El príncipe Andrés intentará limpiar de nuevo su imagen con una autobiografía

El príncipe Andrés credit:Bang Showbiz
El príncipe Andrés credit:Bang Showbiz

Se cree que el hermano menor del rey Carlos ha iniciado el proceso de negociación con varios autores estadounidenses para que le ayuden a escribir un libro y seguir así los pasos de su sobrino Harry, que contó 'su verdad' acerca de la vida en el seno de la familia real británica en una explosiva autobiografía que ha sido todo un éxito de ventas.

En el caso del príncipe Andrés, sería la oportunidad perfecta para compartir sin interrupciones su versión de los hechos acerca de su amistad con el fallecido Jeffrey Epstein, que se quitó la vida en prisión mientras esperaba a ser juzgado por tráfico de personas y explotación sexual.

Si de verdad se ha propuesto abrir de nuevo esa caja de Pandora, sería imposible que no mencionara a Virginia Giuffre, la mujer que le acusó de abusar sexualmente de ella cuando era menor de edad en el marco de la red internacional de prostitución de menores creada por Epstein. Al final Andrés acabó llegando a un acuerdo confidencial por una cantidad de dinero no divulgada, según el cual reconocía que ella había sido víctima de violencia sexual y evitaba así enfrentarse a un juicio en Estados Unidos.

Llegar a un acuerdo con alguna editorial importante para publicar su libro implicaría una ayuda económica muy necesaria ahora que su hermano Carlos se ha propuesto reducir el número de personas que trabajan en representación del monarca y reciben apoyo financiero. Andrés tampoco ha recibido una inyección de dinero tras la muerte de su padre porque el actual rey ha sido el beneficiario único de la herencia, tal y como es costumbre en la monarquía británica.

La última vez que el duque de York trató de limpiar su nombre no salió demasiado bien parado. Su entrevista con Emily Maitlis en noviembre de 2019 no contribuyó a rehabilitar su imagen como él esperaba y al final acabó provocando su retirada de la vida pública porque el público le percibió como un hombre frío, que no mostraba ningún tipo de empatía con las víctimas de Epstein, y que además fue incapaz de ofrecer explicaciones satisfactorias sobre su