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Seinfeld en Netflix: cuáles son los quince episodios que hay que ver sí o sí de la sitcom “sobre nada”

Foto promocional de la serie Seinfeld
Foto promocional de la serie Seinfeld

Hoy es el gran día. Luego de varios meses en los que Seinfeld no se encontrara en ninguna plataforma, Netflix ya sumó a su catálogo los 180 episodios de la que muchos consideran la mejor sitcom de la historia a tiempo para el fin de semana. Y el regreso de los fab four televisivos al mercado del streaming local es la excusa ideal para repasar sus mejores quince episodios.

1.”The Deal” (Episodio 9, temporada 2): Jerry (Jerry Seinfeld) y Elaine (Julia Louis-Dreyfus) se llevaban mejor como amigos que como pareja. Sin embargo, los ejecutivos de la NBC siempre le insistían a Larry David, coordinador de la sitcom, con que ambos volvieran a tener un vínculo romántico. Él se negaba tajantemente, pero lo más cerca que estuvo de darles el gusto, fue en este episodio en el que ellos establecían un acuerdo que combinaba sexo y amistad. Se trata de un episodio adelantadísimo a su época, que reflejaba el espíritu libre de Elanie y Jerry, muy a contrapelo de la conservadora mirada de la televisión de la época.

2. “The Parking Garage” (Episodio 6, Temporada 3): una anécdota que a todos les sucedió alguna vez, y que aquí se transforma en la trama de un capítulo entero. Los protagonistas olvidan dónde estacionaron su auto en el garage de un shopping, y a lo largo de 22 minutos, intentan encontrarlo. Un episodio de esos que Larry David amaba y que da cuenta del original estilo del guionista. “The Parking Garage” es ideal para maridar con “The Chinese Restaurant”, otro clásico seinfeldiano sobre lo mucho que puede suceder a partir de una anécdota (casi) insignificante.

3. “The Pen” (Episodio 3, Temporada 3): cuando David descubrió las comunidades de jubilados instaladas en Florida, comprendió que ese era un mundo que merecía ser retratado. Y con esa idea en mente escribió este episodio que transcurre en el complejo en la que están instalados los padres de Jerry. Durante unos días de descanso en Florida, Elaine y Seinfeld sufren todo tipo de pequeños calvarios. Este episodio es una rareza porque se trata del segundo (y último) capítulo de la serie que no cuenta con las actuaciones de los cuatro protagonistas. Y si bien ese es un punto en contra, “The Pen” aún sirve para comprobar el poder de observación de David, y cómo podía hacer comedia utilizando todos los ámbitos posibles.

4. “The Contest” (Episodio 11, Temporada 4): este capítulo marcó un antes y un después en la historia de esta ficción, y fue clave en la construcción del mito Seinfeld para la posteridad. Los protagonistas hacen una apuesta sobre cuánto aguantan, parafraseando a la madre de George (Jason Alexander), “sin tratar a su cuerpo como un parque de diversiones”. A partir de ahí, infinidad de situaciones sobre la tentación de la autosatisfacción, retratada a través de ingeniosos pasos de comedia.

5.” The Pilot” (Episodios 23 y 24, Temporada 4): a lo largo de la cuarta temporada, Larry David ensayó construir una gran trama con continuidad que avanzara a través de los 24 episodios emitidos ese año. Ese gran arco giraba alrededor de Seinfeld y George primero desarrollando y luego presentando un piloto para una sitcom. Y con esa excusa, la serie pone en práctica una idea brillante, en la que la ficción se convierte en espejo absurdo de la realidad, un ejercicio que siempre obsesionó a Seinfeld y David, y que en estos dos episodios encuentra su punto más alto.

6. “The Puffy Shirt” (Episodio 2, Temporada 5): un guionista de la serie recordó lo difícil que fue tener una novia que hablaba muy bajito, al punto de que sus intervenciones eran casi imperceptibles. Y esa idea se transformó en un episodio brillante, en el que Jerry acepta lucir una absurda camisa por pedido de una pareja de Kramer (Michael Richards).

7. “The Race” (Episodio 10, Temporada 6): Una vez más, Seinfeld utiliza algunos homenajes a su admirado Superman, para un episodio en el que Jerry comienza una relación con una mujer llamada Lois, a la que debe impresionar ganando una carrera contra un viejo compañero de colegio. Por otra parte, el guiño a las listas negras y a la paranoia comunista de los años 50 en Hollywood también tienen una referencia en este episodio que nuevamente, demuestra que para esta sitcom, jamás existieron los tabúes.

8. “The Mom & Pop Store” (Episodio 8, Temporada 6): George es un personaje con mil capas de sentido, y en cada una de ellas vive una dimensión cada vez más profunda de miseria y egocentrismo. Y en este episodio, el personaje demuestra un alarmante narcisismo cuando compra un auto usado solo porque uno de sus dueños fue el actor Jon Voight.

9. “The Soup Nazi” (Episodio 6, Temporada 7): solo necesitó un capítulo para convertirse en uno de los personajes secundarios más notables de la serie. “El nazi de la sopa” es un cocinero especializado en ese plato que prepara tentadoras creaciones, pero su código de admisión y permanencia es tan estricto y absurdo en su aplicación, que se cansa de echar clientes de su local. Los personajes no tardan en chocar con él, hasta que Elaine encuentra su punto débil. Por cierto, el cocinero en el que se basó este personaje realmente existe, su nombre es Ali “Al” Yeganeh y aún conserva su local en el Midtown de Nueva York, convertido en un lugar de peregrinaje para los fans de la serie.

10. “The Sponge” (Episodio 9, Temporada 7): uno de los grandes ingredientes del show era el modo en el que se retrataba a Elaine. Para ella no había historias diferenciadas al resto del elenco, no tenía tramas ni delicadas ni románticas, sino que su personaje atravesaba los mismos dilemas que sus pares masculinos. Y una de sus mayores encrucijadas surgió cuando descubrió que su método anticonceptivo predilecto, la esponja anticonceptiva, estaba a punto de dejar de fabricarse. Eso la lleva a elegir con mucho cuidado a sus parejas sexuales.

11. “The Rye” (Episodio 11, Temporada 7): si uno compra un postre para una cena en casa ajena y los huéspedes no lo sirven, ¿corresponde llevárselo de nuevo a casa? Ese es un dilema que, según Seinfeld, vale la pena debatir en un episodio que explota como ningún otro las habilidades para la comedia de Jerry Stiller y Estelle Harris (encargados de personificar a los padres de George).

12. “The Invitations” (Episodio 24, Temporada 7): este capítulo contiene el que seguramente es el paso de humor más negro en todo Seinfeld (que no es poco decir). Con George a días de distancia de su boda, un hecho fortuito le permitirá desembarazarse de Susan (Heidi Swedberg) y decirle adiós a la temida vida conyugal. “The Invitations” es Larry David tensando los límites de lo políticamente correcto, y demostrándole al público que el humor podía encontrarse aún en las situaciones más terribles.

13. “The Bizarro Jerry” (Episodio 3, Temporada 8): cuando en la séptima temporada Larry David abandonó su puesto de showrunner, Jerry ocupó su lugar y le dio al show un estilo muy distinto. Y entre los muchos caprichos que pudo darse como capitán, hubo uno en el que volvió a homenajear a Superman, a través de una trama que presentó las versiones alternativas de Jerry, George y Kramer (spoiler alert: resulta que son buena gente).

14. “The Merv Griffin Show” (Episodio 6, Temporada 9): una mujer tiene una colección de muñecos vintage, y Jerry comienza una relación con ella solo para jugar con unos viejos G.I. Joe. Si eso es moralmente reprobable o no, a la serie no le importa tanto como el disfrute que significa reencontrarse con los juguetes de la infancia.

15. “The Puerto Rican Day” (Episodio 20, Temporada 9): el año final del show, lejos de mostrar agotamiento creativo, fue uno de los mejores de toda su trayectoria. Homenajes a Harold Pinter, a los videojuegos clásicos y una oda a los encantos de la manteca fueron algunos de los inesperados temas de la temporada. Y en ese marco, “The Puerto Rican Day” gira alrededor de cómo los protagonistas viven mil torturas a lo largo de un desfile eterno de celebración. Esta trama fue una carta de amor al espíritu inicial de la serie, y a esos capítulos con los que Larry David impuso un estilo que hizo de Seinfeld la gran sitcom de todos los tiempos.