Yahoo Estilo Programar tus actividades de ocio haría que las disfrutes menos
¿Tienes marcadas en tu agenda tus actividades ocio? Si tu respuesta es sí, te tenemos una mala noticia: el simple hecho de tenerlo apartado en tu calendario haría que las disfrutes menos.
Selin Malkoc, profesor de marketing en la escuela de Negocios Fisher de la Universidad Estatal de Ohio, y Gabriela Tonietto, estudiante de doctorado de la Universidad de Washington en San Luis, EEUU, llevaron a cabo una serie de estudios tras los cuales encontraron que programar actividades de ocio, como ir al cine o tomarse un descanso para tomar café, haría que los disfrutemos menos.
Para uno de estos experimentos, se dividió a un grupo de estudiantes en dos grupos. A todos se les dio un calendario semanal con horarios marcados para clases y actividad extracurriculares que se les pidió imaginar que era el suyo. A la mitad de los participantes les pidieron hacer planes para ir a tomar helado con un amigo con dos días de antelación, y marcarlos en el calendario. A la otra mitad se les pidió imaginar que se encontraban con un amigo y que iban a tomar un helado en ese momento.
Los del primer grupo consideraron a la cita como un “compromiso” o una “tarea” más a hacerse en la semana, y no como un momento de ocio.
En otro experimento, se les pidió elegir un video de Youtube, solo que a la mitad de los participantes se les pidió elegir una fecha y hora específica para verlo, y marcarlo en el calendario, mientras que a la otra mitad se les permitió verlo de inmediato. En este caso los resultados mostraron que los del primero grupo disfrutaron menos el video que los segundos.
“La gente asocia los horarios con el trabajo. Queremos que nuestras actividades de ocio fluyan libremente”, comentó Selin Malkoc. “El tiempo debería volar cuando te diviertes. Cualquier cosa que limite y restrinja nuestro ocio, le quita placer”, agregó.
Si bien encontraron que poner un horario de inicio específico para comenzar una actividad de ocio bastaría para que la disfrutemos menos, también descubrieron que planearlo, pero no de forma específica, disminuiría este efecto negativo.
Para ello realizaron otro experimento para el que colocaron un carrito en un campus universitario con el propósito de regalar café y galletas a los estudiantes durante exámenes finales. Pero, antes de abrirlo, repartieron dos tipos de boletos: unos tenías fecha y horario específico para ir por el café y galletas; los otros tenían un horario abierto de dos horas para ir. Todos los estudiantes llenaron un cuestionario tras recibir la recompensa.
En este caso descubrieron que los estudiantes que habían ido por el café en un horario específico lo habían disfrutado menos que los que tuvieron una ventana de tiempo más amplia para ir por él.
Entre los resultados, publicados en la revista Journal of Marketing Research, los investigadores concluyeron que el solo hecho de poner un horario de inicio a una actividad de ocio, hace que la disfrutemos menos, siendo mejor planear ver a un amigo “por la tarde”, que exactamente a la 1pm.
Agregaron que esto aplicaría a las actividad de ocio que duran un par de horas o menos, así que no te preocupes por tener un horario específico para tus próximas vacaciones, aunque es verdad que no suele gustarnos que estas se acaben.
@travesabarros
También te puede interesar:
Las personas inteligentes serían felices pasando menos tiempo con amigos
Localizan los genes que intervienen en tu felicidad
