Tras varios años alejada de los medios, Daniela Herrero volvió al teatro con una jugada propuesta

Tras varios años alejada de los medios, Daniela Herrero volvió al teatro con una jugada propuesta
Tras varios años alejada de los medios, Daniela Herrero volvió al teatro con una jugada propuesta

Daniela Herrero tenía apenas 16 años cuando su tema “Solo tus canciones” se convirtió en un éxito inmediato; corría el año 2001 y su nombre irrumpió cómo la gran promesa del rock argentino. Con la voz sonando en las radios, decidió dos años después probar suerte en la televisión con la tira Costumbres Argentinas (2003) y también le fue muy bien. Sin embargo, de a poco, se alejó de la actuación y si bien nunca dejó la música, decidió bajar el perfil. Hoy, a los 37, decidió volver a las tablas en Sex de la mano de José María Muscari y, luego del debut, se mostró feliz de haber tomado la decisión de regresar.

“¿Cómo estás?”, la abordó Gonzalo Vázquez, periodista de Intrusos en el Espectáculo, un día después de su debut en Sex. “Muy bien, muy contenta. Ayer estrenamos y, por lo menos para mí, fue alucinante”, compartió la artista sobre la puesta que volvió en Gorriti Center. “Hicimos un ensayo con Muscari antes de arrancar y fue espectacular” , detalló.

Luego, el movilero le contó que en el programa de América TV debatieron sobre la fama repentina y cómo eso influye en las personas y de inmediato le consultó por su experiencia. “Realmente pasa algo, se destapa una olla y después se te vienen encima muchas cosas, mucha responsabilidad”, ensayó Herrero a modo de respuesta. Luego, explicó que es una responsabilidad muy grande cumplir “el rol de comunicadora”. “En mi caso yo me lo tomo muy en serio, entonces a mí me costó bastante”, confesó.

Luego de pensarlo unos segundos, la actriz aseguró, con reservas, que padeció el hecho de haberse hecho famosa de la noche a la mañana. “Sí lo padecí, pero quiero quitarle ese peso porque siento que con el tiempo lo fui superando”, destacó, y agregó que el hecho de no estar tan presente en los medios es una elección. “ No me gusta mucho la exposición. Me gusta hacer mi trabajo de otro modo. Y en su momento estaba muy expuesta. Es abrumador estar en el ojo de los medios todo el tiempo” , explicó. Por último, y si bien recordó que cuando empezó era muy chica -”Tenía apenas 14 años”, exclamó- reconoció que con el tiempo pudo encontrarle el lado positivo: “Me hizo crecer un montón”, cerró.

Con su gran amor, la guitarra
Con su gran amor, la guitarra - Créditos: @Hernán Paz

Su lucha contra el bullying

A fines del año pasado, Herrero visitó a Jey Mammon en su ciclo de entrevistas Los Mamones, por América TV, y recordó sus épocas en el secundario y el bullying que sufrió. La cantante repasó el comienzo de su carrera y habló sobre la vorágine que debió atravesar siendo una adolescente. Según le explicó al conductor, no fue la clase de persona que se dejó llevar por el éxito; todo lo contrario, su mente seguía enfocada en los aspectos más tradicionales del día a día.

Así fue como, allá por 2001, rechazó una importante aparición en la revista Rolling Stone porque tenía que ir a rendir un examen de Geografía. Al final, quien estaba encargado de la nota fue a buscarla a la salida del colegio para poder realizarle un par de preguntas y, después de todo, Daniela terminó apareciendo en la portada.

“A mí no me importaba nada en esos tiempos”, admitió la cantante. “Me costaba mucho todo lo que tenía que ver con la exposición” . A pesar de estar tan comprometida con su educación, su vocación artística terminó teniendo más peso y a mitad de cuarto año de la secundaria se vio obligada a abandonar la institución.

La bella Daniela
La bella Daniela - Créditos: @Hernán Paz

Aunque la charla derivó en algunos chistes, el conductor decidió retomar el tema y surgió el bullying que debió enfrentar Herrero en su adolescencia. La cantante, entonces, admitió: “Sí, me costaba mucho porque -sobre todo las mujeres- había mucha competencia”. Las experiencias que se vio obligada a sobrellevar no fueron para nada placenteras. Sus compañeras de colegio no dejaban pasar un día sin atormentarla; el hostigamiento iba de mal en peor y, de acuerdo a lo que relató, pasaron de encerrarla en el baño hasta querer pegarle entre todas. Incluso llegaron a comprar una revista en donde ella aparecía en la tapa para dibujar genitales por encima de su cara.

“Siempre quise pasar desapercibida”, manifestó, poniendo un cierre a ese fragmento del programa para continuar con temáticas más alegres.