Los Óscar confían en la maestría de Jimmy Kimmel para evitar incidentes como el de Will Smith

La academia de Hollywood reconoció abiertamente que, en la gala de los Óscar del año pasado, no supo reaccionar de forma apropiada al bofetón que Will Smith propinó al cómico Chris Rock en riguroso directo, después de que este hiciera un chiste sobre la alopecia que padece Jada Pinkett Smith, esposa del astro de Hollywood. El intérprete permaneció en la ceremonia después de la agresión y, además, se le permitió subir al escenario para recoger su primera estatuilla dorada.

Eso sí, a posteriori la institución decidió vetar al artista de cara a futuros eventos, imponiéndole un castigo que en principio se extenderá a toda una década. Algunas voces críticas con la organización han dejado entrever que esa pena acabará reduciéndose, o desapareciendo por arte de magia, una vez que Will Smith haya culminado con éxito su estrategia de redención y vuelva a ganarse el favor de la opinión pública. Todavía es pronto para especular al respecto, especialmente porque el presidente de la academia, Bill Kramer, ha querido proyectar una imagen de fortaleza y profesionalidad, demostrando que tiene la lección bien aprendida.

La próxima gala de los premios cinematográficos más prestigiosos del mundo tendrá lugar en el Dolby Theater de Los Ángeles el próximo 12 de marzo. A fin de evitar imprevistos de esa naturaleza, o al menos para poder manejarlos con más diligencia, la organización ha formado un equipo especializado en la gestión de posibles crisis. Asimismo, Kramer ha puesto de manifiesto que confía en la dilatada experiencia y en el buen hacer del maestro de ceremonias, el humorista y presentador Jimmy Kimmel, si hubiera que lidiar con nuevos y desproporcionados sentimientos de agravio.

"Por eso hemos elegido a alguien como Jimmy, porque sabemos que será capaz de afrontar a la perfección todo lo que conlleva la televisión en directo. En televisión, las cosas no siempre salen como has planeado. Pero tenemos un maestro de ceremonias que sabe pivotar muy bien y gestionar esos momentos", ha argumentado Kramer sobre la pericia del cómico. "Pero también tenemos todo un equipo de crisis, algo que jamás habíamos hecho antes. Contemplamos diferentes escenarios. Nuestra esperanza es que podamos estar preparados ante situaciones que, en otras circunstancias, no anticiparíamos, pero que ahora nos planteamos como posibles", ha indicado.