¿Qué dicen Risto Mejide y Ana Rosa Quitana sobre el nombramiento de Màxim Huerta?

Está acostumbrado a dar giros de 180 grados en el plano profesional. Lo demostró en 2005, cuando cerró su etapa de cinco años como presentador de Informativos Telecinco para incorporarse al equipo de El programa de Ana Rosa. O cuando, después de diez años, dejó el magacín de Mediaset para mudarse a París y para empezar a escribir allí una novela. Sin embargo, ningún cambio tan radical como el que le lleva ahora a tomar la cartera de Cultura y Deportes con el Gobierno de Pedro Sánchez.

Su inesperado nombramiento aún retumba las redes. En Twitter, Màxim Huerta (47) se convirtió en ‘trending topic’ mundial en la tarde del miércoles 6 al registrar más de 40 mil menciones en las primeras tres horas de su entrada en la política. Además, en el mismo espacio de tiempo, hubo más de 38 mil tuits con las palabras “ministerio de cultura” y casi 3.500 con “Ana Rosa Quintana”.

Entre esos comentarios se encontraron las felicitaciones de muchos de sus compañeros periodistas y del sector audiovisual. Risto Mejide escribió: “Me parece uno de los tipos con más sensibilidad, inteligencia y cultura que podría ocupar esa cartera”. La última directora de la academia de Operación Triunfo, Noemí Galera, también se mostró encantada: “Feliz por Màxim Huerta y por el país”–. Algo parecido hicieron Cristian Gálvez o Máximo Pradera. La que fue su jefa durante seis años, Quintana, también le dedicó unas palabras en las redes: “Todos estamos emocionados con el nombramiento de nuestro compañero. Será un ministro conciliador, sensato y con sensibilidad. ¡Orgullo!”.

Por otro lado, en Twitter vienen recordando algunas de las afirmaciones más contundentes del valenciano. Especialmente, cuando escribió en 2010 sus pensamientos sobre el Deporte –“Lo odio. Qué manera de sobrevalorar lo físico”– o sobre su posición antitaurina –“No me gusta mucho ver sufrimiento mezclado con aplausos”–, dos materias que ahora deberá tratar en su cartera. Al respecto de la tauromaquia, también manifestó en 2016: “Alegrarse de la muerte de un torero no os hace más amantes de los animales. Qué mala defensa. Así no”.

Su entrada en el Gobierno de Pedro Sánchez ayudará a Màxim a reponerse de los momentos difíciles vividos en el plano personal en los últimos tiempos. Primero, el nuevo ministro perdió a su padre, enfermo de Alzheimer, el 31 de agosto de 2017. Luego trata de recuperarse de su bache sentimental, ya que el pasado mes de marzo decidió borrarse de su brazo derecho un tatuaje que se hizo estando enamorado. Poco más se sabe al respecto.

Aunque siempre se muestra muy discreto en cuestiones personales, a principios de 2016, Huerta manifestó: “He tenido muchas parejas, pero de corta duración. No he llegado a aburrirme en el amor”. En la misma entrevista confesó usar Tinder. “De vez en cuando lo abro y lo cierro. No vale para nada. De vez en cuando lo abro y lo cierro. No vale para nada”, añadió Màxim, quien reconoció que “alguna vez” le funciona esta app para ligar.

El relevo del popular Íñigo Méndez de Vigo como ministro de Cultura y Deporte devuelve a Huerta al foco mediático. La última vez que Màxim trabajó delante de las cámaras de una forma regular fue en otoño 2016, cuando presentaba Destinos de película en La 1, donde recorría el mundo para visitar algunos escenarios de clásicos del celuloide. Al terminarse el programa, empezó a dar forma a las dos últimas de sus siete novelas: La parte escondida del iceberg, en la que ficción algunas de aventuras sentimentales en la capital francesa; y Firmamento, editada hace un mes.

Recientemente, Huerta, seguidor de Ana María Matute, también venía escribiendo en medios como Glamour, 20 Minutos o National Geographic, además de formar parte del equipo de Gente despierta, el espacio de RNE. Eso sin olvidar su faceta de ‘influencer’, un trabajo que realizaba hasta hace unos días con la ayuda de Okiko Talents, la misma agencia que Gala González, Miranda Makaroff o Brianda Fitz-James Stuart.