rayo, fue en dirección a Munir, le dio un abrazo casi paternal y lo mandó a la cancha. El arquero suplente se sumó a la foto y luego jugó el partido.

Ante la escueta información oficial (que sólo alertó del primer reemplazo del equipo africano en el partido), lo que habría sucedido con Bono es que llegó a la cita contra Bélgica con un golpe en la cadera. Pero en el intento por calmar ese dolor, el medicamento que habría tomado lo descompuso. Por esa indisposición es que no pudo ser parte del encuentro. Incluso, durante el himno se lo había visto con sus brazos apoyados en sus rodillas y con síntomas evidentes del malestar.

Los primeros minutos le costaron un poco al arquero suplente, que debió ingresar de improviso y con una entrada en calor menos exigente que su compañero. Sin embargo, con el correr de los minutos se fue erigiendo como una de las grandes figuras del encuentro, al punto que le desvió dos fuertes remates a Eden Hazard y se mostró siempre atento, tanto por abajo como en el uego aéreo que buscó Bélgica cuando el partido se acababa y buscó el cabezazo salvador de Lukaku. Al igual que Bono frente a Croacia, Munir, que tiene 33 años y ataja en Al-Wehda FC de Arabia Saudita, fue una muralla.

Lejos de ser un improvisado, Munir había debutado en el seleccionado marroquí en 2015 y fue titular en el Mundial de Rusia 2018, en el que su selección compartió el grupo B con Irán, España y Portugal.

Otra sorpresa mundialista

El triunfo de Marruecos sobre Bélgica por 2 a 0 se suma a los otros dos grandes impactos que tuvo hasta el momento el torneo que se disputa en Qatar, después del 2 a 1 de Arabia Saudita sobre la Argentina y el de Japón sobre Alemania.

El arquero de Marruecos, Yassine Bounou, cantó el himno pero no salió a jugar el partido.
El arquero de Marruecos, Yassine Bounou, cantó el himno pero no salió a jugar el partido. - Créditos: @GLYN KIRK

Con un planteo firme en defensa y efectivo en ataque, el conjunto africano cedió el balón (los europeos tuvieron un 66% de posesión), pero pegó en los momentos justos.

Sobre el final del primer tiempo se dio una jugada polémica. Ziyech abrió el marcador con un tiro libre desde la derecha que sorprendió a Courtois. Sin embargo, en medio de la algarabía de los marroquíes, el árbitro mexicano César Ramos, a instancias del VAR, decidió no convalidar el tanto por un supuesto roce en un futbolista que estaba en posición adelantada. Bélgica, entonces, se fue al vestuario aliviado.

La segunda parte tuvo la misma intensidad que la primera. Con un equipo belga que buscó de varias maneras vulnerar el cerrojo marroquí. Pero chocó una y otra vez contra un sobrio Munir y, más tarde, contra sus propias limitaciones.

El delantero marroquí Zakaria Aboukhlal festeja después de marcar el segundo gol de Marruecos
El delantero marroquí Zakaria Aboukhlal festeja después de marcar el segundo gol de Marruecos - Créditos: @KIRILL KUDRYAVTSEV

Marruecos avisó a los 14m, con un remate cruzado de Sofiane Boufal que salió apenas junto al poste izquierdo de Courtois. Y 13 minutos más tarde llegó la apertura del marcador: Abdelhamid Sabiri, con un fuerte tiro libre al primer palo, sorprendió a Courtois, en una acción similar al tanto que antes se había anulado y por la cual pareció que hubo cierta responsabilidad del gran arquero de Real Madrid.

Como era de esperar, Bélgica se fue con todo al ataque y apostó al cabezazo salvador de Lukaku, su faro del área. Pero no hubo caso. Con el inconveniente de que eso le dio más espacios a Marruecos para sellar el triunfo de contragolpe.

Entonces, en esos electrizantes minutos finales, llegó el segundo. Después de recuperar la pelota en el medio campo, Ziyech desbordó por la derecha, y envió el centro atrás para que Zakaria Aboukhlal la cuelgue del ángulo izquierdo de Courtois. En este caso, inatajable.

El arquero belga Thibaut Courtois no puede controlar la pelota en el gol de Marruecos
El arquero belga Thibaut Courtois no puede controlar la pelota en el gol de Marruecos - Créditos: @MANAN VATSYAYANA

El pitazo final sentenció un resultado que desacomoda la lógica que se imaginaba en la previa del Mundial, en la que se suponía que Bélgica y Croacia avanzarían sin sobresaltos a los octavos de final.

Pero Qatar 2022 ya demostró que puede haber más de una sorpresa. Marruecos ratificó todo lo bueno que había exhibido en el 0 a 0 ante los croatas, y también exhibió una admirable capacidad de sobreponerse rápido a las adversidades.