Yahoo Estilo ¿Solo roncas o tienes apnea del sueño?
Se calcula que alrededor de la mitad de los norteamericanos roncaría, y aunque es algo que llegamos a considerar normal, en algunos casos podría ser señal de algo más grave, como la apena del sueño.
Por qué roncamos
Roncamos cuando los tejidos de nuestra garganta se relajan lo suficiente como para obstruir, parcialmente, el paso del aire. Esto provoca que cuando respiramos vibren, y por lo tanto crean el famoso sonido que a muchos quita el sueño. También puede ocurrir cuando, en ciertas posiciones, tendemos a bloquear las vías respiratorias.
Con la edad es más propenso que ronquemos, pues nuestra garganta tiende a estrecharse y perdemos tono muscular en el cuello. Pero habría otras causas:
Es más común que los hombres ronquen, pues tienen las vías respiratorias más estrechas en general.
Tener la garganta estrecha, es una de las principales causas, pero también tener un paladar plano y adenoides grandes.
Tener congestionadas las vías respiratorias, como cuando tenemos gripa, también bloquea las vías respiratorias, aumentando los ronquidos.
Tener las amígdalas o adenoides inflamadas, también podría provocar ronquidos.
El sobrepeso también sería una causa, pues se suele tener músculos del cuello con menos tono muscular que bloquearían la respiración.
La posición influye, sobre todo dormir boca arriba.
Fumar, tomar alcohol y la ingesta de algunos medicamentos también, pues aumentarían la relajación muscular.
Los ronquidos pueden tratarse, lo que suele incluir cambios de estilo de vida y la implementación de algunos dispositivos, como tiras nasales y en ocasiones cirugía.
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Pero roncar podría ser señal de apnea del sueño
La apnea de sueño es un trastorno que suele asociarse con los ronquidos, pero que se acompaña con periodos en los cuales la respiración se interrumpe por periodos cortos, de unos segundos, o hasta de un minuto. Esto suele ocurrir unas 30 veces por hora y suele ser más común en hombres de mediana edad.
Similar al ronquido, ocurre que las vías respiratorias se colapsan, pero al grado de impedir por completo el paso del aire, y además de la edad, otras causas serían tener la lengua o amígdalas grandes, así como el tamaño y forma de la cabeza y cuello.
Si bien es verdad que quien ronca tendría mayor probabilidad de padecer apnea del sueño, no siempre es el caso. Pero sí es importante saber identificar las señales de este trastorno para poder tratarlo.
Algunos de los síntomas de apnea del sueño incluyen:
Personas cuyos ronquidos son muy profundos y sonoros.
Roncar siempre.
Tener el sueño muy inquieto.
Somnolencia constante durante el día.
Presentar pausas irregulares en la respiración o hasta dejar de hacerlo por momentos.
Ronquidos interrumpidos por jadeos o sonidos de asfixia.
Levantarse de noche, varias veces.
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La apnea tendría otros riesgos
Lo primero a considerar de este desorden del sueño es que se descansa mal, lo que provocaría que estemos somnolientos durante el día. Pero, las personas que la padecen también tendrían un mayor riesgo de padecer problemas de salud, por ejemplo:
Hipertensión, problemas cardiovasculares, y arritmia miocárdica.
Diabetes y síndrome metabólico.
Fibrilación auricular.
Mayores niveles de estrés, pues la apnea provocaría mayor segregación de la hormona cortisol.
Se duerme mal, lo que se asocia con una mayor ganancia de peso, pérdida de memoria y envejecimiento prematuro.
También provocaría un mayor riesgo de padecer algunos tipos de cáncer.
Además, se asociaría con algunos casos de depresión, irritabilidad y disfunción sexual.
Si bien la apnea es más común en hombres y a partir de la mediana edad, los niños también la pueden padecer, y en ellos habría otros riesgos asociados, por ejemplo:
Mal crecimiento.
Problemas para prosperar.
Retrasos en el desarrollo.
Complicaciones cognitivas y de desarrollo.
Es por ello que, si notas que alguien muestra alguno de los síntomas de una apnea de sueño es importante acudir con un especialista, quien determinará, a través de un diagnóstico médico y un examen físico, si se padece apnea del sueño para tomar los pasos pertinentes para tratarlo.
En la mayoría de los casos el tratamiento incluye la utilización de una mascarilla que cubre la nariz y la boca. Se trata de un soplador de aire constante, cuyo flujo y presión obligarían a mantener las vías respiratorias abiertas todo el tiempo. Pero hay otras opciones que el especialista podría ayudar a encontrar para ti.
@travesabarros
