Anuncios

Vucic dice que reconsiderará su boicot de la cumbre UE-Balcanes en Tirana

Belgrado, 2 dic (EFE).- El presidente de Serbia, Aleksandar Vucic, dijo este viernes que está dispuesto a reconsiderar su anunciado boicot de la cumbre entre la Unión Europea (UE) y los países de los Balcanes Occidentales la semana que viene en Tirana.

"No es problema que reconsidere con el Gobierno esa decisión si tiene sentido", declaró Vucic en rueda de prensa tras una reunión con el comisario de la UE para la Ampliación, Olivér Várhelyi.

El mandatario conservador populista reconoció que tanto el comisario europeo como la primera ministra serbia, Ana Brnabic, consideran que "Serbia debe estar en la cumbre en Tirana" para expresar sus posturas y preocupaciones.

Vucic había expresado anoche su malestar por la decisión del gobierno kosovar de nombrar como ministro de Comunidades a un político serbokosovar que no procede de un partido político controlado por Belgrado.

El mandatario considera que el nombramiento de Nenad Rasic, líder del partido moderado serbokosovar extraparlamentario PDS, viola la Constitución de Kosovo, ya que no fue acordado con los diputados serbokosovares del Parlamento en Pristina.

Tras llamar al primer ministro de Kosovo, el nacionalista Albin Kurti, "canalla terrorista", el mandatario serbio dijo que no acudirá a la reunión del próximo 6 de diciembre en Tirana.

Según Vucic, el primer ministro kosovar causa "cada semana nuevas tensiones y conflictos" y desde el inicio de año destruye cualquier posibilidad de diálogo de normalización entre las partes.

Varhelyi, por su parte, dijo hoy que el proceso de ampliación de la unión sigue siendo una de las principales prioridades de la UE.

"Es necesario el compromiso de todos, que Serbia esté a la mesa y que el líder de Serbia esté a la mesa", aseveró el eurocomisiario.

Nenad Rasic fue nombrado ministro después de que hace unas semanas los representantes serbios abandonaran las instituciones de Kosovo ante la exigencia de Pristina de que los serbokosovares dejen de usar matrículas de coches emitidas por Serbia.

Para regresar a las instituciones, los serbios exigen un estatus de autonomía para sus comunidades, situadas en la parte norte de Kosovo, algo que en realidad ya se había acordado en 2013.

Serbia no reconoce la independencia de Kosovo, proclamada por la mayoría albanokosovar en 2008 tras la guerra de 1998/99 y la represión serbia de los años 1980 y 1990.

Por otra parte, el comisario europeo pidió hoy a Serbia, candidato al ingreso comunitario, alinear su política exterior con la UE y sumarse a las sanciones europeas contra Rusia por la guerra en Ucrania, algo que Belgrado rechaza hasta ahora.

"La guerra tiene su impacto sobre el proceso de adhesión, y la alineación con la política exterior tiene un papel mayor porque Europa también ha sido atacada", advirtió Várhelyi a Serbia, que pese a la guerra considera a Rusia un tradicional e histórico aliado. EFE

sn/jk/vh

(foto)

(c) Agencia EFE