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Toc, toc: qué bonita conmemoración de la fundación de Tenochtitlan, pero… ¡es otra fecha!

Hoy, el presidente Andrés Manuel López Obrador decidió hacer un evento en el Templo Mayor, en el Centro Histórico de la Ciudad de México, para conmemorar la fundación de Tenochtitlan. Todo muy bonito en este lluvioso y fresco día, pero hay un problemita: historiadores y arqueólogos aseguran que la fecha está maiceada, y que todavía faltan unos añitos más para que se cumplan 700 años de que se fundó la ciudad mexica.

¿Entonces? ¿Cuál es la fecha real de la fundación de Tenochtitlan? ¿Se puede saber con certeza esa fecha tan importante? ¿Por qué el presidente, que dice que le encanta leer de historia, conmemora la fecha por adelantado?

En realidad la narración de la fundación de la ciudad está llena de mitos que dan pie a que se tergiverse el hecho, o hay relatos que se toman como ciertos cuando, en realidad, aunque son importantes para la tradición, no son verídicos o precisos.

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El águila sobre el nopal: es un simbolismo bonito, pero falso

Empecemos por esto: la historia sobre que el pueblo azteca decidió fundar la ciudad en el lugar donde vieron a un águila real devorando a una serpiente sobre un nopal, no es real, sino una parte de la tradición.

En un curso breve que el arqueólogo e historiador Matos Moctezuma impartió en la UNAM, el académico desmintió que la fundación de Tenochtitlan haya sido por el avistamiento del animal.

Pero vámonos por partes: los aztecas, es decir, las personas que salieron de Aztlán —una ciudad que, por cierto, aún es un misterior para historiadores y arqueólogos—, fueron migrando por mucho tiempo guiados por Huitzilopochtli, la principal deidad asociada al Sol.

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La primera parada fue, según narra Moctezuma, Coatepec (que significa Cerro de la serpiente); pero pronto empezaron los conflictos internos: había quienes querían continuar con la migración, mientras otros preferían permanecer en donde ya estaban.

Así que el grupo que decidió continuar, llegó hasta Chapultepec donde, se dice, sucedió el avistamiento del águila en el nopal. Pero, como hace hincapié Matos Moctezuma, eso jamás ocurrió.

Ahí ya vivían algunos grupos y fue el señor del pueblo de Azcapotzalco quien les ofreció terrenos en Chapultepec para que pudieran asentarse, ¿qué quería a cambio? Tributos y asistencia en guerras de conquista.

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¿De dónde salió lo del nopal, el águila y la serpiente?

Después de que los mexicas decidieron asentarse en Chapultepec y ganaron fuerza, lograron vencer a los tepanecas y conquistaron la ciudad de Azcapotzalco.

Hernando de Alvarado Tezozómoc, en su Crónica Mexicana de 1598, destaca que esta conquista empujó al nacimiento de México-Tenochtitlan.

“De manera que son estos (los valerosos conquistadores de Azcapotzalco) los principales valerosos mexicanos y los fundadores de México-Tenochtitlan, y los primeros capitanes y conquistadores que ganaron y ensancharon esta gran república y corte mexicana, y las tierras y pueblos que pusieron en sujeción y cabeza Mexicana-Tenochtitlan”, dice un fragmento de ‘Crónica Mexicana‘ que se encuentra en el Archivo General de la Nación.

Bueno, pues historiadores, arqueólogos e investigadores coinciden en que la narrativa de la fundación de la ciudad a raíz del avistamiento del águila sobre un nopal devorando a una serpiente inició justo cuando los mexicas conquistaron Azcapotzalco y ganaron fuerza en la región.

Como en muchas ocasiones: la historia la escriben los vencedores, en este caso los mexicas comenzaron a manejar la narrativa del avistamiento.

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Casa de las Águilas, en el Templo Mayor. Foto: Cuartoscuro
Casa de las Águilas, en el Templo Mayor. Foto: Cuartoscuro

Casa de las Águilas, en el Templo Mayor. (Foto: Cuartoscuro)

Entonces… ¿cuándo sí se fundó Tenochtitlan?

Para allá vamos, no desesperes. Fuentes del siglo XVI señalan la fecha 2 Casa en el calendario mexica, que corresponde al 13 de marzo de 1325, como la más acertada a la fundación de la ciudad.

Hay algunas otras teorías que podrían apuntar a que fue en 1324 o incluso hasta 1363/1364, como señala el investigador de lengua náhuatl francés nacionalizado mexicano, Patrick Johansson; aún así, la fecha más aceptada corresponde a 1325 y, hasta ahora, ninguna coincide en realidad con el 13 de mayo de 1321 como el presidente López Obrador ha insistido (y hasta realizó un evento con la expresidenta brasileña Dilma Rousseff como invitada).

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“Varias fuentes indican que fue en el año 1325. Y recalco esto porque ahora andan por ahí mencionando el año de 1321. Es una manipulación histórica que se está haciendo de ese año porque quieren empatarlo con 1521, la caída de Tenochtitlan; con 1821, la consumación de la Independencia; y con este año, 2021. No es correcto que se manipule la historia así”, dijo Matos en el curso que impartió en la UNAM.

Por supuesto, otros historiadores, como Alejandro Rosas, han reaccionado de la misma forma que Matos:

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