Vacaciones de invierno: cómo está la curva de casos de coronavirus en Mar del Plata y Pinamar

Los casos de coronavirus en la costa son casi la mitad que hace un mes y hasta una tercera parte de los que había a fines de mayo
Mauro V. Rizzi

MAR DEL PLATA.— Se hizo viral, hace apenas diez días, el video grabado por enfermeras del Hospital Dr. Carlos Macías de Mar de Ajó que bailaban por los pasillos para festejar que por primera vez en casi un año y medio ya no tenían pacientes con coronavirus entre los internados. Es que la pandemia empieza a dar respiros en coincidencia con estas vacaciones de invierno, positivas a la fecha por el volumen de turistas que decidió buscar descanso por la costa atlántica y zona, aun cuando los riesgos de contagio siguen en pie.

En todo el corredor se advierte una significativa merma de nuevos infectados y, con ella, de los positivos activos que son termómetro del estado de situación. Hoy son casi la mitad que hace un mes y hasta una tercera parte de los que había a fines de mayo.

Vacaciones de invierno familia en Mar del Plata
Mauro V. Rizzi


Vacaciones de invierno familia en Mar del Plata (Mauro V. Rizzi/)

Los resultados del nuevo escenario están a la vista, con vida comercial casi plena de la oferta de servicios. Se ven restaurantes y bares muy concurridos, la poca hotelería abierta se reactiva a cuentagotas tras la pausa que siguió a la temporada de verano y las propuestas de recreación tienen cada vez más aceptación, siempre con barbijos, protocolos y esas ganas de disfrutar con los más pequeños de lo que no se pudo durante tanto tiempo.

Las razones por las que los internados por Covid-19 pierden tanta masa muscular

“Nos animamos a viajar porque la situación se ve mejor, los chicos están muy cansados del encierro y solo entramos donde vemos que hay medidas de cuidado”, explica Verónica Rey, madre de dos niños, y acompañada por una prima mayor en este viaje desde Capital Federal. “Días sin lluvia son para playa, plazas y paseos”, afirma como receta para escaparle a lugares que impliquen riesgo.

Vacaciones de invierno en Mar del Plata
Mauro V. Rizzi


Vacaciones de invierno en Mar del Plata (Mauro V. Rizzi/)

La ocupación promedio ronda el 40% de las plazas de alojamiento tradicional. Quizás algo por encima se logró entre sábado y domingo. Y se espera que en el transcurso de esta semana se sostenga un ritmo similar, con el buen tiempo como necesario aliado.

“Gente hay e interés también, porque teníamos buena preventa, pero recién nos autorizaron a volver a navegar a partir del jueves”, explicó Eduardo Mayer, responsable de Anamora, el tradicional buque de paseo que no zarpaba desde fines de marzo por las restricciones sanitarias. “Hay recambio pero vemos que hay movimiento y buenas expectativas para lo que queda de vacaciones”, dijo a LA NACION.

Partido de la Costa

Por el Partido de la Costa, por ejemplo, aseguran que durante la última semana recibieron casi un 10% más de turistas que en la misma época de 2019, cuando todavía nadie hablaba de Covid en el mundo y los destinos del exterior, más cerca o más lejos, era una posibilidad abierta, tentadora y muy elegida entre los viajeros de mitad de año.

Durante este último fin de semana, el de mayor rendimiento en términos de arribos, previo a las lluvias del domingo, se vio mucha demanda en espacios gastronómicos. El buen tiempo favoreció el uso de las terrazas y decks, bien ventilados y más ajustados a las recomendaciones de los profesionales de salud para reducir la circulación del virus.

En Pinamar son 284 los residentes que sobrellevan el virus, por debajo de los 385 y 485 que se atendían hace 30 y 60 días
Mauro V. Rizzi


En Pinamar son 284 los residentes que sobrellevan el virus, por debajo de los 385 y 485 que se atendían hace 30 y 60 días (Mauro V. Rizzi/)

“Aprovechamos el sol, que hace la tarde un poquito más cálida, y almorzamos afuera y con plena vista al mar”, cuentan Francisco, Ramona, Leticia y Omar, dos matrimonios de La Plata que se instalaron en Cariló y disfrutaban rabas y pastas en las mesas exteriores del parador Cozumel. Había 15 minutos de espera y mucha gente sobre la arena.

Luego de períodos críticos y un reciente pico que se dio durante junio —en algunos lugares el momento con más casos desde marzo del año pasado—, en las áreas reservadas para cuadros de coronavirus en centros asistenciales de la región son mayoría las camas libres y el personal de salud tiene respiro para recuperarse de un esfuerzo titánico durante casi 15 meses.

Mar del Plata, principal centro turístico y de mayor población en el interior bonaerense, registraba hasta anoche 1825 pacientes en tratamiento contra 4215 que tenía hace dos meses y 2653 el 25 de junio. En Pinamar son 284 los residentes que sobrellevan el virus, por debajo de los 385 y 485 que se atendían hace 30 y 60 días. La mejor evolución en estadísticas la exhibe el Partido de la Costa: pasó de los 498 activos del 25 de mayo a los 155 que se informaron anoche.

Vacunatorio del Museo Mar, en Mar del Plata
Mauro V. Rizzi


Vacunatorio del Museo Mar, en Mar del Plata (Mauro V. Rizzi/)

Entre los responsables de la política sanitaria en la zona destacan el avance y mejor situación que significa la vacunación constante, aun cuando en muchos casos solo sea la primera dosis. Villa Gesell, por ejemplo, ya tiene más de 90% de su población mayor de 18 años —inscripta para turnos— que dio ese paso. Pero también están expectantes por una posible y cercana tercera ola.

En los distintos destinos turísticos, todos en la denominada Fase 3 según la escala de situación sanitaria que rige en la provincia de Buenos Aires, está habilitada la mayoría de los servicios turísticos. De la oferta bajo techo están habilitados cines, teatros y salas de juego, siempre con capacidad limitada para garantizar distanciamiento. La excepción son las salas de casino y bingos, que recién —y solo para tragamonedas— comenzaron a abrir en unos pocos que avanzaron a Fase 4.