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This Is Us: con la tristeza de una inminente pérdida, comenzó la última temporada de la serie

This Is Us: con la tristeza de una inminente pérdida, comenzó la última temporada de la serie
NBC

La quinta temporada de This Is Us se había gestado en plena pandemia, contexto ante el cual su showrunner, el guionista y director Dan Fogelman, debió tomar una decisión compleja: incorporar el coronavirus a la trama o acompañar a los personajes por fuera de la coyuntura. Con algunas demoras lógicas en su rodaje, la exitosa serie de NBC que en nuestro país se puede ver por Star+, se había inclinado por la primera opción y el entramado narrativo había sufrido en el proceso.

Las sobreexplicaciones acerca de la pandemia para justificar las acciones de los personajes terminaban quitándoles peso a tópicos clave como la paternidad de Kevin (Justin Hartley), su reconciliación con su hermano Randall (Sterling K. Brown), y la enfermedad de su madre Rebecca (Mandy Moore). Sin embargo, el equipo de guionistas se guardó astutamente un as bajo la manga para un final en el que, como siempre en This Is Us, permitió a su audiencia ser testigo de una vuelta de tuerca que, en esta ocasión, tuvo a Kate (Chrissy Metz) como protagonista. En un juego de espejos, la serie mostraba cómo Madison (Caitlin Thompson) cancelaba su boda con Kevin, mientras que en el futuro Kate volvía a casarse. Con Toby (Chris Sullivan) fuera de escena, se revelaba que su segundo marido iba a ser su actual compañero de trabajo, un plot twist a la medida de This Is Us que volvía a abrir el juego para sus últimos 18 episodios.

En su regreso este jueves con “The Challenger”, nos hallamos con una movida inesperada para la dinámica de la serie que reflotó el género de los dramas familiares: This Is Us no volvió ni con un flashback pomposo ni con un flashforward de la misma índole. Por el contrario, Fogelman -guionista de este episodio- trabajó el capítulo eludiendo los subrayados y con cierto toque intimista que beneficia a todas las subtramas, si bien algunas funcionan mejor que otras . Un rasgo distintivo de la producción es el énfasis que hace en las conexiones y en cómo un hecho puede repercutir a posteriori del modo menos pensado (la base del sobrecargado largometraje de 2018 del showrunner, La vida misma), y en esta vuelta se toma a la explosión del transbordador Challenger de 1986 como punto de partida para explorar el efecto que esa tragedia tuvo en “the big three”, los tres hermanos protagonistas.

De esta manera, en el pasado el foco está puesto en cómo Kate, Randall y Kevin lidian con un episodio traumático, y al mismo tiempo en cómo Rebecca y Jack (Milo Ventiglimia) los ayudan a navegar sus reflexiones, miedos, e interrogantes. Las conversaciones nocturnas del matrimonio, su propio pavor ante la falta de herramientas para transitar la paternidad, siempre fueron un punto fuerte de la serie, apuntalado por la gran química que supieron cosechar Moore y Ventimiglia. En cuanto a los niños, lo que sucede con Kate queda en un segundo plano, y ya con seis temporadas a cuestas podríamos afirmar que This Is Us nunca logró darle un buen material a Metz. Por el contrario, las reacciones de Randall y Kevin están muy bien trabajadas: el primero es comparado por su madre con Holden Caulfield, protagonista de El guardián entre el centeno de J.D. Salinger; y el segundo es descrito como un joven con la fortaleza suficiente como para lograr cualquier cosa que se proponga.

Sterling K. Brown (Randall), Chrissy Metz (Kate) y Justin Hartley (Kevin)
NBC


Sterling K. Brown (Randall), Chrissy Metz (Kate) y Justin Hartley (Kevin) (NBC/)

Como podía preverse si consideramos que la serie está anclada en el efecto mariposa, en el presente Kevin recuerda el año de la explosión del Challenger como uno bisagra en su vida, y el porqué está a la vista. El Kevin adulto -la serie abre, fiel a su tradición, con un cumpleaños, y ahora los hermanos celebran sus 41- se comporta con un mecanismo de defensa claro: se pone una coraza para no ahondar en lo doloroso. A diferencia de temporadas previas, ya no tapa lo incómodo con el alcohol sino con el trabajo, y su incorporación al reboot de la sitcom The Manny que lo llevó a la fama responde a un deseo de ser un papá presente, pero es también una regresión a un momento de su vida en el que ocultaba sus inseguridades detrás de un gag.

En el caso de Randall, su necesidad de salvar al mundo y prevenir el sufrimiento ajeno (de allí la analogía con Holden) lo conduce a pagar la fianza del ladrón que ingresó a su casa para así poder rescatarlo de la indigencia y las adicciones. De ese modo decide pasar el día de su cumpleaños en lugar de estar con su esposa Beth (Susan Kelechi Watson): esperando a ese hombre ahora libre en un centro de rehabilitación. El problema empieza cuando éste no aparece y Randall se enfrenta a su propio talón de Aquiles: la muerte de sus padres biológicos y de su padre adoptivo, los tres adictos. Se trata de un punto de partida interesante que recuerda a las sesiones de terapia de Randall con una de sus psicólogas, brillantemente interpretada por Pamela Adlon. Será cuestión de esperar para ver si la serie retoma una pregunta que siempre sobrevuela a Randall: hasta qué punto su altruismo va en detrimento de la aceptación de los traumas de su pasado, sobre todo cuando está de cara a una inminente pérdida.

El elenco de This Is Us
NBC


El elenco de This Is Us (NBC/)

Esto nos conduce al estado de salud de Rebecca. Así como la muerte de Jack se convirtió en la mayoría de las temporadas en el hilo conductor de los episodios -desde la pregunta de cómo murió hasta los coletazos de esa tragedia familiar-, This Is Us se ha tomado su tiempo para trazar el recorrido de la matriarca. En la cuarta temporada, más precisamente en el episodio “Clouds”, ya comenzaba a desprenderse una tristeza en la historia de Rebecca que la serie ratifica con este regreso. El abordaje de la enfermedad de Alzheimer es devastador pero no porque se recurra a golpes bajos. Por el contrario, los huecos que Rebecca ya no puede llenar -hay uno en particular en este nuevo episodio- se muestran desde un costado mundano que hace que el registro del avance de la enfermedad sea aún más doloroso . No es casual que el capítulo concluya con ella sentada en la cama, intentando una vez más recordar una palabra que, a su vez, está ligada a su propia niñez y a la de sus hijos.

Esa secuencia, muy bien comandada por Moore, marca el tono de esta esperada vuelta de This is Us, demuestra que la serie es mucho más que una sumatoria de giros de guion, y que en donde más brilla es en lo simple, en lo cotidiano, en lo reconocible . En definitiva, en todo aquello que hizo de la producción un verdadero éxito con el que millones de familias pudieron conectar.