Shakira y Miley Cyrus el ejemplo de la Era de Acuario y cómo influye a las mujeres | Opinión

El sufrimiento ajeno provoca interés, y morbo. Shakira y Miley Cyrus, recientemente rompieron récords con sus canciones catalogadas como venganzas contra sus exparejas. En la recién comenzada Era de Acuario, las mujeres lucharán por su individualidad, y la ideología feminista, que ya ha comenzado, se volverá más popular en nuestra sociedad porque Acuario se trata de mujeres fuertes.

Urano, el planeta que rige a Acuario, simboliza la libertad, y Acuario que es capitaneado por él, simboliza la comprensión edificada sobre los valores y principios de humildad e igualdad. En un futuro cercano, las relaciones entre hombres y mujeres no se asentarán en el deseo de dominar al otro sexo, como antes, sino en los ideales de equidad, armonía mutua y búsqueda de la unidad espiritual.

La Era de Acuario, que recién ha comenzado, aviva vibraciones cósmicas que reclaman de las personas que vivimos en el planeta Tierra atributos que sintonicen con esta nueva fase. Acuario, un signo que detesta los estereotipos es impredecible y honesto, y esas serán las características humanas de este nuevo periodo. La Era de Acuario no es pacífica, porque, aunque Acuario es simpático y amigable, no admite las injusticias y puede llegar a ser impetuoso.

Durante la Era de Acuario las mujeres mostrarán conductas típicas de Leo, el signo opuesto a Acuario, y la idiosincrasia de la mujer será uno de los factores más importantes en esta Era. La corriente feminista será más notoria en estos tiempos, porque Urano, el planeta regente de Acuario, simboliza la libertad, y Acuario es símbolo de la comprensión cimentada sobre los principios del respeto y la igualdad. Durante esta Era de Acuario, la personalidad de la mujer brillará más que la del hombre, porque Leo es Fuego, y Acuario Aire. Las mujeres reclamarán atención artísticamente, y revelarán su potencial creativo e individualidad con mucha energía.

La figura de una leona simboliza a la mujer en la Era de Acuario. En la naturaleza, las leonas son las encargadas de cazar, y en las manadas su forma de existir es libre, por eso cada día hay más mujeres que aplanan su camino hacia la autonomía, aunque tengan que expresar la ferocidad del signo de Leo.

En la sociedad aún subsisten algunos remanentes de la Era de Piscis donde los derechos de las mujeres son ignorados. Las mujeres nos hemos liberado de algunas cosas impuestas por el machismo y adquirido ciertas igualdades, pero aún se mantienen intactos modelos sociales que nos roban nuestros derechos fundamentales, y nos son asignadas obligaciones deshonrosas, excluyentes, y chantajistas.

En el mundo actual se han instituido estilos más perspicaces de explotación en los que nosotras las mujeres hemos sido partícipes. La sociedad de consumo explota los atributos sexuales femeninos asegurándose fantásticos ingresos en base al estereotipo de la mujer como símbolo sexual. La imagen, auto valía, y autoestima de la mujer moderna están relacionadas a la forma de vestir, a su belleza física y sexualidad, más que a sus capacidades intelectuales.

La situación de nosotras las mujeres está a punto de transformarse drásticamente porque la Era de Acuario trae consigo el quebrantamiento del exclusivismo, para ponerse en consonancia con los beneficios colectivos, que, sólo adquiriendo justicia social, compasión, paz y sabiduría pueden conseguirse.

El tránsito de Plutón hacia el signo de Acuario, la regencia del planeta Urano sobre este signo, y la naturaleza propia de Acuario, harán surgir transformaciones repentinas y sucesos violentos que conllevarán a una reforma absoluta del rol de las mujeres. Es hora de que el mundo sepa que nosotras no somos mercancías para ser traficadas, abusadas, encarceladas, que somo dueñas de nuestros cuerpos, y que nadie puede negarnos un aborto cuando somos violadas. Nosotras vamos a triunfar porque Urano está asociado con el feminismo, y describe la liberación de cualquiera que esté atado o encarcelado.

Es imprescindible razonar que dos fuerzas opuestas no tienen que odiarse mutuamente, estas fuerzas tienen, y deben, aprender a ajustarse y respetarse mutuamente. Los conceptos de masculino y femenino ya han causado bastante estragos y antagonismos.

Si analizamos, en este jueguito de las “mujeres y los hombres”, solo tenemos la capacidad de conocernos a nosotros mismos colocados frente a frente como dos equipos contrarios, y en ese contexto, cualquiera que sea el equipo en que nos coloquemos, nos creemos que estamos al lado de los justos, las víctimas, o bien de los que someten, para evitar ser sometidos. En el marco de este enfoque, siempre nos estamos protegiendo de algo o de alguien, y este punto de vista no sólo incluye nuestras relaciones personales, comprende también nuestra vida social y profesional. Es triste ver cómo hemos olvidado que nuestra verdadera esencia no se puede dividir en dos equipos, ni siquiera está en las manos de los jugadores, sino en el eje de lo que concibe este “juego”, es decir, en nuestra alma..