Rusia compra lealtades en África con una controvertida gira de Lavrov al Sahel

Moscú/Rabat, 8 feb (EFE).- Rusia ha puesto una nueva pica en África, donde busca desesperadamente socios para burlar las sanciones occidentales a costa de potencias como Francia, con una controvertida gira al Sahel de su ministro de Exteriores, Serguéi Lavrov, que ya visitó Mali, llegó hoy a Mauritania y cerrará su periplo en Sudán.

"Al igual que nuestros amigos de Mali y la gran mayoría de países africanos, consideramos que las antiguas metrópolis deben olvidar cómo conquistaban y explotaban estos territorios, este continente. Deben aceptar que el mundo ha cambiado", dijo Lavrov durante su estancia en Bamako, la capital maliense.

Ésta es la segunda gira de Lavrov al continente africano desde principios de año, ya que en enero viajó a Sudáfrica, Angola, Eritrea y Esuatini, lo que despertado el nerviosismo en las capitales occidentales.

PUTIN PRESIDIRÁ CUMBRE CON ÁFRICA

Antes de viajar a Sudáfrica, Lavrov ya subrayó que África sería una de las claves de la reorientación de la política exterior rusa debido al antagonismo con Occidente por la campaña militar rusa en Ucrania.

De hecho, ya hay fecha para la segunda cumbre Rusia-África, que se celebrará en julio en San Petersburgo, la ciudad natal del presidente ruso, Vladímir Putin, y estará centrada, entre otras cosas, en la seguridad alimentaria, según adelantó el ministro.

Moscú aprovecha los antiguos lazos de amistad con los aliados de la Unión Soviética, que apoyó abiertamente a los movimientos de liberación nacional durante la Guerra Fría, pero también los nuevos formatos y actores no gubernamentales.

Ese es el caso del grupo de mercenarios Wagner, muy activo desde hace años en países como la República Centroafricana, Sudán, Mozambique o Libia.

Recientemente, EEUU acusó a Wagner de socavar la independencia de los países africanos con el fin de recabar "ganancias ilícitas" que servirían para apuntalar sus operaciones militares en Ucrania.

GRANO Y ARMAS

Los gobiernos africanos están interesados tanto en el cereal ruso como en su armamento. De hecho, ese tema copó la agenda de las conversaciones de Lavrov.

En un intento de paliar la crisis alimentaria, Putin llegó a prometer a mediados del pasado año grano gratis a los países más necesitados, aunque el jefe de la diplomacia rusa acusó en Johannesburgo a Occidente de obstruir esos suministros.

En el plano militar buques rusos, chinos y sudafricanos efectuarán a finales de este mes maniobras navales conjuntas en la costa oriental de Sudáfrica.

Además, Lavrov cerrará su actual gira en Sudán, donde Putin ordenó en 2020 firmar con las autoridades de ese país del Cuerno de África un acuerdo para abrir una base naval en el mar Rojo.

No obstante, la firma del tratado para la primera base militar rusa en el continente se retrasa, ya que las nuevas autoridades resultantes del golpe militar de octubre pasado no parecen querer enemistarse con Occidente.

LAVROV APOYA LA JUNTA MILITAR MALIENSE

Lavrov abordó también la cooperación militar con la Junta maliense, cuyo ministro de Exteriores, Abdoulaye Diop, visitó Moscú el pasado año.

Destacó que a mediados de enero llegó a Bamako la segunda partida de aviones rusos, que incluye cazas Su-25, helicópteros Mi-8 y aviones tácticos de transporte.

En mayo de 2022 Bamako rompió en favor de Rusia el tratado de cooperación en materia de Defensa que firmó en 2014 con Francia, que acusa a las autoridades de perpetrar abusos contra los civiles.

"Debemos mejorar nuestro potencial defensivo, especialmente en material de aviación y Rusia responde a nuestras peticiones. En lo que respecta a Francia, preferimos cooperar con Rusia, ya que ha traído la paz a nuestro país. La cooperación no responde a nuestros intereses", aseguró tajante Diop.

SAHEL, UN OASIS DE LEALTADES

En el marco de ese intento de buscar aliados a la causa en el Sahel, Lavrov visitó hoy por primera vez Mauritania, donde fue recibido por el presidente, Mohamed uld Cheij El Ghazuani, al que garantizó que satisfará sus necesidades de fertilizantes, grano e hidrocarburos.

"Está claro que Rusia otorga una importancia creciente a la región del Sahel que disputa con Francia", comentó a Efe Ahmed uld Maaloum, presidente del Sindicato de Periodistas Mauritanos.

La punta de lanza de esta gira es "sin duda" Mali, pero Mauritania tiene una importancia capital para la seguridad regional.

Y es que el analista recuerda que Mauritania, cuyo ministro de Defensa firmó en 2022 acuerdos militares en Moscú, es el único país del Sahel cuyas fronteras son totalmente seguras frente a la amenaza terrorista.

Según el analista maliense Alex Kalambry, Moscú no quiere limitarse a la cooperación militar y de seguridad y también busca participar en proyectos mineros, energéticos y de infraestructuras.

Al aterrizar en la región Lavrov denunció "presiones sin precedentes" sobre los países africanos para que condenen "la operación militar especial" en Ucrania.

(c) Agencia EFE