Sálvame explota las miserias de Paco Porras, ahora en la indigencia

En pleno frío polar en Madrid a causa de la borrasca Filomena, preocupa muchísimo el estado de las personas sin hogar y los animales de la calle. Sálvame, que sabe muy bien que el drama siempre vende en televisión, ha explotado la situación del vidente Paco Porras.

Paco Porras se hizo de oro durante la década de los noventa cuando ‘Crónicas Marcianas’ nos amenizaba las noches a cargo de Javier Sardà. Porras, de la pandilla de Tamara (ahora Yurena), Leonardo Dantés y Toni Genil, se hizo famoso por su estrambótica personalidad y sus poderes de clarividencia a través de hortalizas, o eso decía él, claro.

El caso es que a ‘Sálvame’ ha llegado la noticia de que este pobre hombre enfermo del corazón ahora vive en la calle y pide en las iglesias porque no tienen ningún tipo de pensión. ¿Qué ha hecho el programa en vez de intentar ayudarle en privado o de omitir su trágico estado? ¡Pues sacarle rentabilidad en forma de audiencia!

El programa abría con el cebo típico “un famoso muy famoso que lo tuvo todo y que ahora vive en la miseria”, Kiko Hernández hacía una porra con sus colaboradores y, entre risas, daban nombres de posibles personas que podrían ser hoy en día indigentes.

Algunos decían Policarpo Díaz, el boxeador, otros bromeaban con Carmen Borrego y todo con una frivolidad que pone los pelos de punta. El único que conservó el respeto por un tema tan serio que, además, le puede costar la vida a una persona con estas temperaturas gélidas, fue Kiko Matamoros quien incluso llegó a las lágrimas recordando a un primo suyo que fue indigente y acabó falleciendo con una sola pierna tras ser arrollado por un tren.

Volviendo a Paco Porras, el programa emitía el testimonio telefónico de Miguel, un amigo de Paco, que decía temer por su vida. Según esta fuente, Paco había vivido tres años en su casa acogido por él pero hace seis días que no aparece por allí y se ha dejado el teléfono, los crucifijos y sus pocas pertenencias sin previo aviso.

‘Sálvame’ mandaba a una reportera a ir preguntando por las calles de Madrid a otras personas sin hogar y a transeúntes que aseguraban haber visto a Paco Porras deambulando sin rumbo por las calles. El show se tornaba dantesco y de un mal gusto increíble.

El espacio de Jorge Javier hacía un llamamiento para encontrar a Paco Porras pero, por desgracia para ellos, no hubo suerte en la búsqueda. Además, Kiko Hernández llevaba el asunto al extremo del amarillismo diciendo “esperamos encontrarle a tiempo” insinuando que Porras podría morir en cualquier momento a causa del frío.

Obviamente eso es cierto pero como él, los 40.000 sin techo que tiene nuestro país y parece que de ellos nadie habla. Lejos de hacer labor social, ‘Sálvame’ hurgó en la miseria de Paco recordando los “millones de euros” (que ya me extraña) que habría ganado el vidente en sus días de gloria televisiva.

También vendían con pena que hace un par de años sufrió un infarto al corazón y que no estaba tomando su medicación porque era cara, 120€, y no podía permitirse el tratamiento que no le cubre la seguridad social.

Seguramente al haber destapado la situación de vulnerabilidad social de Paco Porras reventaron los audímetros y no será de extrañar que continúen en su búsqueda hasta que logren el tan ansiado testimonio en directo.

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