Taiwán se enfrentó a China en el pasado y mantiene su decisión de defenderse, dice presidenta

FOTO DE ARCHIVO. La presidenta de Taiwán, Tsai Ing-wen, pronuncia un discurso durante su visita a una base naval en Suao, Yilan, Taiwán

Por Ben Blanchard y Sarah Wu

TAIPÉI, 23 ago (Reuters) - Taiwán se enfrentó a los militares chinos hace seis décadas, cuando sus fuerzas bombardearon las islas taiwanesas en alta mar, y esa determinación de defender la patria continúa hasta el día de hoy, dijo el martes la presidenta, Tsai Ing-wen, a un grupo de exresponsables estadounidenses de visita.

Las tensiones entre Taiwán y China se han disparado en el último mes tras la visita a Taipéi de la presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Nancy Pelosi. China organizó ejercicios militares cerca de Taiwán para expresar su enfado por lo que considera un mayor apoyo de Estados Unidos a la isla que Pekín considera territorio chino soberano.

Al reunirse con una delegación de exresponsables estadounidenses que ahora se encuentran en la Hoover Institution de la Universidad de Stanford, Tsai se refirió a los ataques de China durante más de un mes a las islas de Kinmen y Matsu, controladas por Taiwán, justo frente a la costa china, que comenzaron en agosto de 1958.

"Hace sesenta y cuatro años, durante la batalla del 23 de agosto, nuestros soldados y civiles actuaron de forma solidaria y salvaguardaron Taiwán, de modo que hoy tenemos el Taiwán democrático", dijo, utilizando el término común taiwanés para referirse a esa campaña, que terminó en un punto muerto al no conseguir China tomar las islas.

"Aquella batalla para proteger nuestra patria demostró al mundo que ninguna amenaza de ningún tipo podía hacer tambalear la determinación del pueblo taiwanés de defender su nación, ni en el pasado, ni ahora, ni en el futuro", dijo Tsai.

"Nosotros también mostraremos al mundo que el pueblo de Taiwán tiene tanto la determinación como la confianza para salvaguardar la paz, la seguridad, la libertad y la prosperidad para nosotros mismos".

En 1958, Taiwán contraatacó con el apoyo de Estados Unidos, que envió equipamiento militar, incluidos los avanzados misiles antiaéreos Sidewinder, que dieron a Taiwán una ventaja tecnológica.

A menudo llamada la "Segunda crisis del estrecho de Taiwán", fue la última vez que las fuerzas taiwanesas se enfrentaron a China a gran escala.

James O. Ellis, ahora miembro visitante de Hoover y almirante retirado de la marina estadounidense, dijo que la presencia de su delegación en Taiwán reafirmaba el compromiso del pueblo estadounidense de profundizar en la cooperación.

"En consonancia con la Ley de Relaciones con Taiwán, parte de esta cooperación implica el fortalecimiento de las capacidades de Taiwán para la autodefensa, así como la capacidad de Estados Unidos para disuadir y resistir cualquier recurso a la fuerza a través del estrecho de Taiwán", dijo Ellis a Tsai, en referencia a una ley estadounidense que le obliga a proporcionar a Taiwán los medios para defenderse.

Estados Unidos, que se deshizo de las relaciones diplomáticas formales con Taipéi en favor de Pekín en 1979, sigue siendo la fuente más importante de armas para Taiwán.

(Información de Ben Blanchard y Sarah Wu; editado en español por Benjamín Mejías Valencia)