Los costes por desastres naturales en el mundo bajan en lo que va de 2014

FRÁNCFORT (Reuters) - Las inundaciones, tormentas y otros desastres naturales han causado la muerte de más de 2.700 personas y cerca de 42.000 millones de dólares en daños en el mundo en el primer semestre de 2014, pero la cifra está muy por debajo del promedio de los últimos 10 años, dijo el miércoles la reaseguradora Munich Re. La mayor reaseguradora del mundo dijo que los corrimientos de tierra e inundaciones en Afganistán fueron los desastres más letales, al haber costado 650 vidas, mientras que las nevadas en Japón ocasionaron las mayores pérdidas materiales, con daños cubiertos por primas de seguros de 2.500 millones de dólares (1. 837 millones de euros). La tormenta "Ela", que azotó partes de Europa Occidental a inicios de junio, costaría a las aseguradoras alrededor de 1.800 millones de euros, dijo Munich Re. Sólo en Alemania, las pérdidas aseguradas por la tormenta ascendieron a 650 millones de euros. Pero la cantidad total de 42.000 millones de dólares en el primer semestre y los 17.000 millones de dólares en declaraciones pagadas por las aseguradoras están bajo el promedio de los últimos 10 años de 95.000 millones de dólares y 25.000 millones de dólares, respectivamente, indicó Munich Re en su informe semestral sobre desastres naturales. El número de muertes a nivel global bajó a una cifra de las 53.000 víctimas fatales de media registradas en los últimos 10 años y los 9.100 fallecimientos reportados en la primera mitad de 2013. "Por supuesto, es una buena noticia que las catástrofes naturales hayan sido relativamente moderadas hasta el momento", dijo Torsten Jeworrek, miembro del directorio de Munich Re y responsable del negocio global de reaseguradoras, en un comunicado. "No debemos olvidar que no ha habido cambios en la situación general de riesgos", aseveró. La evaluación de Munich Re concuerda con otras advertencias centradas actualmente en el fenómeno del Niño, que genera un calentamiento en las temperaturas del océano Pacífico y podría desarrollarse en el otoño boreal, de acuerdo a meteorólogos. El Niño afecta a los patrones climáticos y puede generar tanto inundaciones como sequías en diferentes partes del mundo, afectando cultivos y el suministro de alimentos. Munich Re dijo que la aparición de manera acentuada del fenómeno climático elevaría las probabilidades de un desarrollo de La Niña el año siguiente, que tiende a incrementar la actividad de huracanes.