El activo antiedad y antimanchas que la Unión Europea ha regulado, además del retinol
Otro potente despigmentante del mundo de la cosmética está bajo la lupa de las regulaciones de la Unión Europea. Ya no sólo será el retinol el que tenga restricciones, sino también otros muy utilizados como el ácido kójico. Pero tranquila, porque hay alternativas.
En los últimos meses, el ácido kójico ha sido muy aclamado y utilizado con frecuencia en el mundo de la cosmética por su eficacia como agente despigmentante, sobre todo en productos destinados a unificar el tono de la piel y reducir la hiperpigmentación. Sin embargo, una nueva normativa de la Unión Europea ha comenzado a regular su uso, colocando este ingrediente bajo restricciones similares a las impuestas recientemente al retinol. Según el Reglamento 2024/996 de la Unión Europea, el ácido kójico se ha añadido al apartado de ‘Restricciones’ del Anexo III del Reglamento de cosméticos 1223/2009. Los expertos nos cuentan por qué.
Pedro Catalá, doctor en Farmacia y experto en formulación, fundador de Twelve Beauty, explica que el ácido kójico actúa inhibiendo la enzima tirosinasa, esencial en la producción de melanina, el pigmento que proporciona color a la piel. Hasta ahora, el ácido kójico se empleaba en dosis de entre el 1% y el 4% pero a partir del 1 de febrero de 2025, su concentración máxima se reducirá al 1% en productos despigmentantes faciales y de manos. "El motivo de la restricción es que algunos estudios apuntan a que podría ser un disruptor endocrino", dice.
Como alternativa, él propone el sérum Ideal Brightening Corrective Serum, de Twelve Beauty, un despigmentante vegano y 100% natural que ha sustituido al ácido kójico por otras alternativas botánicas como la prímula, buddleja, verónica, menta o milenrama (96 €).
Los efectos secundarios del ácido kójico
A pesar de su popularidad, el uso del ácido kójico no está exento de efectos secundarios. Pedro Catalá menciona que, aún en dosis bajas (como el 0.2%), este ingrediente puede estar relacionado con irritaciones, dermatitis y alergias de contacto. "Hasta hace pocos años se extraía de la cáscara del arroz, pero ahora, gracias a la biotecnología, se obtiene ácido kójico en grandes cantidades a través de diferentes especies de hongos", explica.
Otros ingredientes recientemente regulados por la UE
El ácido kójico no es el único que está bajo el escrutinio de la Unión Europea. El retinol, otro componente muy apreciado en la industria del cuidado de la piel por sus propiedades antienvejecimiento, también ha sido objeto de regulaciones más estrictas.
Al igual que el ácido kójico, el retinol ha sido vinculado a posibles efectos secundarios y preocupaciones sobre su seguridad, lo que ha llevado a establecer límites de concentración en productos cosméticos. A partir de 2025, se impondrán límites más rigurosos a su uso, restringiendo su concentración para minimizar el riesgo de irritación y otros efectos adversos.
Además, otros ingredientes, como ciertos filtros solares y conservantes, también están siendo revisados. La tendencia hacia la regulación de estos activos se debe a la creciente preocupación por su impacto en la salud y el medio ambiente.
Muchos productos que contienen estos ingredientes deberán considerar una reformulación o retirarse del mercado, lo que sin duda, cambiará la forma en que se desarrollan los productos cosméticos en el futuro.La tendencia hacia ingredientes menos controvertidos y más seguros parece estar en aumento.
En este sentido cabe destacar a las alternativas botánicas, que están ganando terreno en el mercado por ofrecer ahora una forma prometedora de satisfacer la demanda de productos eficaces sin los riesgos asociados a algunos de los ingredientes más tradicionales.
Alternativas -botánicas- al ácido kójico
Dada la nueva regulación y los riesgos asociados, a muchas marcas les toca ahora una carrera a contrarreloj para buscar alternativaas más seguras y naturales. Catalá propone estas cinco alternativas botánicas igual de efectivas:
La milenrama
Este ingrediente contiene aceites esenciales e iridioides que pueden bloquear la acción de la tirosinasa, ofreciendo un enfoque natural para controlar la producción de melanina.
La menta
Rica en aceites esenciales, taninos y polifenoles, la menta ha demostrado tener propiedades que inhiben la producción de melanina, combinando frescura y eficacia.
La verónica
Esta planta está repleta de iridioides y flavonoides que ayudan a mejorar la luminosidad de la piel, contribuyendo a un tono más uniforme y radiante.
La prímula
Gracias a la concentración de saponinas, aceites esenciales y flavonoides, la prímula ilumina la piel de manera natural, ofreciendo un brillo saludable.
Buddleja
Con su riqueza en flavonoides antioxidantes y ácidos fenólicos, la buddleja ayuda a neutralizar los radicales libres, contribuyendo a prevenir la decoloración de la piel.
La regulación del ácido kójico y el retinol, junto con la revisión de otros ingredientes, refleja un esfuerzo proactivo por parte de la Unión Europea para proteger a los consumidores y promover la seguridad en la cosmética. Y puede que el cambio todavía cueste, pero no hay duda de que las alternativas botánicas destacadas por expertos como Pedro Catalá son un claro ejemplo de cómo se puede cuidar la piel de manera efectiva y natural, alineándose con las tendencias sin ponernos en riesgo. La industria cosmética se encuentra en una fase de transformación. Y el futuro se presenta apasionante...