Octavio Ocaña no se disparó, habría sido ejecutado según se informa en último peritaje

A casi año y medio del trágico deceso de Octavio Ocaña se reveló el peritaje independiente sobre la muerte del actor, el cual determinó que el artista no se suicidó ni manipuló un arma de fuego, como sostuvo la Fiscalía General de Justicia del Estado de México en su momento.

Según Mileno, de acuerdo con las conclusiones del criminalista Mauricio Reséndiz, a petición de la familia, se encontraron contradicciones con la versión hasta ahora conocida, pues contrario a la versión oficial, Ocaña habría recibido un disparo de un arma superior a la que portaba el actor cuando se encontraba acostado sobre la carpeta asfáltica.

A través del medio de comunicación se reveló que “el peritaje establece que no existen indicios de huellas en el arma calibre .380 sin número de identificación, que determine el uso, tenencia y manipulación por parte del occiso”.

De la misma manera, se informó que no existe evidencia de “producción e intercambio de indicios de carácter químico, como plomo, bario o antimonio que establezcan que Ocaña accionó algún arma el día de los hechos”.

Sobre las marcas del lado del conductor de la camioneta que conducía Ocaña, se concluyó que “no corresponden a un disparo de un arma de fuego calibre .380”, además de que las características de la lesión muestran que “es de un calibre superior”.

Finalmente, se explicó que Octavio Ocaña fue “lesionado por un proyectil disparado al exterior del vehículo cuando se encontraba en posición decúbito ventral con su cabeza lateralizada hacia la derecha y sobre un costado de la carpeta asfáltica”, por lo que se determina que el actor habría sido prácticamente “ejecutado”.

Según el informe, después del impacto de la camioneta, Octavio fue obligado a bajar, ubicándolo boca abajo con la cabeza hacia el lado derecho sobre el piso, momento en el que una persona disparó a una distancia mayor a un metro hacia el cráneo de Ocaña,