Parásitos en las piscinas van en aumento, cómo combatirlos

Es común acudir a las piscinas públicas para refrescarse durante el verano, pero podrías estarte exponiendo a una serie de parásitos y bacterias causantes de enfermedades, y la culpa podría ser tuya. Toma nota de qué sí y qué no debes hacer a la hora de ir a nadar para evitar enfermarte.

Los parásitos y bacterias en las piscinas van en aumento, según varios reportes de EEUU. Foto: Thomas Barwick / Getty Images.
Los parásitos y bacterias en las piscinas van en aumento, según varios reportes de EEUU. Foto: Thomas Barwick / Getty Images.
Parásitos en aumento

Los parásitos y bacterias se reproducen con bastante facilidad en las instalaciones de agua, y en los últimos años ha habido un considerable aumento de brotes de estos, y por lo tanto de infecciones causadas por ellos.

Por ejemplo, los Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC por sus siglas en inglés) reportó que solo entre los años 2000 y 2014, hubo más de 500 brotes de enfermedades en piscinas, y 27,219 personas infectadas reportadas.

La mayoría de estas se deberían a tres parásitos o bacterias principales. La más común es la cyrptosporidium, la cual es tan fuerte que puede sobrevivir en el agua clorada hasta 10 días, según recoge el portal WebMD. Entre sus principales síntomas están los brotes de diarrea, los cuales se han multiplicado en los últimos dos años, y triplicado desde 2004.

En segundo lugar estaría la bacteria pseudomona, la cual sería responsable de infecciones como oído de nadador y foliculitis de bañera, o erupción de bañera.

Por últlimo está la causa más letal de todas es la legionella, responsable de la enfermedad del legionario, que puede ser mortal.

La culpa la tenemos en parte los usuarios

Si bien el mantenimiento de las piscinas es importante para evitar brotes, los usuarios somos en gran parte responsables de favorecer la proliferación de parásitos y bacterias en sus aguas. En mayo de 2018 el Consejo de Calidad y Salud del Agua, de EEUU compartió los resultados de una encuesta sobre el uso de piscinas. En él se recoge que hasta 27% de los adultos habría orinado dentro de una piscina pública.

El mayor problema de la orina es que esta crea nuevos químicos al mezclarse con el cloro, haciendo que haya menos de este disponible para desinfectar y matar las bacterias que más problemas suelen causar.

De acuerdo al mismo reporte, se encontró que hasta 17% de los adultos se metería a nadar a una piscina media hora después de presentar diarrea, cuando la recomendación es de no hacerlo durante al menos dos semanas. Esto representaría un problema, por la presencia de bacterias que también sobreviven en el agua.

La mayoría de las infecciones y brotes de piscina se pueden prevenir con pequeñas acciones. Foto: Yuseke Murata / Getty Images
La mayoría de las infecciones y brotes de piscina se pueden prevenir con pequeñas acciones. Foto: Yuseke Murata / Getty Images
Qué sí puedes hacer
  • No tragues agua de la piscina. Como reporta el diario The New York Times, basta solo un trago para que adultos y niños sanos entren en contacto con bacterias que causen diarrea durante semanas, dolores estomacales, náuseas y vómitos. Como recalca WebMD, el cloro no esteriliza el agua ni la hace bebible.

  • Revisa el historial de inspecciones de la piscina. Al menos en EEUU puedes hacerlo en línea o directamente en cada una de ellas.

  • Checa tú mismo la calidad del agua. Puedes comprar tiras para revisar el PH del agua, así como la presencia de ciertas sustancias, las cuales solo deben sumergirse en el agua unos segundos.

  • Que los niños vayan al baño. Haz pausas constantes para que los pequeños vayan al baño, y evitar así accidentes.

  • Ojo con los pañales. Cámbialos constantemente, y sobre todo asegúrate de hacerlo lejos del agua.

  • Dúchate bien antes de entrar. Toma una ducha de al menos una ducha de un minuto antes de nadar. Además, WebMD recomienda lavar bien a los niños con jabón antes de entrar.

  • Si tienes diarrea no nades. Lo recomendable es no hacerlo hasta dos semanas después de los síntomas, para evitar contagiar a nadie.

¿Qué más crees que podrías hacer para evitar los parásitos en las piscinas?

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