Los años traumáticos de la adolescencia de Gary Oldman

Gary Oldman encontró sus años de adolescencia 'traumáticos' porque no podía conseguir una novia y luchó con la pubertad.

El actor de 65 años, quien tiene a Alfie, de 34 años edad con su primera esposa, Lesley Manville, Gulliver, de 25 años y Charlie, de 23 años, con su tercera esposa, Donya Diorentino, no tiene 'buenos recuerdos' de su adolescencia y recordó mirar a su hijos en la misma etapa de sus vidas y estar agradecido de no tener que vivirla otra vez.

Así lo reveló a la revista Candis:

'No podrías pagarme lo suficiente para volver a mi adolescencia. Fue muy traumático No tengo buenos recuerdos de nada de eso. No me gustaba la escuela, tus genes se están reorganizando, tu piel está toda grasosa y te está saliendo acné, estás tratando de salir con chicas y te rechazan y, oh, Dios mío, no podría soportarlo. pasar por todo eso de nuevo.  Cuando mis hijos eran adolescentes, solía mirarlos y pensar: -¡Dios mío, no me gustaría volver allí!-'

Pero una cosa buena que le sucedió al actor cuando era adolescente fue ver 'Tha Raging Moon' en la televisión y tener una experiencia espiritual.

'Fue como un rayo. Estaba viendo esta película en la televisión cuando tenía 15 años y de repente decidí en ese momento: "Voy a ser actor. Nunca había estado en una obra de teatro en la escuela, ni siquiera había leído una obra de teatro, nunca me había interesado el drama ni nada por el estilo. Vi esta película, me conecté con ella y pensé: -¡Eso es lo que quiero hacer para ganarme la vida!- Fue como una experiencia espiritual. Fui a la escuela de teatro cuando tenía 17 años, y ahí fue cuando comenzó mi vida'.

Gary ha disfrutado de ser padre y enseñar a sus hijos lecciones básicas de vida de manera 'sencilla'.

'Se trata de aprender a comprometerse y darse cuenta de que la vida no se trata solo de ti. Se trata de enseñarles las cosas bastante simples a una edad temprana: no golpeen el cuchillo y el tenedor, digan por favor, digan gracias y aprendan a esperar su turno en la vida. Eso es muy importante. Si aprendes a esperar tu turno en Serpientes y escaleras, sabrás cuando seas mayor que no solo entras a un restaurante o a un banco y dices: "¡Estoy aquí!" Tienes que esperar. Puedes aprender lecciones de vida a través de un simple juego de serpientes y escaleras'.