Seis boletos hunden a joven abridor de los Marlins que arrastran un viejo problema ofensivo

No por casualidad el vestidor de Edward Cabrera está próximo al de Sandy Alcántara. Los Marlins quieren que el joven lanzador dominicano aprenda y absorba todo lo que pueda del ganador del Cy Young de la Liga Nacional, como si la cercanía fuera prueba de transferencia.

Nadie duda del talento de Edwards, quien ya en la temporada pasada dio muestras de su talento y ahora volvió a demostrarlo en la derrota de sábado 6-2 ante los Mets de Nueva York, una de las alineaciones más inteligentes de las Grandes Ligas.

Pero aún queda un camino por transitar para acercarse a lo que es hoy en día un Alcántara, el mejor modelo que pudiera encontrarse para Cabrera, convertido en el tercer hombre de la rotación y una pieza muy valiosa si los peces pretenden competir en esta temporada.

La muestra de que el proceso puede tardar un poco son esas seis bases por bola que el quisqueyano le regaló a los inquilinos de Queens que le hicieron trabajar por cada lanzamiento y que al final le hicieron salir del montículo con apenas cuatro entradas de trabajo.

“No es lo que deseaba que sucediera, pero no pude controlarlo’‘, explicó Cabrera. “Voy a trabajar fuerte para que en la próxima salida esto no se repita. Tengo que pasar la página. Lo bueno es que siempre me mantengo positivo y se que voy a mejorar’‘.

Lo cierto es que Alcántara regaló cuatro pasaportes en su primera apertura, lo mismo que Jesús Luzardo en la suya, pero seis de parte de Cabrera en un esfuerzo perdedor apuntan a una tendencia que los peces deberían evitar a toda costa.

“Siento que estamos enfrentando a un equipo muy bueno e inteligente’‘, apuntó el manager Skip Schumaker. “Pero puede haber algún tipo de presión en este inicio de temporada. Es una combinación de factores’‘.

Nueva York pisó la goma en la segunda entrada con un elevado de sacrificio de Omar Narváez, pero Miami ripostó con un cuadrangular de dos carreras de Nick Fortes, quien fue titular por segunda ocasión en fila y parece que compartirá bastante tiempo de juego con Jacob Stallings.

La ventaja de los peces duraría bien poco, porque en la cuarta los Mets empataron con un sencillo impulsor de Narváez y tomarían el comando del juego con un doble de Pete Alonso -ya comienza a calentarse- en la siguiente entrada que remolcaría Jeff McNeil.

Mark Canha se ocuparía de distanciar a su equipo de manera definitiva al traer para el plato la cuarta carrera en el quinto con un indiscutible y la sexta en el séptimo con su primer cuadrangular de la temporada, mientras el relevo se encargaba de silenciar a unos Marlins que perdieron varias oportunidades de anotar y dejaron a 10 hombres en las almohadillas.

Los Marlins han bateado 25 hits en sus tres primeros partidos -incluyendo siete en total (y cuatro el sábado) del Luis Arraez, actual campeón de bateo de la Liga Americana, pero sólo han anotado siete carreras, mostrando que la ofensiva oportuna sigue siendo un problema.

En esta ocasión se fueron de 7-0 con corredores en posición de anotar y en los tres primeros desafíos llevan de 22-3 en esas situaciones.

Los Mets, por el contrario, siguieron con su tarea de desmantelar a los peces y sumaron una más en la novena con un doble de Starling Marte, aquel que alguna vez brilara en este mismo loanDepot park con el uniforme de casa.