Lo que suena: cómo es Renaissance, el nuevo álbum de Beyoncé

Beyoncé lanza su nuevo álbum, Renaissance
Beyoncé lanza su nuevo álbum, Renaissance - Créditos: @Mason Poole

Artista: Beyonce. Álbum: Renaissance. Canciones: “I’mThat Girl”, “Cozy”, “Alien Superstar”, “Cuff It”, “Energy”, “Break My soul”, “Church Girl”, “Plastic Off The Sofa”, “Virgo’s Groove”, “Move”, “Heated”, “Thique”, “All Up In Your Mind”, “America Has a Problem”, “Pure/Honey”, “Summer Rennaissance”. Edición: Sony. Nuestra opinión: muy bueno.

La “leidi godiva” que aparece en la portada de Renaissance, el nuevo álbum de Beyoncé, es una postal de leyenda porque la historia (aquella del siglo XI) lo es. Pero hoy, si la Godiva saliera desnuda en una recorrida por las calles del pueblo, montada en su caballo, difícilmente podría hacer un pacto con la gente, para que nadie abriera las ventanas de su casa para observarla. De hecho, Beyoncé, la Godiva de la fotografía, no pudo contener la ansiedad de sus fans. Su disco se filtró tres días antes de su lanzamiento.

Beyoncé, en la portada de su nuevo álbum, Renaissance
Beyoncé, en la portada de su nuevo álbum, Renaissance - Créditos: @Carlijn Jacobs

Eso no pasaba en los tiempos de Godgyfu y su esposo Leofric, conde de Chester. Pero Beyonce, de cualquier modo, se verá más como una amazona que como esa discreta esposa que salió desnuda para cumplir una promesa. La cantante necesitará mostrar que sigue siendo una diva sexy a los 40, y una de las reinas de los principales imperios de la industria de la música pop. Tiene 28 premios Grammy y millones de discos vendidos en dos décadas de carrera.

Renaissance sugiere un renacimiento luego de la pandemia, luego de los casi tres años que le llevó grabar y editar el álbum . De todos modos, no habrá referencias muy explícitas a estos asuntos en las canciones. Más bien habrá música positiva y, en la mayoría de los 16 tracks, bailable. También es un viaje en el tiempo a ritmos y tendencias que vuelven a ponerse de moda. La novedad de Beyonce no es novedosa, pero es un muy buen trabajo en el marco de su discografía.

El house pretérito, el R&B y algún aderezo Motown como condimento atravesarán el álbum de una manera elegante y delicada; otras veces muy directa. También habrá títulos con los que el oyente fruncirá el ceño en gesto de: “¿qué dirá Beyonce en esta canción?” (por ejemplo, “America Has a Problem”, o “Church Girl”). Sin embargo, no son las dobles lecturas las que sobresalen a medida que avanzan las canciones. Solo deslizará algunos comentarios incisivos, o irónicos. “Estoy advirtiendo a todos. Tan pronto como entre en esta fiesta. Voy a dejar ir este cuerpo. Voy a amarme. Nadie me puede juzgar excepto yo. Nací libre”, advierte en “Church Girl”.

A seis años de su último disco estreno, Beyoncé publicó Renaissance
A seis años de su último disco estreno, Beyoncé publicó Renaissance - Créditos: @Mason Poole

En sus propias palabras –fuera del disco pero a propósito de este lanzamiento– puede haber una buena síntesis: “[Renaissance] me permitió sentirme libre y aventurera en una época en la que poco más se movía. Mi intención era crear un lugar seguro, un lugar sin juicios de valor. Un lugar para estar libre de perfeccionismo y pensamiento excesivo. Un lugar para gritar, soltar, sentir libertad. Fue un hermoso viaje de exploración”.

Por otra parte, es un álbum superador en varios sentidos. La cantidad de colaboradores que se suman a un proyecto puede ser contraproducente, no en la individualidad de las canciones (que es lo que hoy tiene más valor en esta industria) sino en el álbum como producto final que engloba todo un proceso. En ese sentido, Beyoncé tuvo muchos artistas y productores que la acompañaron. Incluso algunos muy famosos en el mercado de la música. Desde su marido Jay-Z a Grace Jones; desde Skrillex a Tems. En ese contexto de tanta variedad y eclecticismo, el álbum no pierde su unidad en ningún momento y esa es una de sus grandes claves.

En la nómina de feat y coproductores también figuran Mike Dean, Kelman Duran, Chris Penny, Luke Solomon, Honey Dijon, Terius “The Dream” Gesteelde-Diamant, Nova Wav, Rissi, Raphael Saadiq, Al Cres, Cristopher Tricky Stewart, Jens Christian Isaken, Guilty Beatz, Jahaan Sweet, Neenyo, Sevn Thomas, Lil Ju y Jameil Aoessey, entre muchos otros.

La estética sonora tiene soul y un house finisecular con el que se hace una puesta en valor de la música de décadas atrás. Un flashback a los bancos de sonidos de las más primitivas computadoras hogareñas, de la década del 80 y a las máquinas de ritmo profesionales. “Break My Soul”, que ya había adelantado (es un verdadero viaje al pasado). “Pure/Honey” parece atravesado por los universos sonoros del Towa Tei de los noventa, en proyectos solistas o cuando era una las luminarias creativas de Deee-Lite. Pero también aparece el estilo Prince en la última parte de tema. Y, por último, el fraseo que quizá sea propio de la tierra de Beyonce, Texas. “Alien Superstar” también es muy Prince en sus primeros compases. Y más tarde, hasta parece hacerle un guiño al “I’m Too Sexy” de Right Said Fred, treinta años después, cuando dice “I’m too classy for this world” en el tema “I’m That Girl”. Aunque no sea esa, en absoluto, su intención.

Tampoco ha sido su intención decir lo que dijo en “Heated” a través de algunas palabras que sonaron chocantes. Pero, a pocos días de su estreno, se armó un revuelvo en redes y la diva dio las disculpas del caso. Quizás quede como una anécdota que no hará mella en el sentido que buscó para este álbum. Ese que la muestra positiva y con el cuerpo y la mente puestas en el presente, pero con ese toque vintage que ha querido darle a su disco, a partir de reglas básicas de la música bailable. Así es Renaissance.